X AVISO DE COOKIES: Este sitio web hace uso de cookies con la finalidad de recopilar datos estadísticos anónimos de uso de la web, así como la mejora del funcionamiento y personalización de la experiencia de navegación del usuario. Aceptar Más información
GRUPO PLAZA
LA OPINIÓN PUBLICADA // Dinastías políticas (y 2)

España no es Grecia... ni Estados Unidos

G. LÓPEZ GARCÍA*. 31/03/2013

"Con sagas como la de los Papandreu podría hacerse un Cuéntame como pasó que abarcase medio siglo, al menos desde el golpe de Estado de los generales griegos, en 1967 (que derribó al patriarca Yorgos), hasta la intervención de la Unión Europea" 

VALENCIA. La semana pasada, a raíz de la imputación de Oriol Pujol y de la apertura de juicio oral a Carlos Fabra, comenté algunas cuestiones referentes a la presencia de sagas familiares, a veces auténticas dinastías, entre la clase política española. Situaciones en las que diversos miembros de una familia ocupan responsabilidades políticas a lo largo de un determinado hilo temporal. A veces, muy largo, como es el caso de la familia de Carlos Fabra, que lleva 150 años metida en política en la provincia de Castellón, a menudo ocupando el puesto de máxima responsabilidad (la presidencia de la diputación provincial) en su ámbito de actuación.

Algunos comentaristas del artículo me señalaron otras posibles sagas familiares españolas. Algunas, valencianas, como los apellidos Michavila y Caruana; otras, radicadas en otras regiones, como las de Pío Cabanillas -padre e hijo- o la saga de los Baltar en Orense, tan similar, en muchos aspectos, a la de los Fabra. Otros me señalaron casos notables en otros países, en concreto Grecia. Por mi parte, agradezco todas las sugerencias y me propongo, a continuación, completar la reflexión sobre ese caso tan particular (aunque más común de lo que cabría pensar) en otros países.

Hablamos siempre de regímenes democráticos, de manera que quedan fuera casos de "dictaduras hereditarias", como Siria o Corea del Norte (ambas, curiosamente, en primer plano de la actualidad). Trataré de circunscribirme, por razones prácticas, a figuras que hayan alcanzado la cúspide de las responsabilidades políticas (presidentes y primeros ministros). Y comienzo, precisamente, por el que podríamos considerar modelo más "acabado" de vinculación entre la familia y la política democrática: Grecia

Grecia: el "referente"

Yorgos PapandreuEn noviembre de 2011 dimitía el primer ministro griego y líder del PASOK, Yorgos Papandreu. Su apellido en Grecia es toda una institución. Tanto su padre, Andreas, como su abuelo, (que también se llamaba Yorgos), habían ocupado previamente el puesto más elevado de la democracia griega. Para rematar la faena, Andreas Papandreu nombró a su hijo Yorgos ministro de Educación y Asuntos Religiosos en uno de sus gobiernos.

Con la saga de los Papandreu podría hacerse un Cuéntame como pasó que abarcase medio siglo, al menos desde el golpe de Estado de los generales griegos, en 1967 (que derribó al patriarca Yorgos), hasta la intervención de la Unión Europea (que hizo lo propio con el nieto), pasando por el pacto entre el partido comunista y el conservador contra Andreas Papandreu en 1989. Un pacto contra natura que fue conocido desde entonces como pacto "a la griega" (como el que actualmente mantienen IU y PP en Extremadura).

Curiosamente, el principal beneficiado del pacto "a la griega", el líder del partido conservador Nueva Democracia, Konstantinos Mitsotakis, también formaba parte de una dinastía política de rancio abolengo: la de los Venizelos (Mitsotakis lo era por parte materna, lo que conllevó la pérdida del apellido, pero no la de los contactos), fundada por Eleftherios Venizelos, primer ministro griego en sucesivas ocasiones a lo largo del primer tercio del siglo XX. Su segundo hijo, Sofoklis Venizelos, también fue primer ministro, en este caso después de la Segunda Guerra Mundial, y tras haber ocupado puestos en varios Gobiernos de... Yorgos Papandreu. En Grecia, en definitiva, casi todo quedaba en casa. O en dos casas, a lo sumo.

Estados Unidos: dinastías sin corona

En Estados Unidos, contamos actualmente con dos dinastías familiares dedicadas activamente a la política, y que, de hecho, llegaron a enfrentarse en las urnas (en 1992). La primera republicana: los Bush, representada inicialmente por George Bush padre (presidente de 1988 a 1992) y continuada por su hijo, George W. Bush (presidente de 2000 a 2008). Llegó a especularse con que su otro hijo, Jeb Bush, ex gobernador de Florida, continuase con la tradición familiar, aunque hoy en día esta opción parece totalmente aparcada.

Bill y Hillary ClintonLos Clinton, por el contrario, se encuentran en una situación en la que no puede descartarse en absoluto la postulación de uno de los componentes de la familia, Hillary Clinton, para dar la batalla por la presidencia de EEUU. Entre otros factores porque Clinton (recientemente dimitida como Secretaria de Estado) ya lo intentó en 2008, cuando perdió en las primarias demócratas contra Barack Obama (y lo hizo, además, por la mínima). Su marido, Bill Clinton, fue presidente desde 1992 hasta 2000. Una unión que ni siquiera un escándalo sexual (el de Mónica Lewinsky, que a punto estuvo de llevarse por delante la presidencia de Clinton) pudo romper.

Pero el ejemplo más claro en EEUU es el de la familia Kennedy, auténticos "reyes sin corona" del país, con John F. Kennedy (presidente de 1960 a 1963) a la cabeza, y sus hermanos Robert Kennedy (asesinado en 1969, cuando se postulaba como candidato a la presidencia de EEUU) y Ted Kennedy (eterno senador demócrata, recientemente fallecido) tratando de emular sus pasos. Todos ellos hijos del patriarca de la familia, Joseph Kennedy, embajador de EEUU en Gran Bretaña en el período crucial 1938-1940.

Finalmente, dos antecedentes más remotos son los de los presidentes Theodor Roosevelt (presidente de 1901 a 1909) y Franklin Delano Roosevelt (presidente de 1933 a 1945), primos lejanos que además estaban unidos por la figura de Eleanor Roosevelt (sobrina de Theodor y esposa de Franklin); y los presidentes John Adams (presidente de 1797 a 1801) y su hijo John Quincy Adams (presidente de 1825 a 1829), ambos competentes políticos que tuvieron que sufrir, sin embargo, sendos mandatos presidenciales débiles y muy limitados por el Congreso, hasta tal punto que ambos perderían la reelección.

Dinastías: enfrentamiento y herencia

David y Ed MilibandHace tres años, los laboristas británicos celebraron unas elecciones primarias para dilucidar quién sería el nuevo líder del partido, muy debilitado tras la derrota de Gordon Brown en las elecciones de 2010. Los dos principales candidatos eran Ed Miliband y David... Miliband, hermano del anterior. Ambos vivieron un enfrentamiento directo en el proceso de primarias, que finalmente se dilucidó a favor de Ed Miliband. Su hermano David anunció muy recientemente que abandonaba la política.

Gran Bretaña, como EEUU, cuenta con una larguísima tradición democrática que favorece la aparición de ejemplos históricos de este tipo. En el siglo XVIII, dos prominentes primeros ministros, William Pitt padre e hijo, ya cumplían esta condición, y de hecho son conocidos como "Pitt el Viejo" y "Pitt el Joven" para diferenciarlos. A principios del siglo XX, destaca el ejemplo de Arthur Balfour, que sucedería en el cargo de primer ministro a su tío, Lord Salisbury.

Otro ejemplo interesante es el de la dinastía Nehru-Gandhi, que ha gobernado la India a través de tres miembros sucesivos del linaje familiar. El fundador de la dinastía, Pandit Nehru, fue primer ministro desde la independencia del país, en 1947, hasta su muerte (1964). Dos años después, en 1966, su hija, Indira Gandhi (llamada así por su matrimonio con Feroze Gandhi, sin parentesco con el líder pacifista Mahatma Gandhi), alcanzó el mismo puesto, que ocuparía un total de quince años en dos períodos sucesivos, hasta su asesinato en 1984. En ese momento, fue sucedida por su hijo, Rajiv Gandhi, que ocupó el puesto otros cinco años.

Lech y Jaroslaw KaczynskiOtro ejemplo de sucesión familiar, muy reciente, es el de la actual presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, que sucedió a su marido, Néstor Kirchner, en 2007. Y, por último, brilla con luz propia el caso de los hermanos gemelos Lech y Jaroslaw Kaczynski, fundadores del partido polaco ultraconservador Ley y Justicia. Jaroslaw Kaczynski ocupó el puesto de primer ministro de Polonia dos años (2006-2007), nombrado por su hermano Lech, presidente de Polonia a lo largo de cinco años, de 2005 a 2010, hasta su fallecimiento en un accidente de avión en Bielorrusia. Tras la muerte de su hermano, Jaroslaw Kaczynski se presentó a las elecciones intentando sucederle en la presidencia, pero fue derrotado. Ambos, gemelos idénticos, comenzaron su "carrera" en una fecha tan temprana como 1962, protagonizando la película Sobre dos, que robaron la Luna.

Lech y Jaroslaw Kaczynski en la película 'Dos robaron la luna' cuando eran niños

#prayfor... NNGG de Castellón y el CEU: #quenotelíen

Las juventudes de los partidos políticos en España, un país donde las estructuras de los partidos han estado habitualmente muy jerarquizadas desde la cúspide, no suelen tener demasiada relevancia. Y esto es más cierto conforme más jerarquizada sea la estructura. En este contexto, nos podemos imaginar que la relevancia de las juventudes del PP, un partido extraordinariamente jerarquizado, es escasísima. Su papel de agitación y propaganda (por no hablar de la discusión de ideas, casi totalmente inexistente) resulta totalmente secundario, y queda oscurecido por su función (en definitiva, más importante) de aplaudir y llenar los actos del partido.

Tal vez por eso, porque no tienen mucho margen de maniobra, o porque no sepan qué hacer con el que tienen, o, sencillamente, por el tipo de gente que toma las decisiones en NNGG, la verdad es que estamos bastante acostumbrados a que desde las juventudes del PP fundamentalmente nos lleguen... niñerías. La última, una especie de campaña difamatoria "contra el adoctrinamiento en las aulas", gestionada anónimamente, que se ha lanzado desde NNGG de la provincia de Castellón.

La cosa no merecería, en principio, mayor comentario. De hecho, y dado el origen de la iniciativa, a mí me parecen un poco exageradas algunas críticas recibidas, no porque no se merezcan, sino porque parecen indicar que la iniciativa de NNGG es algo grave, cuando más bien es ridícula.

Pero, por estas coincidencias de la vida, poco después de lanzar la iniciativa, nos hemos encontrado con un caso claramente vinculado con la iniciativa de NNGG, si bien es cierto que desarrollado en la provincia de Valencia. Y, sobre todo, desarrollado desde una Universidad privada, la Cardenal Herrera - Ceu, donde una profesora de la asignatura Doctrina Social de la Iglesia impartió a sus alumnos conceptos tales como que "de una terrible violación sacas algo bueno: un hijo, un don de Dios", o que "las mujeres maltratadas no deben separarse porque eso es amor".

Un asunto que, al menos que yo sepa, no ha merecido ningún comentario desde NNGG, a pesar de que resulta probable que algunos jóvenes castellonenses puedan asistir a esas clases en el Ceu (o en la Universidad Católica de Valencia, en la que también imparte docencia la profesora). Tal vez porque no se referían a esto cuando hablaban de "adoctrinamiento en las aulas".


________________________________________________________________________________
Guillermo López García es profesor titular de Periodismo de la Universitat de València @GuillermoLPD

Noticias relacionadas

Comparte esta noticia

comentarios

Actualmente no hay comentarios para esta noticia.

Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.

Escribe un comentario

Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.

publicidad