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VALENCIA. La presidenta del Palau de la Música, Mayrén Beneyto, mira a la caja e intenta no asustarse. Los ajustes para el año que viene son considerables. El Palau de la Música contará en 2014 con un presupuesto de 13.671.290 euros, lo que supone un 1,8% por ciento menos que este año; en concreto 250.710 euros menos.

Por si fuera poco, este curso dos esponsors han dejado al Palau de la Música: Bankia y la Generalitat. La entidad financiera por su reconversión; la Generalitat porque se está ajustando el cinturón y no tiene ni para mantener sus propios proyectos, algo de lo que puede dar fe el Palau de les Arts.

Según explicó ayer a Europa Press Beneyto, el Palau no ha cobrado 168.000 euros correspondientes a la aportación de 2013 de la Fundación Bancaja. A esta cantidad hay que unir los 140.000 euros que estaban presupuestados para este año procedentes de la Generalitat y que el Palau todavía no ha podido ingresar.

En este contexto, la opción pasa por buscar patrocinadores pero Beneyto es consciente de que el auditorio del paseo de la Alameda no puede ofrecer tampoco muchos atractivos. "El mecenazgo es muy difícil con nosotros porque somos un ente autónomo y no podemos dar nada a cambio", se lamenta a Valenciaplaza.com. "Me dicen los patrocinadores que prefieren invertir en obra social y lo entiendo".  

Ante esta coyuntura, la única opción que queda es apostar por fórmulas que hasta ahora no se habían empleado. Así pasó con el pianista Lang Lang, que pudo actuar en Valencia porque se pactó que su recital fuera a taquilla.

Esa es la opción que se está barajando también para poder contratar al maestro venezolano Gustavo Dudamel, según explicó la presidenta del Palau a Valenciaplaza.com. No quiere perder la oportunidad de que regrese un director que ya ha estado en tres ocasiones en Valencia y que, conforme pasan los años, se convierte en un mito aún mayor. Si bien el intendente musical Ramón Almazán no es partidario, para la presidenta del Palau de la Música es la única opción viable ante la carestía.

El contexto además es malo no sólo en España. La Sinfónica de Boston tenía previsto visitar Valencia. Es la única gran orquesta estadounidense que no ha actuado en el Palau de la Música. El auditorio tenía el dinero para el caché. Tenían las fechas. Finalmente, la orquesta se tiró atrás; no podían pagarse el billete de avión. 

LA ORQUESTA DE VALENCIA, UN PILAR 

Beneyto hablaba ayer de "acoplarse" a la situación actual y optimizar todos sus recursos. Cuenta con la Orquesta de Valencia, "en plena forma", que puede constituir "el pilar" de una programación "maravillosa". Para ello invitarán a grandes directores y solistas internacionales a que actúen con ella. Entre los que ha puesto como ejemplo, Gergiev o Bolodos. La Orquesta de Valencia será el leit-motiv de las próximas temporadas.

Por el momento Beneyto está tranquila porque dice que han salvado la programación de este trimestre y de primavera gracias al Ayuntamiento de Valencia. La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, no se ha destacado por su apoyo continuado a la cultura, como demuestra el que no dudara en cancelar la Mostra de Valencia o el Festival VEO; pero con el Palau de la Música ha sido siempre diferente.

Los problemas pueden venir después, sobre todo en verano, cuando tengan que ajustar sus objetivos. Beneyto no pierde la fe y avanza que ya han iniciado negociaciones con varios patrocinadores, "entidades bancarias y cajas de ahorro" para que colaboren a sufragar la programación del Palau. "Tenemos uno", asegura; "aún no está cerrado, pero puede que haya uno". Y con eso ya se puede empezar. Cero, uno...