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VALENCIA (EP / VP). El Ministerio de Hacienda ha rechazado el Plan de Ajuste presentado por el Ayuntamiento de Albaida con el que pretendía financiar el crédito de 6,5 millones de euros del estado del Plan de Pago de Proveedores para pagar facturas pendientes. Ante esta situación, el alcalde albaidense, Josep Antoni Albert, ha manifestado que solicitará reuniones tanto con el Ejecutivo central como con otros organismos --como las federaciones española y valenciana de municipios (FEMP y FVMP)-- "para que den alternativas y poder hacer frente al pago".
El primer edil ha explicado que la negativa se basa en que el Ministerio no ve "consistentes" las previsiones de ingresos teniendo como referencia las de los ejercicios anteriores. También se ha destacado el problema que supone el alto endeudamiento municipal, que se sitúa en 17,4 millones de euros; y, finalmente, esgrime que el periodo medio de pago a los proveedores supera la legalidad establecida.
Ante esta situación Josep Antoni Albert, representante de Compromís, ha informado que este miércoles se reunirá con sus socios de gobierno (PSPV y UCiD) para estudiar las estrategias a seguir y hacer frente a la situación. Así destaca que como primer paso se contactará con aquellos municipios de todo el Estado que estén en la misma situación que Albaida. "Sabemos que hay otros y no nos pueden dejar sólo", ha manifestado.
También prevé pedir también ayuda a las matrices de PSPV y Compromís para que les ayudan a hacer gestiones políticas y, por lo tanto, dirigirse posteriormente a los organismos que entienden los tienen que "amparar", como son el propio Ministerio de Hacienda, la Generalitat o la FVMP y FEMP.
UNA SITUACIÓN 'HEREDADA' Y DE IMPOSIBLE SALIDA
La negativa del Gobierno de hacerse cargo de las facturas agrava la sitaución de una lolalidad que se vio abocada a pedir ayuda a la desesperada al minsitro de Hacienda hace unos meses. Tal y como públicó ValenciaPlaza.com, esta pequeña localidad, gobernada actualmente por un tripartito conformado por PSPV, Bloc y un partido independiente (UCiD), levantó la mano en señal de ahogo el pasado febrero: la situación es insostenible, de quiebra absoluta.
El estado de las cuentas del municipio de la Vall es tan apocalíptico que los responsables de gobierno local, han remitido un SOS, una súplica a través del servicio postal, al propio ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra.
En ambas cartas, se describe la situación actual de las arcas del consistorio, gobernado por el PP en las dos anteriores legislaturas. La misiva desglosa a grandes rasgos las cuentas del ayuntamiento tras el informe que encargó el nuevo gobierno a una consultora: los resultados son desastrosos. Una deuda que supera los 17 millones de euros.
El socialista Josep Bodí lo explicó entonces con claridad: "Los ingresos mensuales del consistorio se sitúan en 200.000 euros, y los gastos rondan los 400.000. Aumentando los ingresos al máximo y reduciendo los gastos al mínimo podríamos recuperar un millón de euros cada cuatro años: es insuficiente, no llegamos a poder afrontar la deuda".
De aquel mensaje de auxilio, sin embargo, ha recibido una negativa que puede tener consecuencias impredecibles para esta localidad del interior de Valencia
Ànims a l'actual equip de govern, que ha heretat un "pufo" del des-govern del PP que p'a que.
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