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VALENCIA. Hay gente especializada en reexplicarse a uno mismo. Que si donde dije 'digo' no solo no dije Diego sino todo lo contrario. Son auténticos artistas del 'a mi no me mire, que yo solo pasaba por allí'. Y en esa categoría de artistas de la pista, financiera en este caso, entra por méritos propios el presidente de la Asociación de Impositores de la Comunitat Valenciana, Ángel Villanueva.

Villanueva se marcó este martes un artículo de opinión en la edición valenciana del diario El Mundo en el que analizaba el proceso de arbitraje abierto para los titulares de participaciones preferentes de Bankia. Nada del otro mundo, excepto el de colgarse un par de medallas sobre su trabajo "con el diputado Vicente Martínez Pujalte" para conseguir "sensibilidad con los afectados de Bancaja" y evitar que fueran discriminados respectos a los de Caja Madrid. 

Volveremos sobre esa hermosa colaboración entre Villanueva y Pujalte después, porque lo primero que llamaba la atención en el artículo de Villanueva era el arranque del mismo: "Vamos a dar nuestro punto de vista para que aquellos que, desgraciadamente, tengan algunos productos financieros legales, pero mal comercializados".

¿Mal comercializados? Cabe entender, por tanto, que Villanueva considera que las cajas de ahorros, y en este caso concreto Bancaja, vendió indebidamente preferentes entre sus clientes. Usted quizá piense que no descubre nada el presidente de la Asociación de Impositores, que eso ya lo saben hasta los menos puestos en temas financieros. Pero la cuestión es que quien denuncia esa mala comercialización es, ni más ni menos, que un exmiembro del consejo de administración de Bancaja.

Y no uno cualquiera. Villanueva ocupó cargos de relevancia en el consejo de Bancaja en la última década, siendo el secretario del consejo en los últimos años. Es decir, uno de los responsables de la gestión de la caja, esa que parece que ahora critica, una situación cuanto menos chocante.

Y retomando el fleco que dejamos colgando. ¿Martínez Pujalte defendiendo a Bancaja? Curioso... No hay más que echar mano de la hemeroteca: "Rodrigo Rato lleva muy poco tiempo, heredó una situación envenenada. Además el Banco de España, hay que decir las cosas como son, le hizo hacerse cargo de Bancaja con una información que a lo mejor no era acertada" (Martínez Pujalte, 11/5/2012).

Pues nada, con amigos defensores como ese, a los clientes de Bancaja solo les queda exclamar el mítico ¡cuerpo a tierra!