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VALENCIA. Los institutos tecnológicos van a tener venderse mejor. La Generalitat Valenciana ha ido reduciendo durante varios años el presupuesto dedicado a la innovación por la necesidad de aminorar el déficit a causa de las leyes de estabilización presupuestaria y no hay perspectiva de que vaya a cambiar la tendencia. ¿La solución? Pues algunos la tienen bastante clara, empezar a comunicar mejor a las empresas qué pueden hacer los institutos por ellas.

Esta fue la conclusión a la que llegaron la Confederación de Organizaciones Empresariales de la Comunidad Valenciana (Cierval), la Conselleria de Economía, Indsutria y  Comercio y la directora del estudio que este jueves presentó la Red de Institutos Tecnológicos de la Comunidad Valenciana (Redit) en la sede de la patronal. Todas las partes coinciden en que muchas empresas no saben realmente qué les pueden ofrecer los institutos, y esto debe cambiar. Actualmente, los institutos tecnológicos valencianos ingresan un 53% del total por la parte privada.

'Medidas de impacto de los Institutos Tecnológicos de Redit en los resultados empresariales' es el titulo del informe elaborado por investigadores de la Universidad Carlos III, con el que se pretende poner en valor la labor de innovación que aportan los institutos tecnológicos a las empresas, para el que han tenido en cuenta más de 32.000 observaciones, de las que casi 11.000 son empresas que han colaborado con distintos socios para llevar a cabo sus proyectos de I+D+i.

El primero en incidir sobre la necesidad de promocionar los servicios fue el presidente de Cierval, José Vicente González. "No va a haber mucho dinero de las administraciones públicas, hay que espabilarse y vender". El conseller de Economía, Máximo Buch, tampoco se mostró muy convencido de que, desde el Consell, se pueda seguir manteniendo el ritmo de inversión. "No nos vamos a engañar, no podemos pensar que el Gobierno valenciano va a tener muchos más recursos para invertir en este área".

El informe, que evalúa el periodo 2007-2010, ha llegado en uno de los peores momentos para los institutos tecnológicos, ahogados por la deuda de la Generalitat. A pesar de que los retrasos se han incluido en el próximo plan de pago de a proveedores, únicamente se saldará las cantidades de 2010 y 2011, de modo que todavía faltará todo 2012 y lo que llevamos de 2013. 

En este marco de impagos, es cuestionable para muchos si los institutos tecnológicos deberían depender menos de las "subvenciones", o como prefieren llamarlo, "inversiones", y depositar más esfuerzos en tareas de marketing para comunicar realmente lo que pueden hacer, algo que tiene su inicio con este estudio que recoge, al fin y al cabo, esos servicios.

González fue claro y sentenció que es muy bonito investigar pero que todo debe tener una aplicación práctica para la empresa. "Seguimos investigando sin cobrar" apuntaban los trabajadores de los institutos, que esperaban a Buch en la puerta de Cierval. Por el momento, los centros de Redit llevan 18 expedientes de regulación de empleo (ERE) por los impagos de la Administración Pública.

"HACER UN TRABAJO DE PROSELITISMO" 

La directora del estudio, Aurelia Modrego, también ha instado a Redit a hacer un trabajo de proselitismo y hacer que las empresas demanden los servicios de la red de institutos. Mientras, el vicepresidente de Redit, Rafael A. Ros, aunque de forma más moderada, también asumía que la única forma de mantener el ritmo actual de los institutos pasa por abrirse, en mayor medida, al sector privado y conseguir que más empresas demanden sus servicios. No obstante, también recalcaba que institutos como el MIT recibieran hasta un 60% de subvenciones públicas.

Según el informe, la mayoría de estas empresas con las que trabaja Redit son pymes y la mitad de ellas tienen como mucho 28 empleados, precisó Modrego, quien señaló que el 63% son manufactureras y de niveles tecnológicos medios y bajos. No obstante, como resultado de la colaboración, estas compañías son más innovadoras, más productivas, más exportadoras y captan más recursos para I+D+i, ha subrayado.

Las empresas que eligen como socio preferente la colaboración de los institutos tecnológicos suponen el 23,5% de la cifra de negocio de la Comunitat Valenciana. Las exportaciones de estas empresas a países fuera del ámbito de la Unión Europea representan el 11% del total de las exportaciones de la Comunitat y se calcula que 1,7 de cada 10 euros de su volumen de exportación puede atribuirse al impacto de los centro de Redit. 

Según explica el estudio, el efecto de la colaboración con Redit también se traduce en que las empresas captan más fondos públicos para la I+D+i, concretamente un 37% más. En el caso de colaborar con las universidades se captan un 34% más. Además, estas empresas son más activas en proyecto de I+D+i interna, un 21% más, y desarrollan más innovación de productos, un 14% superior, que aquellas que no colaboran con agentes externos para la innovación. Según el informe, este efecto también implica que las empresa que colaboran con éstos patenten un 8,3% más y que tengan una productividad de un 9% más.

Estas empresas también tienen una mayor probabilidad de exportar en la Unión Europea, un 5,5% más, y un 6,9% más de exportar fuera de la UE, respecto a aquellas empresas que no colaboran con agentes externos para la innovación. Por lo tanto, el efecto de la colaboración con Redit se traduce en que las empresas exportan un 17,2% más.

POR CADA EURO DEL CONSELL, SE ATRAEN 2,2  NACIONALES Y EUROPEOS 

La probabilidad de captar fondos de las Administraciones Públicas es superior en 37 puntos porcentuales a las que no colaboran con agentes externos para la innovación. Además, el efecto que tienen estos centros en la economía regional alcanza el 1,8% del PIB, por encima de los 1.800 millones de euros, y por cada euro que invierte la Generalitat en ellos, atraen 2,2 euros de fondos nacionales y europeos, por lo que se estima que contribuyen a captar unos 79 millones anuales.

En este sentido, el vicepresidente de Redit puso de manifiesto que los institutos tecnológicos son "claves" para la competitividad del tejido económico valenciano y aseguró que "invertir en I+D+i es la mejor política social" por lo que "los recortes (en este área) afectarán al pago de las prestaciones sociales de mañana".

Ros hizo una "llamada a la reflexión de los poderes públicos" a quienes recordó que los institutos tecnológicos de Redit son un "ejemplo exitoso de colaboración público-privada" e instó a "aplicar el bisturí" a la hora de reducir presupuestos para "no lastrar el futuro". Además, apuntó a que "es obligación de las administraciones públicas invertir en lo que es productivo".

Curiosamente, González también ha echado un reprimenda a los institutos por insistir tanto de los aspectos de internacionalización. "Está bien que se ocupen, pero no nos hagamos la competencia a nosotros mismos". El presidente de Cierval defendió el trabajo de organismos como el Instituto de Comercio Exterior (ICEX) y el Instituto Valenciano de Exportación (IVEX) con el fin de no duplicar funciones.