VALENCIA (EP/CP). El escritor Víctor del Árbol (Barcelona, 1968) explica parte de la eclosión de la novela negra en España por el hecho de que la realidad también lo es. "La novela negra responde a situaciones de crisis", asevera el autor, que recuerda que el nacimiento de este tipo de literatura en Estados Unidos se produjo en los años treinta, después del Crack de 29.
Así lo ha asegurado el escritor en una entrevista concedida a Europa Press con motivo de la presentación de su nueva obra, 'Un millón de gotas' (Destino) en el certamen Valencia Negra.
Del Árbol se ha mostrado muy satisfecho de participar en este certamen dedicado al género negro en sus diferentes disciplinas (literatura, teatro y cine) y que reúne en la capital del Turia a nombres como el griego Petros Márkaris, Lorenzo Silva y Alicia Giménez Barlett, entre otros.
En 'Un millón de gotas', que el autor define como una "novela mestiza", aparece el personaje de Gonzalo, un abogado laborioso que, tras recibir la noticia del suicidio de su hermana Laura, debe volver a su pasado y al de su padre Elías, que siempre ha mantenido bien guardado.
Ese viaje del protagonista llevará al lector de la mano desde los tiempos de las grandes utopías en La Unión Soviética en los años 30 a la guerra civil, los campos de concentración de Francia, la II Guerra Mundial y la resistencia interna contra Franco.
Se trata de historias que corren paralelas en distintos tiempos y espacios pero movidas por "las emociones más fuertes a los que se enfrente el ser humano, el odio y el amor", explica.
Con este "thriller literario" Del Árbol espera repetir la buena acogida que ya ha obtenido en el ámbito internacional, especialmente en Francia, que ha reconocido con premios y ventas su voz "más mediterránea".
LA NOVELA NEGRA ESPAÑOLA TIENE UNA LÍNEA PROPIA
"Hay muy buena literatura negra en España y creo que lo interesante es que no es una copia ni una imitación de lo que se hace en Estados Unidos, en los países nórdicos o en Italia, sino que tiene una cosa autóctona y propia, que hace que la gente se identifique porque la novela negra es un reflejo de la sociedad".
Asimismo, ha reivindicado que en este género, que tiene la gran ventaja de "Salir a buscar" al lector y no encerrarse en sí mismo, no solo es relevante la trama sino la intención estética y la voluntad artística de la literatura porque "el escritor trabaja con palabras", ha recordado.
De todos modos, Víctor del Árbol recalca que es partidario del cruce de géneros. ""Los géneros no son una ortodoxia que hay que seguir, sino mecanismos para contar cosas y por eso yo utilizo todos los recursos a mi alcance".
A pesar de que Del Árbol trabajo durante años como mosso d'esquadra, asegura que la escritura ha sido "una constante desde que era un crío" y ha precisado que su trabajo en ese cuerpo de seguridad fue algo "circunstancial"·. "Hay diferencia entre lo que es una pasión y una necesidad y lo que es un 'modus vivendi", ha concluido.
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