En concreto, la rentabilidad de la renta variable euro alcanzó en julio un 6,6%, mientras que fuera de la zona euro las rentabilidades fueron más leves, del 0,6%, por el distinto contexto económico y la evolución de la divisa.
La renta fija, por su parte, también se comportó de forma positiva, al obtener una rentabilidad del 1%, la mayor de los últimos doce meses.
Los datos son el resultado de una estimación basada en una muestra significativa de fondos de pensiones españoles, la mayoría de ellos del sistema de empleo. En la muestra participan las principales entidades gestoras de fondos de pensiones del mercado, incluyendo sus fondos más representativos, y que equivalen en patrimonio al 54% de los fondos de pensiones de empleo de España.
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