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AVILÉS (EFE). La multinacional del aluminio Alcoa ha anunciado hoy su intención de recortar la producción de sus plantas españolas en Avilés y La Coruña, consideradas entre las más costosas, junto a la italiana de Portovesme, que igualmente se verá afectada por esa medida.

La compañía ha informado a través de un comunicado que tiene la intención de recortar sus operaciones en estas tres plantas de aluminio de Europa como parte del plan global de reestructuración del negocio primario previamente anunciado. Este plan supondrá un recorte de su capacidad de producción en todo el mundo de casi el 12%, lo que supone 531.000 toneladas, a lo largo del primer semestre de 2012.

La semana pasada, Alcoa anunció el cierre definitivo de la planta que la compañía tiene en Tennessee y de dos series de electrólisis de la planta de Rockdale, en Texas. En Portovesme, Alcoa iniciará un período de consultas para cerrar de forma permanente la planta. En La Coruña y Avilés, se llevará a cabo un recorte parcial y temporal de la capacidad de producción.

La posición poco competitiva de la energía, junto con el incremento de los costes de materias primas y la caída del precio del aluminio, ha motivado el recorte de la capacidad de producción previsto en dichas plantas. Estos recortes representan 240.000 toneladas, o el 5% de la capacidad global de producción de Alcoa, que tiene intención de reducir su capacidad global un 12% en 2012.

La capacidad de producción total de Portovesme es de 150.000 toneladas, mientras que las de La Coruña y de Avilés son de 87.000 y 93.000 toneladas por año, respectivamente. "En la actual economía global, que cambia rápidamente, hay que responder de forma rápida para mantener la competitividad", asegura Chris Ayers, vicepresidente ejecutivo de Alcoa y presidente del negocio global de Productos Primarios de la Compañía.

Ayers dice que se ha tomado esta decisión después de analizar todas las alternativas posibles" y asevera que existe el compromiso de la empresa compromiso de trabajar para buscar soluciones "que minimicen el impacto en estas comunidades y en los trabajadores".

Alcoa iniciará de forma inmediata consultas con los representantes de los trabajadores y las autoridades competentes. El número total de empleados afectados de los 1.500 que componen las tres plantas afectadas no se podrá determinar hasta que el período de consultas haya concluido.

Estos recortes contribuirán al objetivo a largo plazo que la compañía tiene de bajar 10 puntos porcentuales la posición de Alcoa en la curva de costes global de la producción de aluminio. También busca esta compañía mejorar su posición actual en el "volátil" mercado del aluminio, dado que los precios han caído más de un 27% desde su máximo en 2011.

Adicionalmente a estos cierres y reducciones, Alcoa tomará medidas que aceleren la reducción de costes de las materias primas que se utilizan en el negocio de productos primarios. Igualmente, anuncia que ajustará su capacidad en todo el sistema de refino que la compañía tiene en el mundo para adaptarse a la demanda interna y a las condiciones del mercado.