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VALENCIA. CT Catering, el proyecto empresarial creado por Carmen Topete a comienzos de 2009 tras su separación de Grupo El Alto, ha conseguido triplicar su volumen de negocio durante el primer semestre de 2010, respecto de la cifra del mismo intervalo en el año anterior.

La compañía comenzó su actividad en junio de 2009, facturando 200.000 € durante sus primeros seis meses de vida. En el primer semestre de 2010, CT Catering ha facturado 600.000 euros, cantidad que triplica su cifra de negocio y genera unas buenas perspectivas de futuro, teniendo en cuenta del contexto de crisis económica en el que ha tenido lugar el inicio de su actividad empresarial.

Se trata de un crecimiento exponencial que se ha sustentado en el servicio dirigido a empresas, división que actualmente representa el 60% del volumen total de negocio frente al 40% de particulares. Este es un porcentaje que la empresaria valenciana pretende invertir, destinando mayores recursos al área de particulares aplicando para ello una estrategia basada en la incorporación de espacios a su negocio.

El último de estos espacios incorporados a la oferta de CT Catering ha sido la Masía Mas de Alcedo, ubicada en la localidad de Ribarroja, que viene a sumarse a la Masía de Foresos (situada en Picasent) y Casa Boscá, ubicada en la fachada marítima de la ciudad de Valencia.

Mas de Alcedo es una casa señorial del S. XVIII, situada frente al Parque Natural del Túria, a tan solo 15 kms de Valencia. Sus trabajos de restauración han mantenido la historia y el carácter de este edificio, idóneo para albergar tanto celebraciones reducidas como de gran tamaño, gracias a los 450 metros cuadrados de su patio enclaustrado, sus amplios jardines y una suite nupcial de 70 metros cuadrados.

Gracias a estos espacios y a una política basada en la diferenciación por el conocimiento del producto y la proximidad con el cliente, CT Catering pretende alcanzar el 60% de su facturación con los particulares en el medio plazo, reservando el 40% restante al negocio con empresas. Esta previsión supondrá la inversión de la tendencia actual de facturación, objetivo que la compañía prevé alcanzar en 2011.

Para ello, CT Catering basará sus objetivos de diferenciación de la competencia en una estrategia de conocimiento del producto, fomentando su relación de proximidad con el cliente y ofreciendo una diversa oferta de precios que permita ajustar la oferta a la demanda, en un contexto de crisis como el actual.

Descenso generalizado del negocio
Para CT Catering, durante el año 2009, el sector del catering dirigido a particulares redujo su negocio entre un 30-40%. Transcurrido un año desde entonces, el sector ha constatado cómo el área de particulares repunta notablemente en cuanto a número de eventos, aunque continúa manteniendo una reducción aproximada al 30% en el número de invitados y, con ello, en los ingresos.

El caso de las empresas ha cobrado mayor dramatismo en 2009. Para CT Catering, en el servicio a empresas, se podido registrar un descenso generalizado del 60% en volumen de negocio. Transcurrido el primer semestre de 2010 y según CT Catering, el repunte en empresas ha girado en torno a un 15%, cifra que confirma el hecho de que las empresas comienzan a readaptarse a la nueva situación económica.

En el caso de la Administración y tras un 2009 de aparente normalidad, se ha registrado un descenso en los recursos destinados a catering, coherente por otro lado con las medidas de contención de gastos aplicada por todas las Administraciones.

Previsiones para 2011
Para Iñigo Ochoa Topete -segunda generación en el negocio del catering- el año 2011 traerá una cierta normalización en el negocio de catering, sustentada mayoritariamente en los eventos particulares. Pero serán las empresas, porcentualmente, las que aportarán mayores aumentos al catering valenciano.

En respuesta a una mayor caída, se prevé una recuperación más espectacular para las empresas, en cierto modo, similar a la tendencia de los particulares: mayor volumen de negocio pero menor gasto por persona. En este sentido y respecto a la situación actual, Iñigo Ochoa -responsable de CT Catering- apunta a la necesidad de cambiar y adaptarse a la situación actual, que por otro lado se aventura como duradera.

El secreto del éxito, ha manifestado Iñigo Ochoa, pasará por la necesidad de ser más competitivos y originales en la forma de hacer negocio, ofreciendo un mejor producto con un coste menor. "De ahí", ha concluido este empresario valenciano, segunda generación de esta familia pionera del catering en Valencia, "la necesidad de conocer bien el producto que se trabaja y mantener la proximidad con el cliente".