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LA CRISIS DE LA DEUDA VALENCIANA

Las consecuencias de la ayuda del Gobierno:
El IVF pierde la autonomía para emitir deuda

JOAQUIM CLEMENTE. 10/09/2012 El Instituto Valenciano de Finanzas debe pedir autorización al Tesoro para poder firmar operaciones de deuda desde que decidió acogerse a las líneas del ICO para atender los vencimientos

VALENCIA. Cualquier operación financiera que la Generalitat Valenciana quiera realizar tiene que contar primero con el visto bueno del Tesoro. Según ha podido saber ValenciaPlaza.com de fuentes próximas al Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) esta condición, que limita la independencia del Gobierno valenciano en el campo de las emisiones, se pactó cuando la Generalitat se acogió a las líneas ICO Vencimientos, los créditos facilitados por el Gobierno para atender los préstamos que vencían y no se podían renovar. De esta obligación solo están excentas las operaciones a corto plazo.

Alberto Fabra y Máximo Buch

Las líneas ICO Vencimientos han sido la tabla de salvación de la Generalitat, que ha dispuesto de 2.000 millones de euros en dos tramos para poder atender las créditos que caducaban y que, por tanto, había que amortizar, ya que los bancos no estaban dispuestos a renovarla. Estas líneas se arbitraron a primeros de año y entonces no se explicó que tuvieran ninguna condición aparejada. 

Sin embargo, y según las mismas fuentes, en lo que va de ejercicio, la Generalitat ha tenido que pedir permiso ya en varias ocasiones al Tesorro ya no porque haya realizado emisiones -que no ha hecho- pero sí para algunas operaciones de financiación. "El Tesoro, antes de autorizar este tipo de endeudamiento, pregunta por las condiciones y los tipos de interés. Incluso llega a recomendar opciones alternativas que pueden ser más favorables", explican las mismas fuentes.

Hasta que se implantó esta obligación, el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) era el máximo responsables de las emisiones de deuda, tanto bonos como pagarés. Lo hacía cuando consideraba mejores las condiciones de mercado y acudía a distintas vías de financiación. Ahora, aún en el caso improbable de que se reabrira el mercado de deuda soberana, el IVF debería primero recabar la autorización del Tesoro para hacer el trabajo que hacía anteriormente de forma autónoma. 

Según las mimas fuentes, la condición impuesta por el Tesoro busca tanto controlar las operaciones de deuda que se firman por las autonomías que se han acogido a las líneas ICO Vencimiento como para tener un mapa general de los movimientos financieros de las comunidades.

A LA ESPERA DEL FLA

Este nuevo escenario se pactó en un Consejo de Política Fiscal y Financiera de primeros de año. Pero el que se abre ahora para la recta final del año, cuando a la Generalitat le vencen otros 2.000 millones de euros, será distinto con las llegada del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA). De momento en las comunidades autónomas que ya han mostrado su interés por adherise, se siguen esperando las condiciones en que se producirán estos préstamos. La fecha prevista para su puesta en marcha es el 20 de septiembre. 

 

 

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