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VALENCIA. "Hay gente que me para por la calle y me pide que no pague a los funcionarios". "Yo soy funcionario y tengo familiares parados y también ‘recortados'". Entre estas dos frases del conseller de Hacienda y Administraciones Públicas, José Manuel Vela, hay unos meses de diferencia: las que han separado la dos últimas Mesas Generales de Negociación de la Función Pública convocadas.

Unos meses marcados por las airadas protestas sindicales en su lucha por la retirada del decreto de recortes. El ‘tira y afloja' se ha prolongado durante este tiempo en el que la conselleria de Hacienda no ha convocado la Mesa General pese a las peticiones sindicales.

El titular de Hacienda recuperó ayer el diálogo con las fuerzas sindicales consiguiendo un acuerdo sin ceder, eso sí, en los recortes formalizados en el Decreto 1/2012 del pasado enero ni en los aprobados desde Madrid con el Decreto 20/2012, que afecta a la paga ‘extra', la reducción a tres de los días moscosos o las variaciones sobre la incapacidad temporal.

Las organizaciones sindicales exigieron al conseller que no se aplicaran ambos decretos sobre los funcionarios y que, al menos, se revocara el aprobado desde el Gobierno autonómico. "Los empleados públicos valencianos no se merecen esa merma de su salarios ni está justificado el recorte", subrayó el presidente de CSI·F, Daniel Matoses, en la reunión.

"Estoy encorsetado, el Gobierno nos está exigiendo mucho. La situación me impide adoptar las decisiones que me gustarían. No me queda más remedio y no es viable esa compensación", recalcó Vela durante el encuentro, al que también asistieron el conseller de Sanidad, Luis Rosado, y la titular de Educación, María José Catalá, además de las fuerzas sindicales integrantes del organismo: UGT, CCOO, CSI·F, Intersindical y FSES.

El titular de Hacienda subrayó, además, la falta de credibilidad que supondría de cara al Ministerio de Hacienda volverse atrás en esos recortes, ya reflejados en el Plan de Reequilibrio enviado a Madrid meses atrás. 

La propuesta de acuerdo presentada por Vela fue retocada en diversas ocasiones a petición de los sindicatos. El conseller se comprometió a no aplicar más recortes o reducción de liberados en lo que restaba de ejercicio y reabrir la vía de diálogo constante con las organizaciones sindicales. En esta línea, aseguró su intención de mantener abierta la negociación en lo que resta del año y a convocar la Mesa General de la Función Pública en menos de tres semanas.

Otro de los acuerdos sellados, giró en torno a la bolsa de horas disponibles para los liberados, que pasarán a ser controladas al 100% por los sindicatos, por lo que tendrán la potestad de transferir o retirar las horas a los delegados que consideren.

INCAPACIDAD LABORAL

En el preacuerdo, firmado por todas las fuerzas excepto Intersindical, se solucionó además "el problema de la incapacidad laboral transitoria que había en la comunidad, donde médicos, enfermeras y profesores tenían unas pérdidas económimcas tremendas cuando estaban enfermos", según manifestó Andrés Cánovas, de la Federación de Sindicatos de Educación y Sanidad (FSES).

En este sentido, Cánovas recordó que "si se tenía una enfermedad grave, los funcionarios tenían una pérdida salarial tremenda, con unas retribuciones muy bajas en comparación con las que tenían cuando estaban trabajando. Es decir, podían cobrar tan solo el 30 por ciento". "Y esto se va a solucionar con el nuevo decreto", destacó.

El portavoz de UGT, Luis Lozano, también se felicitó por este acuerdo "importante" que "mejora el de Madrid" y con el que se creará una comisión de seguimiento "en la que se podrán interpretar o solucionar los problemas derivados de este tema".

Por su parte, el representante de CCOO señaló que las organizaciones ya "padecieron" un recorte de 192 liberados institucionales, y resaltó que "es una cosa atípica el hecho de que en la administración no haya recursos para llevar a cabo las tareas sindicales recogidas en la Constitución". Así, aseveró que esperan que no haya un nuevo recorte de derechos "porque no es una cuestión económica, si no ideológica", señaló.  

Intersindical fue el único sindicato que no firmó el acuerdo, no por su contenido, si no porque la semana que viene tienen una reunión y lo valorarán entonces, según afirmó Vicent Mauri.