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VALENCIA. Esta semana se presenta el ‘Llibre de la història de Florida', que recoge los más de 30 años de trayectoria de este centro universitario y de formación superior enclavado en la comarca de l'Horta Sud, y cuyo principal logro es hacer realidad el concepto de "formación a lo largo de la vida". Muy vinculado desde sus inicios a los principios del cooperativismo, este proyecto formativo tiene hoy en el compromiso social su razón de ser, buscando siempre la mejora constante de empresas e individuos, según explica a Valenciaplaza.com Joan Gandía, presidente de este centro educativo, quien ve en la especialización el futuro de la formación superior y de posgrado.

-¿La formación sigue siendo un negocio rentable en medio de esta crisis?
-Las personas están volviendo a plantearse la formación. La gente, al estar en un entorno de crisis y sin trabajo, aprovecha para actualizar sus competencias; tiene tiempo y vuelve a acudir a los centros educativos. Las empresas, por su parte, tienen una preocupación importante por resolver las situaciones críticas que les afectan, pero tampoco han abandonado la formación. Lo que se ha producido es una focalización hacia las áreas financiera o comercial, para reforzar sus puntos débiles con el fin de afrontar esta crisis.

-Entonces, ¿las empresas siguen apostando por la formación?
-El futuro está en la innovación y la mejora permanente y, para ello, han de actualizar las competencias de sus trabajadores. Ya sea con recursos propios o con los que ofrece la Fundación Tripartita, las empresas siguen la senda de la formación. Desde Florida, trabajamos con las organizaciones empresariales y se produce un feedback para responder a las necesidades reales de las empresas, y tenemos un éxito importante de titulados que se incorporan en un recorrido profesional a esas empresas.

-¿Qué le falta todavía al tejido empresarial valenciano para ser realmente competitivo?
-Hemos de dar el salto de producir a innovar, que nuestro producto esté en constante evolución. Muchos empresarios lo tienen claro, lo que hace falta ahora son las ayudas necesarias por parte de la Administración Pública para poner en marcha todo el proceso, así como cambiar la cultura de todos los directivos y empresarios para introducir los cambios necesarios y que deben afectar a toda la estructura empresarial. Hace falta un recorrido de unos años para que cale en los directivos y mandos intermedios que la competitividad pasa por la innovación permanente.

-¿Cómo fueron los orígenes de Florida?
-Surgió como respuesta a necesidades de formación profesional en las empresas de l'Horta Sud, a partir de unos empresarios vinculados fundamentalmente al mundo cooperativo. En el curso 75-76 empezó a desarrollarse el proyecto y en septiembre de 2007 comenzaron las clases de 2º grado de FP de la rama metal-madera.

-¿Qué ha cambiado desde entonces?
-Ha cambiado mucho tanto Florida como el sistema educativo. Nadie pensaba que un pequeño centro se convertiría en un centro de formativo con un campus de 27.000 metros cuadrados y 4.000 alumnos al año. Hoy se empieza a estudiar aquí con 12 años y se puede continuar hasta los 65. Ya que se imparte educación secundaria, ciclos formativos, estudios universitarios y de posgrado, formación continua desde la empresa u ocupacional para desocupados, e incluso la ‘Universitat del Major', donde los mayores de 55 años pueden volver a la universidad por el simple placer de aprender. Con ello, el concepto de formación a lo largo de la vida se hace realidad en Florida.

-¿Y los cambios en el sistema educativo han sido para mejor o para peor?
-El sistema ha cambiado para mejor, pero hay que cambiar todavía muchas cosas. Se ha extendido la enseñanza obligatoria hasta los 16 años, y esto es un avance importante, ya que antes los chavales acababan de estudiar a los 14 y hasta los 16 no podían trabajar, y quedaba un vacío de dos años en el que no se sabía qué hacer con ellos.

En general, todo el cambio del sistema de la Formación Profesional es un acierto a nivel técnico, ya que es una formación mucho más específica y orientada totalmente a la empresa. También representan un gran avance los títulos de grado, que tienen el objetivo de que la formación sea en base a competencias. Y la situación de los jóvenes también ha cambiado, por lo que hay que atender a sus necesidades e intereses y continuar avanzando y mejorando.

-Cuando se fundó Florida apenas había competencia. ¿Por qué se han creado tantas escuelas de negocios y universidades privadas?
-La liberalización del sistema educativo ha hecho ampliar las titulaciones y las competencias de los centros educativos. Nosotros vemos como algo positivo que haya una oferta formativa plural, respetando la oferta pública, que se intente adecuar a las necesidades del entorno, por la diversidad de necesidades sociales y empresariales.

-¿Pero hay mercado para todos?
-En principio sí, aunque los distintos centros se tendrán que ir especializando en determinadas titulaciones. Nosotros hemos hecho opción por lo que sabemos hacer: el área técnica y de gestión empresarial. Cada centro va a tener que ir haciendo sus opciones, y esto es algo que también pasará con las universidades públicas. Creo que ya se está empezando y cada vez ocurrirá más.

-Desde Florida impulsan la economía social, ¿está muy ligado el cooperativismo a la responsabilidad social?
-Una gestión moderna pasa por un compromiso con la sociedad. El cooperativismo, desde sus orígenes, parte de unos valores que hoy comparte con la Responsabilidad Social Corporativa, como son la participación en la gestión empresarial, el compromiso con el entorno y la corresponsabilidad dentro de la gestión... El cooperativismo, por tanto, está bien posicionado, pero no nos podemos dormir en los laureles, ya que se necesita una mejora continua en los valores de la responsabilidad social.

-Después de estos treinta años, ¿cómo ve el futuro de la formación en la Comunitat?
-Tenemos buenos centros formativos y buenas iniciativas, tanto en la red pública como en la privada. Estamos bien posicionados y a la altura de las empresas. Pero tenemos que ir acompasándonos y dar una verdadera respuesta a sus necesidades reales. Creo que lo podemos hacer y que la Comunitat Valenciana puede posicionarse competitivamente respecto al resto de España y de Europa.