VALENCIA (FOTOS EVA MAÑEZ). Al ritmo de la canción "Waiting for the show" de la banda Valenciana Fast Forward concluyó anoche la VFW primavera/ verano 2014, evento mediático que apostó por la creatividad, la visión y el talento de las nuevas generaciones.
La última sesión de la jornada llenó las gradas de los 5.000 metros cuadrados del Ágora dispuestos para la moda. En esta gala el gran triunfador fue la marca Siemprevivas (en la foto superior), llevándose el premio a la mejor colección en pasarela, y los 1.500 euros que entregó L´Oreal al mejor diseño de peluquería.
Después de una larga trayectoria en las pasarelas, Paola Sol fue reconocida como la mejor modelo, mientras que la colección de Anel Yaos fue elegida como la más destacable dentro de la Zona D. El creador sevillano también fue recompensado con 1.500 euros.
Tres días #descaradamentejóvenes finalizaron con la presentación de la colección de Miguel Vizcaíno que, con su colección Juliet y la intervención de la música en vivo de los Fast forwards, dio la nota como diseñador consagrado. El romántico personaje de la novela de Shakespeare se materializó en una mezcla de tejidos dispares y armoniosos.
El manejo de los cortes y las formas circulares en las faldas y blusas dio origen a interesantes vestidos de una sola pieza. Desde el principio la mezcla entre blancos y negros se encargó de generar luz donde no había cabida para el color.
Explosión naranja
El brillo de Wild Garden se paseó triunfalista por la pasarela. La colección de Eugenio Loarce demostró que aún en la moda, las historias hay que saberlas contar. El diseñador manchego ha dejado claro que el jardín de sus sueños es un espacio barroco, colorido y muy coherente. 27 outfits impregnados de elegancia y sofisticación saltaron a la pasarela arriesgándose con el naranja como color insignia del verano de 2014.
Muy destacable el total look casual conformado por chaquetas tipo chanel y faldas a la rodilla de amplio vuelo, junto con abrigos masculinos en estampados florales y la apuesta por zapatos planos (poco usados) en la pasarela.
Continuando con el planning del evento, el pase del valenciano Guillermo del Mar también hizo uso de la naturaleza en estampados y detalles. Los motivos florales por los que apostó, también de color naranja, estaban matizados por tonalidades pálidas como el marron y el Nude.
La colección, bautizada con el nombre de Beatriz conjugó las polaridades de una mujer privada de su libertad. Un mundo desprovisto de luz al que solo tiene acceso a través de pequeñas vidrieras. Esta inspiración se hizo visible en vestidos, pantalones y piezas de color negro, cuyo punto de luz combina con pequeños prismas de colores bordados y accesorios dorados.
Una vez más Anillarte logró captar en una palabra la transformación que la diseñadora de la firma le da al metal, concretamente a la técnica utilizada para la fabricación de mallas medievales. Elástica, demostró con tops, faldas, bolsos, zapatos y bikinis la versatilidad de un producto concebido para la guerra.
Resultados dispares para los emergentes
En Paralelo al desarrollo del programa oficial, la zona Dedal Showroom dedicada al comercio y promoción hacía su cierre en silencio. Para Ava Prêt-à-porter el balance de su inversión solo pudo medirse en las visitas de los curiosos que se acercaron para conocer su colección. "El resultado ha sido más mediático que económico, sin probadores es poco lo que puedes vender en un espacio como este". Un panorama opuesto vivió Not by Esther Mora. La diseñadora de joyas concluye feliz su paso por la feria: " He vendido, el producto ha gustado y la gente se ha interesado por él".
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