El espacio de Cuatro sobre "periodismo de lo desconocido" estropea sus crónicas fantásticas invitando a científicos y escépticos que desnaturalizan el programa
MADRID. Hay momentos en los que uno trabaja doce horas seguidas, discute con su pareja un día entero o está enfermo en un hospital, en los que cuando enciende la televisión no pide más que un poco de evasión sin ambición ninguna. Algo que no te haga pensar, que no te inquiete mucho, ni siquiera gozar, sólo evasión, relax. Muerte cerebral, por caridad.
El balompié, cualquier tipo de deporte, es la opción preferida de toda la vida. También los programas del corazón o los realities. Una cosa es que no sea recomendable entregarse en cuerpo y alma a las vicisitudes de jóvenes ciclados y chicas siliconadas, o los dramas de toreros y folclóricas, y otra cosa es que este formato televisivo no te solucione la papeleta cuando enciendes el aparato con la intención de que él a su vez te apague el cerebro.
En este sentido, los programas de fenómenos paranormales, ciencias ocultas y demás inventos de la fértil imaginación humana estarían dentro de esta clase de entretenimientos. Quien esto escribe consoló muchos insomnios con Mundo Misterioso, de Radio Voz, cuando era joven. "OVNIS avistados en A Coruña, aldeanos informan que tenían lucecitas como las de un puti, pero que se movían en círculos por el firmamento", te podría contar su boletín de noticias colocado entre un bloque dedicado al caso de un vampiro descubierto en Nueva York y otro sobre que al Titanic se lo tragó una ballena primitiva que vive en el núcleo de la tierra. En cuanto tu cerebro intentaba razonar automáticamente lo que estaba escuchando, decía apaga y vámonos y te quedabas sopa dulcemente. Funcionaba. Estaba muy bien.
Cuarto Milenio, que se emite en Cuatro, debería servir para toda esa gente que los domingos ve desesperada que no se puede dormir y el lunes tiene que levantarse a las siete de la mañana. Esa tragedia. Si bien es cierto que también habrá quien lo vea tomando notas y ya esté a puntito a puntito de descubrir según sus propias investigaciones con Internet qué político estadounidense es en realidad un extraterrestre y comunista, porque es muy posible que los comunistas del siglo pasado fuesen alienígenas, apareció en unas notas manuscritas de Hitler en una servilleta que la tiene Tristanbraker. Pero ese tipo de espectador es minoritario. La inteligencia es un bien escaso pero no tanto.
Sí que hay que decir, sin embargo, que Cuarto Milenio es un programa cobarde. No va directo al grano. Sólo abre interrogantes, trae un par de escépticos como invitados para disfrazar la charlotada de rigurosa búsqueda de la verdad y no termina de enganchar con sus fabulosas historias. No hace lo que han hecho siempre estos espacios: acojonar, anunciar el fin del mundo, meter malrollito con una historia de terror...
Este domingo se trató el tema de los terremotos de Castellón. José Manuel Nieves, director de Ciencia del diario ABC trató de plantear la cuestión desde un punto de vista racional. Hay gran necesidad de energía en este país, bla, bla, bla... Menos mal que enfrente tenía a un colaborador habitual del programa, Enrique de Vicente, director de Año Cero, que le avisó de que el hombre, el ser humano, que está mu loco, puede crear terremotos. No microseismos accidentales, como podría ser el caso de Castellón, sino a saco, por el placer de destruir, a lo Nerón. Citó una investigación del Parlamento de Tasmania y otra de la Duma, que le echaba la culpa directamente a EEUU de estos experimentos. Aunque los soviéticos también, puntualizó, habían trabajado en una superturbina para crear terremotos y ganar así la Guerra Fría.
El deleite llegó cuando el director de Año Cero dijo "La técnica del fraking (técnica de fracturación hidráulica para la extracción de gas) es similar a una palabra que a los ingleses les suena pésimamente: fuck. Estamos fornicando con la madre tierra, lo cual me parece atroz y abominable (...) Europa se ha dedicado a violar a la madre tierra durante veintitantos siglos desde que los romanos vinieron aquí y a otras partes y dejaron verdaderos destrozos (...) los indígenas veneraban a La Pachamama y nosotros la violamos, sus profecías decían que se va a hartar de nosotros y nos va a dar un bofetón (...) en un siglo no habrá vida en la Tierra, tendremos que vivir en la profundidad (..) la madre tierra se hartará de que le demos puntapiés". Y luego los oyentes confirmaron por email: "La tierra es como un animal, que si es atacado se defiende". Música para los oídos.
¿Pero por qué tienen que engorrinar un discurso tan brillante con geólogos y periodistas de ciencia explicando el fenómeno racionalmente? ¿No sería mejor que al director de Año Cero le replicase alguien con un "ya lo avisaron los extraterrestres cuando enviaron a Michael Jackson" o algo así?
Después de los terremotos llegó el noticiero. Es la mejor parte de este tipo de espacios, pero los muy cabrones no se inventan las noticias. Son temas curiosos, sacados de aquí y de allá, pero noticias publicables por un tabloide inglés o cualquier medio digital. Lo único que te reconcilia con el pasado es la aparición del chupacabras. Pero tampoco se informa de él como es debido. Se noticia que han encontrado un extraño animal en Venezuela y tienen el morro de decir que siempre que alguien da con un bicho raro dice que es el chupacabras, a saber qué es éste, deja caer la presentadora. Yo no sintonizo un programa sobre "lo desconocido" para que me hablen así del chupacabras. Quiero tener un marcaje al chupacabras como el que sigue a Rihanna por el Twitter. ¿Por quién nos toman?
Pero la cosa mejoró notablemente con el siguiente tema, un bebé a cuya madre un anciano de piel oscura le dijo que la pequeña iba a tener poderes para "mirar a través de la cuarta dimensión". Al cabo de un poco tiempo, un menda que se llamaba Mr. Gordy se encontró con la niña en un parque y le dijo que quería jugar con ella, lo que atemorizó a la familia pensando que le rondaba un pederasta. Los encuentros con este señor siguieron. Incluso otro día la pequeña dijo que estuvo conversando con un hombre completamente ensangrentado... ¿Saben que pasaba? Estaba hablando con los muertos. ¡Uh! Los padres de todas formas tontos no eran y la llevaron al psiquiatra, porque eran ya demasiados amigos imaginarios. Sin embargo, la preocupación pasó a acojone cuando empezaron a moverse muebles en casa y a abrirse y cerrarse las puertas de los armarios. De pronto, descubrieron que el anterior propietario de su domicilio era una persona que había muerto en 1974. Se llamaba... Mr Gordy. Toma tomate.
Con esto sí que se va uno a gusto a dormir. Además, Cuarto Milenio tiene el detalle de poner unas bandas sonoras terroríficas e inquietantes, con lo que la cosa te llena. Después de explicar este caso con rigor informativo, un caballero entró a analizarlo. Era José María Zavala, experto en exorcismos. "¿Quién es el hombre sin rostro que veía la niña?", preguntó el presentador. "El demonio, no me cabe duda", respondió el invitado tocándose el mentón como si estuviera explicando quién rompe un fuera de juego.
Porque este tipo de contenidos debe tratarse así. Con chalaos, embaucadores, charlatanes y sinvergüenzas. Métanse, señores de Cuarto Milenio, los escépticos y los científicos donde les quepan. A veces uno tiene la sensación de que vive en un mundo enfermo. Iker Jiménez llevando a periodistas científicos y luego en el programa de Punset e Hijos SL te hablan de energías emocionales. Lo ideal sería que Punset e Hijos SL entrase a colaborar a Cuarto Milenio. Que unan fuerzas.
Me viene a la mente un artículo que escribió Punset e Hijos SL en la revista Muy Interesante de junio de 2010. Hablaba de un acupuntor vietnamita que le curó una enfermedad no especificada. Decía "cuando me clavó las agujas, por primera vez en mi vida supe lo que era un corazón acompasado con el ritmo del universo". Es maravilloso, sólo falta eso, lo dicho, un Iker Jiménez apostillando "¿Punset, podría tener la medicina energética un origen extraterrestre?" y ya para ir concluyendo que el director de Año Cero nos contase algo de que así curaron los mayas a Hitler cuando padecía de las bolsas testiculares.
No en vano, en el programa repetido que pusieron después este domingo, apareció Sánchez Dragó hablando de viajes por no se sabe qué dimensión un día que iba drogado. Creí entender que era ayahuasca lo que se había enchufado, pero lo que es seguro es que estaban hablando de chamanes que te sirven de guía cuando uno se pilla tamaño ciego. Muy bien, Iker, haciendo equipo con galácticos. Ya sólo queda pedirle una cosa al programa. Que se atreva con un tema escalofriante, que da miedo hasta teclearlo, muy misterioso, otra dimensión de lo desconocido, tengan cuidado en su casa con los objetos punzantes mientras me leen, podrían salir disparados, hablamos de... la contabilidad del Partido Popular. Grite ahora.
Lamento que un programa se confunda entre la investigacion seria de la ciencia y la supercheria mas barata, deja a tertulianos invitados en una posicion ridicula como la que puede tener una television basura.
Yo aqui no puedo estar de acuerdo con Alvaro. Yo con Iker me descojono. Yo lo siento pero es oir hablar de "la nave del misterio" o escucharle meter efectos de sonido y me desternillo. Y prueben ustedes a dormirse despues de 10 minutos riendo. Yo me siento más respetado como cerebro aparentemente evolucionado con La rosa de los vientos. Son unos frikazos pero al menos no asumen que el espectador es un crédulo.
Buen trabajo, como siempre. Si queréis pasar un buen rato, sugiero que se investiguen los contactos entre la prensa friki (Año Cero, Más Allá,...) y la extrema derecha española. Alguno se llevará un susto de verdad.
Pues nueve años y siguen ahí. Arrasando en tele y radio. Y ayer gente como Pedro Duque. Enhorabuena a Cuarto Milenio. Arrasa,porque Iker es mucho más inteligente que todos los que han hecho programas de misterio. No hay más que ver nivel de invitados del mundo de la ciencia, con gente como Bermúdez de Castro o Cirac. Tres premios príncipe de Asturias de la ciencia, juntó a duque. Bravo.
Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.