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VALENCIA. Para su 50 cumpleaños, Antoine recibe un regalo bastante desagradable: un ataque al corazón. A partir de ahora, va a tener que empezar a ser más cauteloso, le dicen. Pero Antoine ha pasado toda su vida siendo cauteloso - cuidando su salud, su dieta y dedicándose con esmero a cuidar de su familia y amigos. Ahora Antoine quiere cambiar las cosas. Y hace precisamente eso... cambiar su vida y la de aquellos a su alrededor.

Barbacoa de amigos es una comedia coral en la línea de Pequeñas mentiras sin importancia y Cena de amigos. Escrita y dirigida por el cineasta galo Éric Lavaine, cuenta en su reparto con Lambert Wilson (De dioses y hombres, Matrix Reloaded), Franck Dubosc (Astérix en los juegos olímpicos, Camping), Guillaume de Tonquedec (El nombre), Lionel Abelanski (El Concierto) y Florence Foresti (Hollywoo).

Alabada por parte de la crítica, Le Parisien la ha calificado como "una deliciosa comedia sobre la amistad", mientras que aVoir-aLire ha dicho de ella que reúne "lo mejor de la comedia francesa". Con más de dos millones de espectadores en el país vecino, Barbacoa entre amigos llega este verano con la intención de hacerse un hueco en una cartelera repleta de películas franquicias con esta reflexión sobre la vida y las amistades, y cómo cambia nuestra visión de las cosas cuando padecemos una grave crisis.

En este sentido, su protagonista principal, Lambert Wilson, aseguraba en una entrevista a la agencia Efe que "una buena crisis" puede ser "muy sana" para replantearse ciertos aspectos de la vida, incluida la amistad. El exceso de confianza y la rutina con los amigos puede resultar "muy peligroso" para las relaciones sociales, que a partir de cierta edad, opina el actor francés Lambert Wilson, sufren cierto "desgaste".

En parte ésta es la idea que desarrolla Barbacoa de amigos, una película que habla precisamente sobre el cambio que genera el paso del tiempo en las amistades y en la que, para inspirarse, Lavaine admite que ha partido de su propia vida y que ha robado "un poco de aquí y allá" de sus amigos para perfilar los personajes del filme, una película "muy autobiográfica" que se aleja de la "locura" de sus títulos anteriores.

El cineasta asegura que tenía "ganas" de hablar sobre su grupo de amigos y aplicarse algunos de los consejos que da a jóvenes autores y nunca sigue, como escribir sobre su propio universo, en el que son "muy importantes" los amigos y la comida. "Yo soy un poco cobarde, porque no me atrevo a decirle a la gente lo que pienso. Tampoco tengo ganas de ser juez, no me toca a mi el juzgar, y tampoco sé si soy el mejor de los amigos", dice.

El cineasta "espera" que el público se sienta identificado con la película, se haga preguntas y los más jóvenes vean en qué se van a "transformar" sus amistades en los años "venideros". "No se pueden imaginar que su grupo de amigos se va a volver eso", apuntilla.

Una idea que comparte Wilson quien cree que los "retratos" de los personajes son lo bastante variados para encontrar en ellos "un poco de alguien que conocemos o un poco de uno mismo", uno de los atractivos clave de la cinta. Es más, asegura que el rodaje hizo que los actores pusieran "en tela de juicio" sus propias amistades. "Creo que desde entonces he perdido algunos amigos", concluye no sin cierta ironía.