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VALENCIA. Carles Torrecilla (Sabadell, 1972). es profesor de comercialización e investigación de mercados en Esade, pero ha centrado su actividad académica en el marketing estratégico. Siguiendo la máxima de la escuela de negocios, pone en práctica aquello que enseña. En su caso es fundador y socio de empresas como Praktik Hotels, los supermercados ecológicos Veritas, las panaderías Las Reposadas y miembro del consejo de varias empresas.

Torrecilla es habitual en El Hormiguero donde explica a Pablo Motos qué nos vamos a encontrar al salir de la crisis. Sus consejos los ha recopilado en un libro práctico titulado "El Plan B", un plan alternativo sobre el que reconstruirse.

-¿Qué nos encontraremos al salir de la crisis?
-Veremos un cambio social, otro económico con empresas que se han tenido que reinventar y seremos mucho más europeos.

-¿Pero la crisis lo ha parado todo?
-No. Ha parado la economía española, pero no la del mundo que ha seguido creciendo. Los únicos países que se han quedado en crecimiento cero han sido España, Italia, Grecia, Portugal y Sudán. El resto vuela. Incluso se han incorporado países de gran tamaño como China, India y Rusia. Esta perspectiva da conciencia a las empresas de que su crecimiento natural no procede de los mercados tradicionales. Así que las que estaban especializadas en un target nacional tienen que virar y empezar a producir miles de millones de unidades.

-¿Cree que las empresas españolas están preparadas para producir miles de millones de unidades?
-No. Son Pymes. Con un formato Pyme no podemos competir. Por tanto vamos a asistir en los próximos años a una oleada de fusiones brutal. La banca ya lo ha hecho. Y detrás irán las Pymes por pura cuestión de supervivencia ya que no tendrán ni acceso a la financiación.

-¿En qué escenario situamos a los autoempleados, freelances y autónomos?
-Este es un formato útil porque aporta flexibilidad a las grandes empresas por lo habrá mucha gente que verá que su trabajo se ha variabilizado. Habrá mucho más teletrabajo y trabajo por objetivos. No se tratará de trabajo retribuido por el tiempo dedicado sino retribuciones por el éxito obtenido. Otro gran cambio será la explosión de la clase media.

-¿Qué quiere decir?
-Antes teníamos muchos autónomos y empresarios Pyme que han tenido que cerrar. La mayoría acabará trabajando para grandes empresas. Tenderá a desaparecer las familias de un autónomo, con un sueldo no muy alto, que vivían de él y el dinero negro.

-¿Las grandes empresas están a favor de seguir contratando gente?
-Sí, lo que huyen es de la contratación rígida. Del modelo laboral anterior. El nuevo tras la reforma laboral anima la contratación porque no existen tantos impedimentos para contratar y despedir.

-¿Habrá menos autónomos?
-No lo sé. Pero la figura de aquel que en un despacho y con un ordenador hacía cositas esto es lo que cada vez tendrá menos sentido en un mundo globalizado porque no podrá competir.

-Se habla de lo que nos vamos a encontrar al salir de la crisis, pero ¿tenemos fecha de final?
-Buena reflexión. Hay quien está esperando que la crisis se acabe, pero la crisis no se va a acabar. De la crisis se sale. Reinventas tu empresa y de repente sales de la crisis. No es que de golpe todo el mundo vuelva a ganar dinero, a vender y tengamos una efeméride para celebrar. No. Hay gente que hace tres años salió de la crisis. Hay que reinventar el modelo de negocio. No va ni por sectores. Hay empresas que están creciendo un 30% y empresas del mismo sector que no levantan cabeza.

-Esta situación de pervivencia de la crisis ¿afectará a la emigración profesional?
-Sin duda. No obstante por tradición cultural y de formación (sobre todo por la falta de idiomas) somos poco partidarios de la movilidad geográfica.

-¿Por qué en países como Alemania las medidas de austeridad les han convertido en motor de la economía europea y en España nos hunde el PIB?
-Aquí en España el gasto público no se ha empezado a reducir de verdad. Se han reducido servicios, pero no se ha hecho el ERE del sector público. Tenemos una hiperinflación de funcionarios. Los mismos que antes de la crisis. Hasta que no se empiece a reducir el gasto público, de verdad, no se podrán bajar los impuestos de verdad. Esta es la medida impulsora de la economía. Esto es lo que hace que los empresarios puedan volver a invertir y la gente a consumir. Hay que bajar impuestos reduciendo el gasto público. No reduciendo los medicamentos. Reducir medicamentos es reducir ingresos a las farmacéuticas y reducir el empleo. Hay que reducir funcionarios del registro, parlamentarios y políticos.

-El Gobierno de Mariano Rajoy calculó el año pasado un ahorro de 37.700 millones de euros con las medidas de racionalización de las administraciones públicas, la reforma de la administración local y las medidas estructurales sobre el empleo público, cifras que por cierto no se han hecho públicas, ¿por qué no se acomete la reforma necesaria?
-Porque hacer un ERE en el sector público implica cambios profundos, legales, electorales...Además cuando el que paga saca el dinero de los impuestos le da igual porque no lo paga él.

-¿Es un mal español? ¿Esa falta de conciencia sobre el dinero de todos, el que llega vía impuestos y abre las posibilidades al derroche, ocurre en muchos países?
-No. Es un mal del sistema democrático. Sólo en algunos países árabes, como Singapur, donde los políticos van por objetivos sienten las acciones y proyectos sociales como propios. Pero ojo, allí al no ser democráticos, su problema es penal no político. El que roba va a la cárcel. Aquí se escudan bajo el manto de la responsabilidad política, pero cuidado, la responsabilidad es económica. Por otro lado nuestros políticos tienen un grado de formación muy bajo. No saben idiomas, no han trabajado en grandes corporaciones. Saben de Administración pública. Pero no cómo funciona el mundo.

-Volviendo a las medidas de austeridad, ¿esperamos más?
-Seamos correctos. Aquí no se han aplicado medidas de austeridad. Aquí se han aplicado medidas de no derroche. Si hubieran aplicado medidas de austeridad hubieran redimensionado la cosa pública a las necesidades actuales. Dejar de construir autopistas innecesarias es política de no derroche.

-¿Al salir de la crisis veremos y tendremos menos corrupción?
-Cada vez habrá menos porque estaremos más interconectados, todo estará más controlado y seremos más conscientes del tema. Hoy por hoy estamos lejos. Hoy en una cena alguien comenta que te han hecho una chapucilla en casa sin IVA y nadie te denuncia al día siguiente. Esto dilo en Bélgica o en Holanda. Al día siguiente tu mejor amigo te ha denunciado porque le estás robando.

-¿Es sólo una cuestión cultural?
-Bueno también es verdad que los impuestos que tenemos son tan altos que casi incitan al fraude.

-¿Cómo?
-Piense, por ejemplo, que el impuesto del patrimonio lo pagan el 0,48% de la población. Y a nadie se le escapa que un millón de euros aparte de la vivienda habitual lo tiene mucha más gente, con herencias, segundas viviendas... Esto significa que hay mucha gente que defrauda. Además cuando fijamos el impuesto del IRPF en el 50% significa que de cada dos euros, uno tiene va al Estado. Hay mucha gente que lo considera un abuso. La gente está dispuesta a pagar entre un 10% un 20%. Los impuestos demasiado altos incitan al fraude fiscal. En España son muy altos. Acaban pagando los que no se pueden escapar, pero todos los que se pueden escapar ni lo dudan. El Estado como ve que solo puede cobrar de unos pocos les sube más los impuestos.

-¿Debería existir un techo a la implantación de impuestos?
-Más que un tope máximo lo que se debería eliminar es el crecimiento exponencial. Lo que no puede ser es que si cobras 2.000 euros pagues pocos impuestos, pero si vas ganando lleguen a quitarte uno de cada dos euros. Lo que había que poner es un porcentaje fijo. Ganas 1.000 pagas 100, ganas 10.000 pagas 1.000. Aquí ahora ganas 1.000 pagas 50, ganas 10.000 pagas 5.000. ¡Hombre no! Esto desincentiva la reinversión.

-Dicen que este año asistiremos a un crecimiento modesto de la economía. El gobierno anterior hablaba de brotes verdes, el actual de raíces profundas...¿son mensajes para animar el consumo o son reales?
-No son reales. Se lanzan para incentivar el consumo. Hemos tenido un pequeño repunte en la economía básicamente gracias a la amnistía fiscal con la que entró liquidez. Aunque no se ha publicado cuánto dinero entró. Con la recaudación, el Gobierno ha hecho estimaciones, pero medidas para el crecimiento no ha implantado ninguna. Y las que se han hecho, como la reforma del mercado laboral, veremos los efectos dentro de diez años, no ahora. La única salida que le queda al Gobierno es bajar impuestos por reducción del gasto público o no se reactivará nada.

-Pese a contar con la ley de transparencia desconocemos cifras públicas como la que acaba de mencionar, el dinero que afloró con la amnistía fiscal.
-Porque los mejores técnicos, los que son capaces de detectar el fraude, se han ido a trabajar a la empresa privada. El Estado debería contar con menos funcionarios, pero los mejores.

-¿Sin embargo sí ha habido funcionarios para perseguir el caso Pujol?
-Bueno, bueno. Parece que ha sido una cosa ilegal lo que ha hecho el Estado. Ha obtenido los datos de forma irregular con lo cual ya se verá si ha sido un buen trabajo o una chapuza.

-Hay medidas que se han tomado que han sido un fiasco, como el IVA de caja que se va a revisar. ¿Es política económica de ensayo y error?
-El único impuesto que recauda de verdad el Estado es el IVA. El resto de impuestos lo comido por lo servido. Nosotros apoyábamos la subida del IVA, pero no la del IRPF. La subieron y cuando se dieron cuenta que no recaudaban subieron el IVA.

-¿Van a reducir el IRPF a partir de enero?
-Se verá. Además el Estado está haciendo muchas trampas. Dice que baja el IRPF, pero luego no dejan deducir en los siguientes ejercicios a las empresas las pérdidas acumuladas. Solo la mitad de ellas. Con lo cual es un problema de financiación para las empresas de nueva creación que ya están empezando a ir bien. Y de esto nadie habla.

-¿Es posible crecer sin financiación bancaria?
-No. Es aconsejable funcionar con dinero de los bancos. Otra cosa es que cada empresa se financie donde se debe financiar. Tenemos demasiadas empresas cuya única fuente de financiación son los bancos. Las empresas se deben financiar también con los fondos de inversión, en la bolsa...

-¿Qué hacemos con las empresas de pequeño tamaño sin posibilidades de acceder a fondos o a la bolsa?
-Formación. ¿Cuánto me he gastado en coches y cuánto en formación? Tenemos demasiados parados con coches de 20.000 euros La formación tiene que pagársela uno. Culturalmente no estamos acostumbrados y pedimos subvenciones. Si no te la dan, contestas: entonces no me formo. Ahí tenemos un problema serio. Hay quien dice: la formación es cara. Pues si la formación te parece cara, prueba con la ignorancia.

-Qué hacen las personas con casi 60 años, en el paro, sin dinero y menos para formación, ¿cómo se reciclan?
-Una persona cerca de los 60 años ha tenido una vida profesional de unos 40 años, ha tenido una hipoteca, tiene una casa pagada y pasan penurias por dejar una casa a los hijos como herencia. Hay mil formatos para no estar en esa situación. Esa casa puede que ahora se venda por menos que hace siete años, pero por mucho más, seguro, que lo que le costó. Cada franja tiene su problemática. Los de 50 si los han despedido les han dado una buena indemnización. Ahora, uno de los principales errores que cometen las personas que se quedan en paro es gastar la indemnización que les dieron al conseguir un segundo empleo. Al cabo de unos meses le echan del segundo trabajo y ya no tiene indemnización y está peor que antes. Cuidado. Es mejor guardar la indemnización porque es posible que si consigues un segundo empleo te echen antes que a los demás porque eres el último en llegar y el más barato de despedir. Así de claro.

-¿Y los de 30 años?
-Hay sí que hay problemas. Estos sí tienen que irse fuera. Y encontrarán trabajo.

-¿Los que se van vuelven?
-No hay datos estadísticos, pero está demostrado que los países que tienen mucha emigración de talento a la larga es mejor, porque crea muchos flujos de capitales.

-¿España será la Florida de Europa?
-Dependerá de lo que hagamos. Hoy por hoy seguramente acabaremos siendo un país logístico de paso hacía Europa. En este sentido vamos a crecer mucho en las próximas décadas. Claramente turístico. Pero ojo cuando los países árabes se pacifiquen cambiará el enfoque. También seremos un país muy creativo vinculado con la tecnología. Aquí se vive bien y la gente del software busca estos enclaves para crear.

-Usted propone que para que los negocios funcionen uno tiene que aburrirse. ¡Siempre nos han dicho lo contrario!
-Hay mucha gente que pretende hacer de su ocio un negocio. Los negocios requieren rigor y cuando tienes pasión es muy difícil ser riguroso. Si te dedicas a algo que te gusta seguramente acabarás creando una ego empresa. Pero más que aburrirse lo que conviene es tomar cierta distancia de tu negocio.

-¿Un consejo para los seis millones de parados?
-Formación, formación y movilidad geográfica.

-Por cierto ¿cómo conoció a Pablo Motos?
-Alguien de su equipo me escuchó durante un programa que hacía en la radio, RAC 1, en Cataluña. Le gustó y me llamó. Ahora estoy en Cataluña Radio. ESADE nos pide que además de la docencia hagamos investigación, gestión y proyección externa. Esto supone dar acceso a todo el mundo explicando qué hacemos en las escuelas de negocios. También escribo en la revista Clara aconsejando a las mujeres sobre cómo gestionar mejor la economía doméstica.