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MADRID (EFE). La inversión del capital riesgo en España alcanzó en los seis primeros meses del año 1.166 millones de euros, el 43% menos que un año antes, debido principalmente al difícil acceso a la financiación y el deterioro de la economía española.

Según las cifras facilitadas por la Asociación Española de Entidades de Capital Riesgo (ASCRI), este recorte en la inversión "en un semestre poco activo" es menor al registrado en el mismo periodo de 2009 -el peor año de los últimos ejercicios para este sector- y similar al logrado entre enero y junio de 2010.

La presidenta de ASCRI, Maite Ballester, señaló a EFE que el capital riesgo se encuentra en Europa en un "compás de espera", circunstancia más acentuada en España, donde, a pesar de tener unas empresas muy buenas y con potencial, es muy difícil captar nuevos fondos, agregó.

DEMASIADAS DUDAS

Los inversores extranjeros han cortado sus aportaciones a fondos por el riesgo país y las dudas sobre la zona euro y los nacionales por la reestructuración del sistema financiero, la desaparición de las cajas de ahorros, la congelación o liquidación de las aportaciones de los 'family offices' y el recorte de fondos provenientes del sector público, destacó la patronal del sector.

ASCRI señaló que el 58% del efectivo invertido en España en el semestre se centró en la compra de empresas por parte de directivos, lo que se conoce por operaciones de 'buyout', el 27% a operaciones de crecimiento y sólo un 5 % a operaciones en primeras etapas.

Además, el capital de inversores internacionales supuso más de la mitad, el 63%, del total invertido, pese a que los inversores extranjeros han reducido sus aportaciones de fondos debido al "riesgo país".

MÁS OPERACIONES CERRADAS 

Ballester también valoró que en el primer semestre se cerrasen 494 operaciones, un 2% más que en el mismo periodo del año anterior. De éstas, el 84% fueron inversiones de importes inferiores al millón de euros; así como 11 operaciones de entre 10 y 100, frente a las 20 de un año antes, y tres grandes de más de 100 millones.

En el primer semestre se cerraron 6 operaciones de 'buy outs en 5 empresas: Maxam, USP, Borawind, Elix Polymers por Sun Capital, y Contenur por Demeter y Miura Private Equity.

El venture capital, segmento que invierte en empresas en una fase inicial de desarrollo, ha sido el único que no se ha visto afectado por la situación económica en este periodo, registrando un crecimiento del 32%, hasta los 61 millones de inversión.

APETITO ANTICÍCLICO 

También crecieron el número de operaciones un 14% (hasta 153), debido a la actividad de inversores de Venture como Caixa Capital Risc, Inveready o Nauta Capital.

Para el conjunto de las inversiones, "continua vivo el apetito por los sectores anticíclicos y fácilmente internacionalizables", como las nuevas tecnologías (centró el 34% de las operaciones), la medicina y la salud, las energías y la biotecnología.

Los inversores institucionales, como compañías de seguro y fondos de pensiones, que en otros países europeos aportan en torno al 36% los recursos captados para el sector, en España apenas consideran invertir en esta clase de activo, destacó la patronal. La captación de fondos alcanzó los 934 millones, al caer un 37%.

LAS DESINVERSIONES REPUNTAN UN 8,6% 

Más del 79% de estos fondos tiene su origen en la aplicación de fondos internacionales en sus inversiones y tan sólo 194 millones corresponden a operadores nacionales, de los cuales la mayor parte tiene su origen en entidades públicas como Cofides, CDTI y Enisa.

El número de desinversiones aumentó un 8,6% hasta alcanzar las 241 operaciones y llegar a 521 millones de euros, un 45 % menos que hace un año. ASCRI considera que el segundo semestre será muy similar al primero, con bajos niveles de actividad, volatilidad y especial dedicación de los gestores a las carteras de inversión.