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ENFRENTAMIENTO EMPRESARIAL

Una de cal y otra de arena en la guerra judicial entre Aguas de Barcelona y Aguas de Valencia

A. MOHORTE. 06/12/2012 La Justicia mantiene el embargo del 7,9% de las acciones de Inversiones Agval mientras falla en contra del recurso de Agbar sobre la adjudicación de la gestión del agua del área metropolitana de Valencia
Eugenio Calabuig y Domingo Parra

VALENCIA. El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha desestimado el recurso interpuesto por el presidente de Aguas de Valencia, Enrique Calabuig, y sus hermanos contra el embargo cautelar de la ampliación de capital realizada por estos en Inversiones Agval, principal accionista en Aguas de Valencia.

Pedraz también ha procedido a nombrar a Jose Luis Menoyo González como administrador judicial del paquete que la familia Calabuig posee en la sociedad propietaria de Aguas de Valencia. El juez ha citado para el próximo lunes 10 de diciembre a las partes para que presenten alegaciones. El hecho que el Banco de Valencia estuviera en manos publicas justificaba el nombramiento de un administrador judicial para el paquete de acciones embargadas, según el juez.

Sin embargo, ahora que el Banco de Valencia ha sido objeto de subasta y está en vías de integrarse en La Caixa, la necesidad de contar con un administrador podría cambiar. De hecho, en un escrito remitido al juzgado, el subdirector general de Intervención del Ministerio de Hacienda, Fernando Rojas, indica que una vez el Banco de Valencia pase a manos privadas "habría que reconsiderar el nombramiento del citado funcionario".

El embargo afecta al 7,9% de las acciones y se debió a la denuncia del Banco de Valencia, cuando estaba controlada por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), y de la Fiscalía Anticorrupción. La entidad y el fiscal tiene sospechas sobre la gestión realizada por el entonces consejero del Banco de Valencia, Domingo Parra; el socio en diversas actividades privadas y sustituto de Parra en el banco, Aurelio Izquierdo; y la familia Calabuig.

El FORB considera que entre todos incurrieron en delitos de estafa, administración desleal y apropiación indebida además de en la generación de un supuesto agujero contable de 137 millones de euros que los acusados niegan. Tras esta operación estaría la defensa del control por parte de Calabuig de Aguas de Valencia frente a la compañía francesa Suez Environnement, principal accionista de Aguas de Barcelona (Agbar).

LA BATALLA POR EL AGUA DEL ÁREA METROPOLITANA DE VALENCIA

Por otra parte, el Juzgado de lo Contencioso Administrativo, número 6 de Valencia, ha confirmado la validez de la adjudicación del servicio del agua en alta del área metropolitana a Aguas de Valencia, tal y como ya hiciera el pasado 6 de noviembre la propia Asamblea de la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (EMSHI), al dar por correctamente cumplida la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia que obligaba a la EMSHI a volver a valorar las ofertas.

Así lo afirma la compañía valenciana en un comunicado en el que añade que, pese a que la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Valencia (TSJ) obligaba a la valoración de las ofertas iniciales de las dos empresas que optaban a dicho concurso (Aguas de Valencia y Agbar), ésta última presentó un "incidente de ejecución de sentencia" contra el acuerdo adoptado por la EMSHI, el pasado 19 junio 2012, que finalmente ha sido rechazado.

Con fecha del pasado 30 de noviembre, el Juzgado número 6 entiende cumplida las medidas impuestas por el TSJ concernientes a la anulación del concurso de agua en alta y que, según ésta, obligaba a retrotraer las actuaciones. Siguiendo los dictámenes judiciales, la EMSHI constituyó de nuevo la mesa de contratación, redactando los informes de valoración de los dos operadores que optaron al concurso (Aguas de Valencia y Agbar), con sus propios funcionarios, y propuso a la primera como adjudicataria.

IDA Y VUELTA DE ACUSACIONES

Aguas de Valencia asegura que posteriormente fue la Asamblea de la Emshi quien unánimemente refrendó la valoración técnica ganadora, corroborando que fuera, finalmente, Aguas de Valencia quien gestionara el agua en alta del área metropolitana de Valencia, durante los próximos 50 años.

Meses después, el juez vuelve a rechazar la solicitud de Agbar quien planteó dicho incidente al entender que no había sido cumplida dicha sentencia. Finalmente, ha sido este juzgado quien ha dado total validez al proceso llevado a cabo por entender que la sentencia está correctamente cumplida.

Por otra parte, se da el caso de que Agbar ha sido acusada por Aguas de Valencia de haber logrado una adjudicación directa, sin concurso público, con objeto de crear, junto con el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), una empresa mixta para gestionar el abastecimiento y saneamiento de los 36 municipios integrados en ella.

CONFRONTACIÓN DE OPERADORES

Aguas de Valencia señala que, en ésta, como socio privado, ostentará el 85% del accionariado frente a un 15% que tendría AMB, como socio público. Esta adjudicación de cientos de millones de euros anuales le permitirá a Aguas de Barcelona una facturación agregada superior a los 10.000 millones de euros.

A su vez, tal y como aseveran diversas fuentes jurídicas consultadas por Aguas de Valencia, "existe una sentencia que denunció la ausencia de título de Agbar para gestionar el servicio de agua en Barcelona, tal y como la ley exige a todos los operadores en sus respectivos contratos".

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