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VALENCIA. La Generalitat Valenciana se ha quedado sin sus otrora productos estrella de ahorro e  inversión para los minoristas como eran los Fondvalencia. Unos fondos que puso en marcha en 1991 para invertir exclusivamente en valores representativos de deuda pública valenciana, de otros emisores públicos como las Universidades Públicas Valencianas y deuda del Tesoro Público, pero que con el paso de los años han ido causando baja.

En diciembre de 2008 fue el BBVA Bonos Fondvalencia el que pasaba a mejor vida; algo más de cuatro años después -concretamente en la primavera de 2012 fueron los Bankinter Fondvalencia Mixto y Santander Bonos Fondvalencia los que siguieron los pasos; mientras que el pasado 13 de septiembre era el Ruralrenta Fondvalencia el que decía adiós tras ser absorbido por el Gescooperativo Deuda Soberana Euro -los inversores no deben de temer por su dinero- y con ello finalizaba la historia de estos productos.

El declive de los Fondvalencia ha sido manifiesto ante el nulo interés de los inversores provocado -y acentuado- por la desconfianza sobre la propia Generalitat Valenciana ante su delicada situación.

'BONOS PATRIÓTICOS'

Muy especialmente después de los problemas que tuvo para devolver el dinero -y los intereses- de sus famosos 'bonos patrióticos'. Conviene recordar que tuvo que 'mediar' el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA).

Ruralrenta Fondvalencia despidió el pasado mes de agosto con apenas 200 partícipes y un patrimonio de 3,48 millones de euros, 48.000 euros por encima del mínimo legal establecido.

Algo lógico ante el languidecer de este fondo, cuyas suscripciones (compras) hasta el pasado mes de agosto alcanzaron los 257.000 euros frente a unos reembolsos (ventas) por valor de 635.000 euros. Todo ello acompañado de la estampida de partícipes, dado que pasadon de los 229 del 31 de diciembre de 2012 hasta los 200 de agosto.

'PRIMA DE RIESGO'

Por su parte, la rentabilidad acumulada en los últimos doce meses era del 1,69%, por encima del interés medio del 0,96% ofrecido por el Tesoro Público por su última remesa de Letras a un año. Sin embargo, la 'prima de riesgo' -diferencia entre uno y otro tipo- era insuficiente para atraer el interés de los pequeños inversores a la vista de los resultados.

El Ruralrenta Fondvalencia era un fondo de inversión de renta fija gestionado por el Banco Cooperativo para perfiles de inversión nada dados al riesgo.

'BONO BASURA'

En todo momento debía mantener un patrimonio debía mantener en todo momento un porcentaje superior al 25% en activos de deuda pública de la Generalitat Valenciana y del Tesoro Público.

Sin embargo, la entrada en 'bono basura' de la solvencia de la deuda de la GenVal le permitía mirar hacia otro lado a la hora de invertir.

DOS DÉCADAS DESPUÉS

Por su parte, los Fondvalencia, que vieron la luz en 1991 en la época de Leandro García como director del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) creado por el Consell de Joan Lerma ese mismo ejercicio, ampliaron su radio de acción siete años después con la creación de nuevos instrumentos de colocación de los valores de la GenVal como las Universidades Públicas Valencianas.

Estos instrumentos de ahorro e inversión se crearon a la par que el IVF con el fin de colocar deuda entre particulares a través de las entidades financieras colaboradoras con la Generalitat Valenciana. Lo hicieron justo en un momento donde los fondos de inversión empezaban a crecer con fuerza y coincidiendo también con el lanzamiento de los Fondtesoros por parte del Tesoro Público.

Al cierre de 2001, año desde que el IVF recopila dados en su web, habían diez Fondvalencia repartidos en cinco de renta fija a largo plazo, tres de renta fija a corto plazo y dos de renta fija mixta, con 16.331 partícipes y un patrimonio de 395,84 millones de euros.

CAÍDA EN PICADO

Un año después ya eran ocho (uno menos en renta fija a largo y corto plazo); mientras que en 2003 el patrimonio ya había caído hasta los 177,01 millones (con siete fondos), 157,23 millones en 2004 (seis fondos) y 151,75 millones en 2005 (también con seis fondos).

Al cierre de 2006 eran 151,38 millones repartidos en media docena de fondos, 132,55 millones en 2007 (5 fondos), 111,19 millones en 2008 (también con cinco fondos), 63,53 millones en 2009 (con cuatro fondos), 33,76 millones en 2010 (el mismo número de fondos), 21,23 millones de euros en 2011 con un fondo de inversión menos y así hasta llegar a la desaparición total.