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VALENCIA. Se acabó la espera. Trooper, la cerveza apadrinada por los míticos Iron Maiden, ya se puede comprar en Valencia. Eso sí, con cuentagotas. Las botellas duran en las repisas menos que un canuto en un concierto. La banda británica no es la primera en asociar su nombre a una bebida alcohólica, pero como explica Juan Vicente Milán, "sí es la primera que apuesta claramente por la calidad y, de hecho, está a la altura de las mejores ales británicas".

Milán, dueño de dos tiendas especializadas en cervezas en Valencia (Quality Beers), destaca que "aunque mucha gente la compra como objeto de colección, por la etiqueta, también está gustando a los que buscan una cerveza Premium. Esa es la clave del éxito". De hecho, la demanda supera con creces la oferta y tiene problemas hasta para recibir todas las que pide al distribuidor. "Creo que ni ellos se esperaban este éxito", añade.

CERVEZA PARLAMENTARIA

Trooper (con una graduación de 4,7%) se vende en dos formatos: botella de plástico de 330 ml. y otra -la más cotizada- es de vidrio y contiene 500 ml. (unos 4,10 euros por unidad). Además, no es una cerveza cualquiera. No es de extrañar que parlamentarios conservadores británicos vivieran como una victoria que se aceptara su propuesta para incluirla en la oferta del bar de la Casa de los Comunes.

Los Maiden no se han andado con chiquitas. Trooper es más que una estrategia de marketing, es una cerveza que aspira a durar. Bruce Dickinson (cantante de la banda y piloto de aerolíneas) diseñó la bebida y supervisó en persona todo el proceso. Además, detrás está la prestigiosa Robinson, fundada en 1838, y que cuenta en su catalogo la Old Tom, que ganó en 2009 el premio a la mejor ale del mundo que otorga la WBA. En realidad, la birra fue un invento para la gira de 2013 (en envase de plástico), pero el éxito llevó a apostar por la versión que ahora se distribuye.

PLAY IT LOUD!

Así, los británicos siguen los pasos de otras bandas. Cabe citar, por ejemplo, a AC/DC que, con motivo de su último álbum (Black Ice, 2008) lanzaron una cerveza homónima, siguiendo la Ley de Pureza Alemana, y elaborada por Carlsberg (5%, 1,75 euros). A la lista se podría sumar Kiss y su Destroyer, fabricada en Alemania y que no es nada del otro jueves (4,7%). Mejor fama (y merecida) tiene la Motörhead, que se anuncia como una bastard lager suave fabricada por la sueca Krönleins (4,7%) y que se distribuye ya en algunos centros comerciales.

Trooper es una cerveza "para los que les gusta la calidad y que consideran que es un buen sustituto de la tradicional copa", señala Milán. Sobre el sabor, destaca la ligereza -no es demasiado carbónica-, tiene un color muy agradable entre dorado y ámbar. Otra de sus claves son un aroma y sabor suaves gracias a una sabia combinación de varios lúpulos (Bobec, Cascade y Gonding). Y un consejo: "hay que tomarla fría, entre 6 y 8 grados, y en copa", concluye.

EL PROBLEMA DEL PRECIO

Antonio Valdéz conoce este mundo. Su tienda es la única en España que tiene la mayoría de bebidas que lanzan los grupos. No engaña a nadie: "yo no las pruebo, con mi trabajo no puedo estar probándolo todo por razones evidentes, pero creo que en general hay más marketing que otra cosa". Eso sí, reconoce que se venden muy bien, más entre los amantes de la música que entre los de los vinos o las cervezas.

"El principal problema es que el precio final, incluyendo gastos de envíos, suele ser bastante elevado, entre los 18 y 20 euros", señala. Para la mayoría de estos productos no hay distribuidores en España, así que hay que importarlas.

"DENTRO DEL MERCADO"

Trooper no es la única bebida apadrinada por una banda de rock, pero es más habitual recurrir al vino. Guillaume Glories, sumiller multipremiado y propietario del restaurante Entrevins, conoce esta moda e incluso ha probado algunos. "No es nada extraño encontrar en alguna feria un stand con un vino avalado por algún grupo. Yo he probado uno de AC/DC y otro de los Rolling Stones. No eran malos, pero tampoco puedo decir que me impresionaran".

Aunque normalmente se considera que embotellar vino es una idea que parte del grupo, Glories explica, "que también es una estrategia que utilizan determinadas zonas vitivinícolas -sobre todo en Australia, California o Sudáfrica- que no son excesivamente conocidas y esto les permite conseguir un poco de publicidad".

PUBLICIDAD PARA TODOS

Glories no tiene ninguna de estas referencias en su restaurante -"es que hay tantos vinos que no los puedo tener todos", matiza- pero no es particularmente crítico. "Puede que alguno sea simplemente marketing, pero en ocasiones los grupos que hacen esto suelen tener cierta cultura en temas de vino y son productos que por precio y calidad están dentro del mercado".

"También se da el caso de grupos que viven en zonas productoras y deciden colaborar con ellos a la hora de darles publicidad, porque dudo mucho que lo hagan por dinero", añade. Glories que cree que ese también es el caso del futbolista Andrés Iniesta. No recuerda ningún grupo español que lo haya hecho, pero si cita los ejemplos de Lluís Llach (Celler Val Llach) o el de Joan Manuel Serrat (Mas perinet) tienen bodegas, pero como negocio alejado de su faceta musical. Francis Ford Coppola, Gérarde Depardieu, Antonio Banderas, Julio Banderas o la Reina Isabel II son otros famosos que se han rendido a la cultura del vino.

EL 'SET LIST'

Hay de todo. Pocas críticas buenas se pueden encontrar de los caldos apadrinados por los Kiss. Tienen varios, como el tinto Kiss Wine ZinFire (100% Zinfadel, cosecha 2011, de procedencia californiana. 21,50 euros, 13,5%) y el blanco Shout Out (100% Chardonnay, californiano, 12,5%, 18,90 euros). Motörhead da a su nombre a un Shiraz Wine (13,5%, 19.90 euros), un tinto con aroma muy frutal, elaborado con Shiraz. También al rosado Syrah Rosé (12%, 18,90 euros). Ambos tienen su origen en Australia (Hunter Valley). La banda de Killmister también tiene un vodka homónimo.

Si hacemos caso a Internet, los mejores caldos son los de los australianos AC/DC, que incluyen el Hell Bells (cosecha 2010), un blanco seco elaborado en Nueva Zelanda con Sauvignon Blanc (12%, 17,90 euros); el Highway to Hell (cosecha 2008), elaborado en Barossa Valley (Australia) con Carbernet Sauvignon (13,5%, 17.90 euros); y el Back in Black (cosecha 2010), un caldo robusto elaborado con Shiraz y que también se hace en Barossa Valley (13%, 17,90 euros).

LOS CLÁSICOS

Para los más sibaritas está el AC/DC Platinum (14,5%), que salió al mercado el pasado verano, una variación del anterior pero realizado a partir de viñedos de bajo rendimiento y envejecido dos años en barricas de roble americano. La botella es de cristal francés y lleva estuche conmemorativo. Por último, está el You Shook Me All Night Long, elaborado con moscatel (2011), el más suave de todos y, según la publicidad, dirigida al público femenino.

La lista no es interminable, pero sí suficientemente grande como para no poder incluir a todos. Eso sí, hay que citar entre los más destacados el último de los Rolling Stones. Tras el éxito de su Forty Licks, un Merlot embotellado en California (Mendocina County) que salió a la venta en 2011 (13,5%), anunciaron el Sympathy for The Devil. Este es un tinto sólo para gourmets, elaborado con Pinot Noir cosecha de 2005, del que sólo se venderán 222 cajas (de tres unidades), cada una por la friolera de 375 euros. Ya se sabe que viejos rockeros nunca mueren, se aburguesan.

‘MADE IN SPAIN'

Pero hay más, Dark Side of the Moon de Pink Floyd (un Cabernet Sauvignon), Synchronicity de Police (Carignane, Zinfandel, Syrah, Petite Sirah, Garnacha y Viognier), el de Grateful Dead (Syrah, Petite Sirah, Zinfandel, y Garnacha),... todos ellos producidos en California por la firma Wines that Rock. Slayer, Blind Guardian, Sepultura... también tienen sus propios caldos, como la cantante Olivia Newton John (sí, la de Grease), que por suerte sólo se vende en Australia.

Por último, como curiosidad, los hay que han apostado por ingredientes españoles. Se trata de los finlandeses Nightwish que se inclinaron por la D.O. Ribera del Duero para su tinto Imaginaerum (100% tempranillo), o la alemana Doro Pesch (ex Warlock) cuyo cava brut reserva Hero se elabora en Aragón con Chardonnay y Macabeo mediante el proceso de segunda fermentación tradicional.