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VALENCIA. Los últimos datos consolidados de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), que corresponden al cierre del tercer trimestre del año, no dejan lugar a la duda: la banca sigue prestando menos pero captando más. Un negocio redondo para las entidades bajo el paragüas de la patronal del sector de las cajas y de los llamados 'bancos de cajas'.

Únicamente Ibercaja puede presumir, según los mismos números, de haber aumentado a lo largo del presente ejercicio el ritmo de créditos entre sus clientes (+24,5%) y haber captado más depósitos (+58,7%). Dato este último condicionado por la integración del Grupo Caja3, es decir, Caja de Ahorros de la Inmaculada (CAI), Caja de Ahorros y Monte de Piedad del Círculo Católico de Burgos y Caja General de Ahorros de Badajoz.

El resto redujo en los nueve primeros meses del año sus créditos a la clientela, tanto entidades nacionalizadas como no intervenidas, con caídas a doble dígito en más de un caso.

LAS DOS 'SOLTERAS'

Ahí están Caja Ceiss (-18,2%), Liberbank (-15%), NCG Banco (-12,2%) y Catalunya Banc (-10%), mientras que otras como BFA-Bankia (-8,6%) y las dos 'solteras' Ontinyent (-7,3%) y Pollença (-1,1%) también presentaron números descendentes por citar algunos ejemplos.

"Todo el mundo habla de que hay que abrir el grifo bancario y cada vez sigue más cerrado, pese a que son los propios presidentes de muchas de estas entidades a los que se les llena la boca de decir que están preparados para prestar más a pymes y/o particulares, pero los números no engañan y además los préstamos concedidos son más caros". Así se muestran desde el departamento de banca privada de una firma ubicada en plena 'City' valenciana.

PENDIENTES DEL BANCO CENTRAL EUROPEO

"El BCE debería tomar buena nota de ello a la hora de financiarlas con 'dinero barato' porque al final ganan siempre los mismos, el dinero no circula en la economía real y sigue el 'carry trade, es decir, financiarse con activos de bajo rendimiento para invertir en instrumentos de alto rendimiento. Veremos que pasa con el impuesto sobre los depósitos, pero mucho me temo que acabará repercutiendo sobre la clientela", añaden no sin cierto tono de desconfianza.

Lo cierto es que fueron mayoría las cajas y 'bancos de cajas' que aumentaron sus depósitos a manos de una clientela temerosa de invertir en otros activos para remunerar sus ahorros.

CONFIANZA EN POLLENÇA

Al margen de Ibercaja destacar Pollença, que los disparó en un 20,8% en los nueve primeros meses del año. A continuación se situaron Unicaja (+5,8%) y La Caixa (+5,2%), que logró así resarcirse de la reducción del 5% de sus préstamos a la clientela.

Números ascendentes, por ejemplo, en los casos de Ontinyent (+1,2%) y BFA-Bankia (+1,1%); mientras que la peor parte se la llevó la gallega NCG Banco al presentar una caída de los depósitos del 16,3%.

"Ha habido mucha desconfianza por el tema de las subordinadas y preferentes en torno a las cajas gallegas", advierten las mismas fuentes consultadas por Valencia Plaza. Banco Mare Nostrum (-5,9%), Kutxabank (-4,3%), Caja Ceiss (-2,3%) y Liberbank (-0,9%) completan las entidades que han visto aminorar sus depósitos a la clientela.

MÁS DEPÓSITOS QUE PRÉSTAMOS

En total, y según los datos de la CECA, de enero a septiembre los créditos se redujeron un 6,4% hasta los 569.807 millones de euros, mientras que los depósitos aumentaron un 2,8% hasta totalizar 579.891 millones. Una situación apuntada por este diario en octubre pasado, al advertir que ya se estaba dando en la Comunitat Valenciana donde por primera vez desde 2008 bancos, cajas y cooperativas repuntaron los depósitos.

Entonces Manuel Illueca, profesor de Finanzas y Contabilidad en la Universitat Jaume I e investigador del IVIE, apuntaba que se trataba de "una buena señal ver que los depósitos crecen y es el reflejo de la aparente calma que viven los mercados financieros".

EN CAÍDA LIBRE

Por su parte, Joaquín Maudos, catedrático de Análisis Económico de la Universitat de Valencia, investigador del IVIE y colaborador del CUNEF, ponía el dedo en la llaga hace casi tres meses al señalar que "el crédito al sector privado residente lleva en caída libre muchos trimestres".

Sus palabras se referían a que a 30 de junio pasado, el préstamo se hundía solo en la Comunitat Valenciana un 13,1%, la mayor serie recogida por el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF). "Alcanzar esa máxima tasa negativa es síntoma de que hay falta de demanda solvente pero también restricciones de oferta".