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VALENCIA. La semana que viene se cumplirán cuatro meses desde el anuncio del relevo en la cúpula de IAG, el holding resultante de la fusión entre Iberia y British Airways.
Fue el siete de noviembre pasado cuando el grupo decidió relevar de la presidencia -no ejecutiva- de Iberia a Antonio Vázquez para centrarse en IAG donde ostenta el sillón presidencial.
El puesto de Váquez en Iberia fue ocupado por el 'número dos' hasta entonces, Luis Gallego, que en tan corto espacio de tiempo se ha ganado la confianza de sindicatos, trabajadores y del propio mercado. Sin ir más lejos ayer la dirección y los sindicatos de los tripulantes de cabina (TCP), SITCLPLA, CTA Vuelo, UGT y CC OO, llegaron a un principio de acuerdo sobre el XVII convenio colectivo de estos trabajadores.
Entre otras medidas para mejorar la productividad figuran la congelación salarial hasta el 2015 e incrementos sujetos a la rentabilidad de la compañía a partir de ese año, ademas de mantener la reducción salarial del 14% al colectivo. Un principio de acuerdo que llegó solo dos semanas después del calificado como "histórico" por IAG entre Iberia y el sindicatos de pilotos Sepla tras años de larga 'batalla'.
El propio Gallego no quiso dejar pasar la oportunidad de "agradecer el esfuerzo realizado por Sepla y el equipo directivo de Iberia que han trabajado juntos para alcanzar este pacto que marca un hito en la historia de la compañía". Algo que ha calado hondo entre una plantilla que está con Gallego y que pedía a gritos el relevo por Vázquez.
"UNO DE LOS NUESTROS"
"Es uno de los nuestros, que entiende, comprende y comparte nuestros problemas y que sabe bien lo que lleva entre manos", apuntan desde dentro de la mayor aerolínea española. "Todos tenemos claro que la productividad es fundamental para el futuro de la compañía por lo que todos nos vamos a estrechar los cinturones y él no ha sido menos. Nada de ostentaciones y sí austeridad, se trata de evitar el gastar por gastar", añaden.
Pero no solo sindicatos y trabajadores respaldan el trabajo de Gallego sino que también lo está haciendo el mercado, dado que actualmente las acciones de IAG cotizan en la zona de máximos históricos en la bolsa española y van camino de duplicar los 3,35 euros a los que echaron a andar a finales de enero de 2011 ya bajo el nombre actual del holding.
Solo en lo que va de año la revalorización alcanza el 13,4% -y la mitad desde que fuera elegido Gallego para presidir Iberia-, lo que ha impulsado la capitalización hasta los 11.175 millones de euros tomando el cierre de ayer (5,488 euros).
Un precio que representó una subida del 1,44% y que vino acompañada de otro elevado volumen de negocio, al intercambiarse de manos 4,79 millones de acciones frente a una media diaria anual de 3,28 millones según los datos de Infobolsa.
La 'paz social' llega en vísperas de la presentación de sus resultados correspondientes al pasado ejercicio -se conocerán este viernes- aunque tal y como advierten los analistas de Renta 4 "no serán comparables a los de 2012 por la inclusión de Vueling, que consolida sus cuentas desde mayo pasado". Pero lo cierto es que con Gallego al frente Iberia ha entrado en una nueva época bastante más optimista que hace unos pocos meses.
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