Comparte esta noticia

• Tweet
• meneame

Otras noticias

• El Ibex 35 reconquista la cota de los 10.100 puntos con Bankia en plan estelar
• La banca, con Bankia a la cabeza, lleva al Ibex 35 a liderar los avances en Europa
• El Tesoro vuelve a pagar más por sus nuevos bonos y obligaciones

VALENCIA (VP). Con bastante más pena que gloria, Corporación Dermoestética cumplió ayer sus primeros cinco años cotizando en bolsa. A lo largo de ese periodo se ha dejado en el parqué un 77,47%. Un porcentaje que comprende desde los 9,10 euros que fue el precio adjudicado a todo aquel que acudió a la Oferta Pública de Venta (OPV), hasta los 2,05 euros con los que cerró ayer. O lo que es lo mismo: el precio más bajo de toda su historia, que se ha llevado por delante nada más y nada menos que 142,19 millones de euros en términos de capitalización bursátil.

La compañía de José María Suescun, que ha declinado hacer cualquier tipo de valoración a su trayectoria bursátil a este diario, ha acentuado su debilidad en los últimos meses a causa de la fuerte caída del consumo en España. "Actualmente presenta unas perspectivas llenas de incertidumbre debidas fundamentalmente a la crisis. Y un sector como el que integra todas las modalidades de la medicina estética se ve seriamente castigado", advierte Miguel Freijo, analista macro de IG Markets.

La salida a bolsa fue dirigida por Morgan Stanley -cobrando así las pertinentes comisiones por colocación-, pero el broker americano no tardó mucho en sacar un informe advirtiendo que el valor cotizaba en bolsa a precios elevados. También la puesta de largo de la empresa de Suescun fue muy criticada porque el empresario valenciano se presentó en la Bolsa de Madrid -en lugar de hacerlo en la local- rodeado de 50 modelos ataviadas con minifalda blanca y estetoscopios. La cotizada valenciana se anotó una fuerte subida en su primer día de un 18,9%, convirtiéndose en el mejor estreno en bolsa desde Inditex en 2001, cuyos títulos se dispararon en su debut un 22,45%.

Pero lo cierto es que el valor apenas logró dar alegrías a sus incondicionales durante los primeros días de cotización en el Mercado Continuo. A partir ahí acusó una notable caída bursátil -muchos analistas advertían que el valor estaba muy caro en términos de relación precio/beneficio (PER)-, llegando hasta la zona de los 6 euros a mediados de 2006. Además, con la particularidad de que el volumen de negocio se fue secando, es decir, iba a menos. De hecho, en cuestión de unas pocas semanas pasó de intercambiar más de un millón de títulos al día a poco más de 100.000. Todo un aviso a navegantes.

DEL CIELO AL INFIERNO BURSÁTIL
Sin embargo, la entrada de varios fondos de inversión extranjeros a finales de 2006 y las recomendaciones de compra desde varias casas de análisis hicieron que el valor rebotara desde esos 6 euros hasta los 11,78 euros que cerró el 17 de mayo de 2007, su máximo histórico. Apenas tres meses logró mantenerse por encima de la barrera psicológica de los diez euros porque, tal y como se puede apreciar en el gráfico adjunto, a finales de agosto de 2007 -precisamente cuando estalló la crisis de las hipotecas basura-, el valor comenzó a caer en bolsa... hasta hoy.

Aunque conviene recordar que el verano pasado la compañía lanzó una Oferta Pública de Adquisición (OPA) sobre acciones propias para reducir su capital, a razón de 5,5 euros por títulos, para amortizar el 47,41% del capital social (18,18 millones de acciones). Pero ni aún así, ni los planes de expansión en países como Portugal, Italia y Reino Unido, ni las adquisiciones realizadas, ni los nuevas líneas de negocio y proyectos que lleva en marcha actualmente han logador enderezar el rumbo de la cotización de la primera cotizada española del sector médico-estético en debutar en bolsa. Y no sólo eso sino que el volumen de contratación ha caído hasta una media diaria en lo que va de 2010 de 13.400 títulos.

Un ejercicio que se está saldando con un retroceso en bolsa de un 35,33%, mientras el conjunto del mercado aguarda la inminente presentación de sus resultados semestrales. A la vista de los que presentó en el primer trimestre -donde incrementó sus pérdidas a un ritmo del 29% hasta los 1,55 millones de euros -, las perspectivas no son nada halagüeñas.

UNA BUENA CAJA
A juicio del analista de IG Markets, la clave está en si la compañía podrá mantener el incremento del 7% de enero a marzo de este año en comparación con el mismo periodo de 2009, que podría darle oxígeno en bolsa. "De mantenerse el crecimiento sería un gran motivo para captar el interés de los inversores, más aún cuando la compañía goza de una fuerte posición financiera, ya que dispone de un efectivo en caja de 43 millones de euros. Por otro lado, será también muy interesante conocer la evolución de los nuevos tratamientos lanzados para reforzar sus ventas, así como el plan de recorte de gasto y optimización de recursos puesto en marcha a comienzos de año", advierte Freijo.

Mientras tanto, los accionistas de Corporación Dermoestética, entre los que destacan Banco de Valencia (8,67%) y el fondo QMC (5,12%), además del propio Suescun que controla el 50,42%, van a tener que armarse de paciencia y confiar en las nuevas líneas de negocio y proyectos para devolverle el brillo a la cotizada valenciana.