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VALENCIA. "Ahora es diferente. Ya no sólo ruedas el cortometraje desde la perspectiva de trampolín a producciones mayores, sino que en el proceso de preproducción trabajas como si fuera un largometraje". Quién así habla es Nacho Ruipérez, director artístico de películas como El amor no es lo que era de Gabi Ochoa, y cortometrajista. Su La ropavejera ha sido seleccionada para formar parte del catálogo Curts, que cada año edita la Generalitat Valenciana. Protagonizado por Ana Torrent, es un buen ejemplo del nuevo tipo de cortometrajes que se están rodando en la Comunidad Valenciana.

Sigue habiendo espacio para la experimentación, para el corto rodado por un grupo de amigos, pero comienzan a cundir los cortometrajes con un notable trabajo de preproducción y producción. Los equipos son más numerosos. Hay diseño de producción. Hay dirección de arte. En la medida de lo posible, hay profesionalización. Son como pequeñas películas.

Ese fue el caso de La ropavejera. El mismo argumento da fe de sus ambiciones. Está basado libremente en la historia de la proxeneta, curandera y asesina Enriqueta Martí, la vampira del carrer Ponent, que aterrorizó la Barcelona de principios del siglo XX.

Se ambienta en una mansión decimonónica, donde una mujer rígida y gélida maltrata a nueve niños al tiempo que les exige que la llamen ‘Madre'. La llegada una nueva niña alterará el orden establecido. "El equipo podría haber sido trasladado perfectamente a un largometraje", dice Ruipérez. "Hicimos diez días de rodaje... y gastábamos la broma de que si lo alargábamos cinco días podíamos haber hecho un largo", agrega.

LA VESPA DE PEDRO ZARAGOZA

Otro cortometraje seleccionado en el mismo catálogo, Bikini, de Óscar Bernácer, llega con premio bajo el brazo. En su caso se trata del prestigioso primer premio en el Festival de Cortometrajes de Medina del Campo. Bikini, que ha contado con ayudas a la producción de la Conselleria d'Educació, Cultura i Esport, fantasea en torno al famoso viaje en Vespa que realizó en 1953 el entonces alcalde de Benidorm, Pedro Zaragoza, desde Alicante hasta Madrid para visitar en El Pardo al dictador Francisco Franco y convencerle de que autorizase el bikini.

Bernácer, que estuvo a punto de entrar en las nominaciones a los Goya con su anterior trabajo, el genial Desayuno con diadema, contó para esta producción con los populares Carlos Areces y Rosario Pardo, y el experimentado actor valenciano Sergi Caballero. El nivel de producción fue exigente hasta para los títulos de crédito. La caracterización de Carlos Areces como Franco, el rodaje en El Pardo, la ambientación... todo remite a una película de presupuesto.

"Tratamos este corto como quisiéramos hacer los largos. La situación técnica ayuda porque todo ha mejorado mucho a nivel técnico. Las historias que antes eran más complicadas ya se pueden rodar. Aparte yo tengo la suerte de tener a mi lado como productor a Jordi Llorca", explica Bernácer.

Una exigencia acorde a los tiempos que corren porque, como apunta el propio realizador, "en ocasiones vas a los festivales y te sorprendes del nivel de producción de muchos cortometrajes". "Ahora ya no es una cosita de que se reúnen un grupo de amigos con una cámara y a ver qué sale", corrobora Ruipérez.

EL AÑO DE LOS RÉCORDS

Bikini y La ropavejera son dos de los ocho seleccionados en Curts 2014, un año en el que se han batido todos los récords. En total han sido 71 candidatos. Nunca hasta ahora habían participado tantas producciones. El año pasado se presentaron 37 y no fue precisamente una mala cosecha.

Los siete cortometrajes seleccionados en Curts 2013 sumaban este lunes más de 270 selecciones en distintos festivales y premios en certámenes tan importantes como el Festival de Gijón, Mecal Short de Barcelona, la Berlinale o Chicago International Film Festival.

En 2014, que se preveía un mal año por el parón que ha supuesto para la industria audiovisual el cierre de RTVV, el resultado ha sido aún mejor. "El nivel ha subido mucho", apuntan desde CulturArts. "Antes era bueno, pero este año han influido muchas cosas. Se han podido presentar más cortometrajes, han coincidido más producciones...". Un aspecto que se resalta en el acta del jurado, donde se ha destacado la variedad de formatos. Más y más variado.

Junto a los ya mencionados Bikini y La ropavejera se han elegido otros cortometrajes de ficción como Ezequiel y la galga María, dirigido por Eva Marín y producido por TV ON; Vida salvaje, dirigido por Álvaro Yebra; y 3/105, dirigido por Diego Opazo y Avelina Prat.

Completan la lista El ladrón de caras, un cortometraje de animación dirigido por el ganador de un Goya Jaime Maestro; Bine ati venit in casa mea, un cortometraje documental dirigido por Alberto Gutiérrez y Jaume Quiles; y Onemoretime, un cortometraje de animación dirigido y producido por el colectivo Vualà de Animaciones. El mismo corto de Maestro es un buen ejemplo de esa laboriosidad antes citada con un año de producción a cuestas.  

Estos ocho corotmetrajes viajarán ahora juntos a los festivales de la mano del Instituto Valenciano del Audiovisual. El programa ha contribuido para que los cortometrajes valencianos hayan sido premiados o nominados en estos últimos años en los premios Goya, así como en muchos otros festivales. Las expectativas son altas, habida cuenta el material seleccionado, y ésta es una buena noticia para una industria ávida de ellas.