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SANTANDER. El presidente del BBVA, Francisco González, ha asegurado en Santander que su mayor preocupación para la cuenta de resultados de su grupo es todo lo relacionado con el inmobiliario, en la inauguración del Curso de la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) en Santander.

Al ser preguntado sobre si la supresión de las ‘cláusulas de suelo' tendrían impacto en las cuentas del BBVA, González explicó que serían asumibles, igual que el encarecimiento de las refinanciaciones, pero admitió que el 'real state' si que podría ser un problema en este sentido, mostrando su preocupación en cierta forma por su propio ‘banco malo' dentro del grupo financiero, al referirse a todos los negocios relacionados con la actividad inmobiliaria.

Concretamente, sobre las cláusulas de suelo, González afirmó que el piensa que la sentencia del Supremo sienta jurisprudencia, por lo que lo normal es que la decisión de dejar de aplicar estas cláusulas en los créditos hipotecarios como ha hecho el BBVA, se vaya extendiendo en el resto de entidades, tras las oportunas decisiones de los juzgados.

Respecto los acontecimientos de Turquía, donde la el BBVA es socio de referencia del Garanti Bank, González minimizó el impacto de los sucesos y explicó que mantendrá su hoja de ruta en ese país.

Asimismo, explicó que reestructuración financiera no concluirá hasta que el Estado privatice las entidades que ha nacionalizado, momento en el que podrá volver el crédito al sistema.

PRÓXIMOS TEST DE ESTRÉS

González no quiso valorar sí serán necesarios más fondos públicos para recapitalizar la banca española, y se limitó decir que ya se verá con los test de estrés que realizará el BCE a finales de este año para conocer los nuevos requerimientos de capital.

Asimismo, aprovechó su intervención para hacer una crítica al anterior Gobierno de Zapatero, al afirmar con cierta ironía que hace cinco años el Ejecutivo defendía que el sector financiero español era de los mejores del mundo, pero que luego vino la crisis de las cajas de ahorros y han sido necesaria una reforma de calado.

El presidente del BBVA también se mostró positivo respecto a la evolución de la economía española. Y dijo que España se encuentra en el principio del final de la crisis, una vez que el Gobierno ha tenido que tomar medidas muy duras, como la propia reforma financiera, aunque a su juicio era indispensable para corregir los desequilibrios económicos e ir arreglando la situación encontrada.

En su discurso, González aseguró que el futuro de la banca pasa por su transformación con las nuevas tecnologías, en lo que la entidad que preside va muy adelantada.

NO SABÍA NADA DE ATT Y TELEFÓNICA

Finalmente, tanto Francisco González como el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que comparecieron juntos, negaron con un lacónico "no" la pregunta de si estaban informados de que la norteamericana ATT pretendía hacer una opa amistosa a Telefónica.

Hay que recordar que el BBVA es el mayor accionista de la operadora española que preside César Alierta, con algo más del 6% del capital, seguido de Caixabank.