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VALENCIA. "La clave es no sucumbir, crear y sentirse vivo en cada empresa que inicies". Este puede ser el leit motiv de Óscar López (Valencia, 1970), economista, administrador de fincas, piloto, corredor de fondo, esquiador, patrón de yate, etc, que en 14 años ha creado, además, once empresas. La mayoría, aunque a trancas y barrancas, siguen en pie. La última un sistema de financiación alternativo al de los bancos. Cree que hay que ser esponja y amoldarse a los tiempos, ver lo que otros no ven y arriesgar. No todo son rosas. En el camino ha dejado y le han dejado. Aunque la mayoría de sus clientes de lujo son extranjeros la sede de sus empresas sigue estando en España y hoy por hoy no piensa cambiar el domicilio fiscal. Tiene dos hijos a los que transmite su pasión por la vida llevándolos de excursión a la montaña donde disfrutar, simplemente, con un día de campo.

-¿Para subsistir hoy en día es necesario más de un empleo?
-Sí. Curiosamente antes hacías cosas y las intentabas vender. Ahora es al revés, haces cosas porque las demanda el mercado. Soy muy esponja, veo nichos de mercado y emprendo proyectos.

-¿El último?
-Uno vinculado con la financiación, que es clave para emprender actualmente cualquier negocio. He ideado un sistema económico, www.fiftyfiftyspain.com, en el que las transacciones se pagan el 50% dinero y el otro 50% se intercambia con productos o servicios del resto de empresas que se suscriben al modelo. Actualmente contamos con 300 y estamos a punto de cerrar con la Cámara de Valencia un acuerdo para incrementar el número y poner en marcha el sistema en julio.

-¿Es como una web de trueque on line?
-Más o menos. Normalmente todos mueren por la bilateralidad. En este caso el mercado es muy amplio, mobiliario, alimentación, asesoría etc. No se requiere grandes inversiones y resuelve de una manera fácil todo el tema de los stocks.

-¿Esta necesidad de reinventarse, como le pasa a usted, cree que le ocurre a otros economistas valencianos?
-Siempre se había considerado que estudiar económicas o empresariales, como notario o médico, aseguraba el futuro. Hoy no es así. De todos modos la carrera me ayudó a ampliar mi visión del mercado y poder virar el timón si cometo errores garrafales. Y en estos tiempos de crisis es más fácil equivocarse porque no hay antecedentes.

-¿A qué se refiere?
-A que esto no es una crisis, es La Crisis en negrita y subrayado. Ni la mayoría de grandes gurús de la economía que asesoran a Botín y otros grandes empresarios preveían que la mezcla de la burbuja inmobiliaria, la crisis financiera y la falta de confianza de los ciudadanos frente a la corrupción instaurada en los poderes establecidos detonara esta crisis. Y no hay más revuelo social por la gran economía sumergida que hay.

-¿Cree que acontecimientos como los que vive Chipre se podrían reproducir en otros países?
-Lo de Chipre ha cambiado hasta la teoría económica. Antes se decía que durante las crisis y las guerras había que comprar inmuebles; ahora tener inmuebles no sirve para nada. Pero tras lo de Chipre se va a ver que tener dinero en los bancos sirve para mucho menos.

-¿Por cierto qué hace un economista vendiendo casas de diseño?
-Lo que puede. Hago y vendo casas, pero no sabemos hoy lo que valen las cosas. Hoy vale lo que estén dispuestos a pagar. Para más inri actualmente mi máximo competidor es el banco.

-¿Por qué?
-Porque si voy al banco que me financia las casas que construyo, con mi cliente para que le financien a él, salimos de la sucursal con otra casa que no es la mía. Imagínese si intento ir a otro banco con el que no trabajo. Ni me dejan entrar. Se han vuelto locos. El banco se ha metido a ser promotor, asegurador, etc. Y compite con todos.

-¿Y usted como lo lleva?
-Muy mal. Además antes hablabas con personas, ahora hablas con un analista, vía mail, al que nunca le has visto la cara. Que además se fía de las tasaciones que hace el propio banco. Cualquier negocio en el que uno sea juez y parte está corrompido. Un banco no puede tener su propia compañía aseguradora, su propia compañía de tasación, etc. El juego que practican es unilateral. Además quien es el guapo que va al banco a pedir un préstamo para una casa y se lee lo que le ponen delante, lo entiende y no lo firma.

-En Chipre, como pasó en Argentina ya piensan los ciudadanos en tener su propio banco en casa...
-Sí, y algún economista reconocido anima a la gente a que saquen el dinero, a ver qué pasa. No se trata de ser catastrofista, pero la banca también tendrá que aprender. Lo que llama la atención es que lo de Chipre habrá hecho millonario a más de uno. Para que esto se solucione se tiene que sanear la banca y para sanearla tiene que ir gente a la cárcel. Con los políticos, lo mismo, porque no sirve ninguno. Si una persona está imputada no puede seguir en su escaño y esperar a que sea una sentencie quien lo condene. Un imputado es por definición aquella persona a la que se le atribuye participación en un delito, y lo es aunque se le presuponga inocente. La falta de transparencia acompañada de sus actitudes convierte a los políticos en una clase no creíble. Con 800 cargos públicos imputados ¿cómo se entiende que el Senado recientemente rechazara una iniciativa para evitar que los imputados ocuparan cargos públicos?. Normal, seguramente alguno de los que votaron estaban en la lista de los 800.

-¿Y lo peor...?
-Es que frente a esta impunidad, clama que una chica que se encuentra una tarjeta y la usa para comprar comida, hayan estado a punto de meterla en la cárcel. ¿Cómo puede ser que los políticos que roban, o los bancos que te quitan la casa se salgan de rositas, mientras el ciudadano que se asfixia pagando impuestos le enchironen por un error? La jugada de los bancos, es además perfecta. Crean empresas fuera, cogen los inmuebles y los sacan fuera, imputan unas pérdidas que luego los españolitos vamos a pagar, y luego las empresas externas venden las casas y a generar millones. Es la ingeniería financiera que utilizan los bancos con el beneplácito de los gobiernos. No es ético lo que se está haciendo. La avaricia de los bancos no tiene techo.

-¿En España existe la segunda oportunidad?
-Nos gustaría, pero no. Aquí si te arruinas no puedes volver a levantar cabeza. En otros países sí. Si debes a la Seguridad Social y a todo dios, etc; es decir cuando te vas al hiperespacio deudor ya no puedes volver a levantar cabeza. ¿Y qué haces? Tienes que entrar dentro de la economía sumergida porque si declaras algo te lo van a embargar. El banco te embarga la casa, que según su tasadora valía tropecientos, pero aunque has pagado la mitad, te lo embarga igual. En otros países se sientan contigo, buscan una solución, un kilómetro cero desde el que volver a empezar.

-Vende casas de diseño, alquila yates de lujo, promociona viajes de aventura a medida, ¿el mercado de lujo ha sufrido la crisis?
-Sí, aunque es el que menos ha sufrido. Si antes hacíamos cien operaciones, ahora hacemos diez. Lo que detectamos es que la gente ahora no tiene tantas ganas de mostrar ostentación.

-La Generalitat Valenciana acaba de anunciar que el próximo destino turístico de la Comunitat va a ser Rusia, pero he visto que otras autonomías han anunciado lo mismo, ¿tantos rusos hay?
-Sí que hay, pero de todos modos creo que no tenemos un plan estratégico diseñado para que los extranjeros que nos visiten dejen buenas divisas. De entrada es difícil encontrar restaurantes donde hablen inglés. Nosotros ya notamos esto durante la America´s Cup.

-¿Qué pasó?
-Que los taxistas no sabían hablar inglés, ni lo intentaron, por lo que los transfer se volvieron locos para llevar a los extranjeros. Que España quiera pasar de la burbuja inmobiliaria a la consolidación del sector turístico, siendo además multicreativos, creando empresas, etc mientras castigan a impuestos y no dan financiación. Pues, es de locos y denota falta de plan estratégico.

-¿Lo de la America´s Cup fue una inversión inútil?
-Yo creí en ello. De hecho fuimos una de las empresas que más trabajó. Se hicieron buenas y grandes inversiones, y se consiguió colocar a Valencia en el mapa mundial, pero el error ha sido el post. La mayoría de las instalaciones siguen desmanteladas, en pleitos y pidiendo millonadas para alquilarlas, algo ilógico y más en estos tiempos. Al depender de tantos organismos, Consorcio, Ayuntamiento, Ministerio, Generalitat, todos quieren opinar y cobrar. Recientemente a un amigo le llegaron a pedir un millón de euros por adecuar una de esas instalaciones. Es una lástima que toda la Marina no se use ni de día, ni de noche. Si tuvieran que pagar por tenerlo parado...

-¿Cree que la administración pública podría mejorar?
-Debería. De entrada porque está sobredimensionada. La Administración pública es como una empresa en la que da lo mismo tener o no beneficios, por lo tanto no se imponen consecuencias cuando no se alcanzan los objetivos. Por eso, hasta hace nada, mis amigos funcionarios salían a almorzar casi una hora y me confirmaban que no tenían trabajo. Cuando además se sabía que la administración subcontrataba empresas para hacer el trabajo que podían hacer los funcionarios. Por ejemplo, en el tema de las licencias de construcción te podías tirar meses para conseguirla. No porque costara tenerla, sino porque se pasaban el informe, que ni leían, de mesa a mesa, para ponerle un sello.

-También está especializado en arquitectura modular, ¿qué opina de que todavía siga educándose a los niños en barracones?
-En España cuando se dice que algo es provisional hay que hacerse a la idea de que va a ser de por vida. Es lamentable, porque cuando había dinero parte del presupuesto que invertían en infraestructuras arquitectónicas podían haberlo destinado a mejorar esas aulas y hoy no seguiríamos dando una imagen tercermundista en ese sentido.

-¿Cuántas de las diez empresas que creó siguen en pie?
-A trancas y barrancas, todas. Pero ha cambiado mucho la forma de hacer negocios. Cuando empecé con mi padre a vender propiedades, con un estrechón de manos, sin papel de por medio, se cerraban operaciones. Y ahora, con documentos, notarios, abogados y puñetas, la gente te firma un pagaré falso y desaparece para verlo meses después conduciendo un mercedes todo lujo. Echo en falta la ética en el trabajo.

-Creó una empresa de viajes de aventura a medida ¿de dónde le viene su pasión por el riesgo?
-Tuve la desgracia hace unos años de perder a mi mejor amigo por una chorrada. Se cayó del tejado de una nave de una empresa de fotovoltaica que era suya. Habíamos navegado, escalado montañas, buceado, volado... mil salvajadas. Y ese día por no llevar el arnés, se mató. Desde entonces sé que solo tengo una vida y la vivo. Da igual lo que hagas. No es necesario escalar una montaña, a veces una simple experiencia, un paseo con un amigo, o comerte un helado es suficiente para sentirte vivo.