Comparte esta noticia

• Tweet
• meneame

Otras noticias

• Bankia está para comprar en bolsa
• ↑ AL ALZA
  Fidelity duplica su peso en Cellnex
• Ayco, participada por la valenciana Onofre Miguel, necesita más capital para sobrevivir

VALENCIA. Marceliano Alfaro San Andrés, presidente de la constructora valenciana Ocide, cuenta desde el pasado 30 de mayo con una sociedad de inversión de capital variable. O lo que es lo mismo: una sicav bautizada con el nombre de Nusa Gestión Patrimonial.

Aunque tal vez lo mejor sería que se trata de un vehículo familiar, dado que entre sus consejeros figuran Javier y Sergio Alfaro Albalat, según lo ha constatado este diario de la base de datos pública de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Dicha sociedad está domiciliada en Madrid y ha contado con el capital social inicial de 2,40 millones de euros, el mínimo exigido; mientras la gestión corre a cargo de Mirabaud Asset Management, la división de altos patrimonios de la entidad suiza Mirabaud, que día a día va captando más de estas sociedades enfocadas a los bolsillos más pudientes o cuanto menos a la hora de tener en propiedad una de ellas. Por lo pronto son ya 31 las sicavs que gestiona Mirabaud en España.

MÁS DE TRES DÉCADAS

Por su parte, Nusa Gestión Patrimonial esta depositada en RBC Investor Services España, una de las divisiones del banco canadiense RBC, que ya cuenta con 105 sicavs bajo su gestión, según los datos recogidos de la web del organismo supervisor presidido por Elvira Rodríguez.

Ocide es una compañía consolidada en la construcción y prestación de servicios a las Administraciones Públicas (AAPP), cuyos orígenes se sitúan en 1982 cuando se especializó entonces en la ejecución de obras hidráulicas y de tratamientos de aguas. A partir de 1990 inició un proceso de diversificación abarcando todas las áreas de la obra civil, los servicios y la edificación dotacional en el sector público.

En 1997, al amparo de los planes de regadío impulsados por las AAPP, Ocide creó la división de gestión de agua destinada a la construcción y explotación de las redes de saneamiento, abastecimiento y riego, hoy integrada en Ocide Construcción.

REESTRUCTURACIÓN

Dos años después, y como respuesta a la demanda de sus clientes, vio la luz la división de servicios públicos con actividades ligadas a la gestión y mantenimiento de infraestructuras.

Al ejercicio siguiente (2008) inició un proceso de reestructuración por áreas consolidadas, organizándose en gerencias independientes con un elevado grado de especialización. Ello supuso un paso más en su apuesta por la diversificación y la especialización como ejes de su estructura empresarial.

El proceso de expansión de Ocide cobró una mayor dimensión durante 2009, con su apertura al mercado internacional como Europa del Este -donde cuenta con una oficina en Rumanía-, Emiratos Árabes Unidos y Rusia.