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Madrid-Valencia, por el interés te quiero

10/07/2010 Las dos capitales españolas estrechan sus relaciones financieras, económicas y turísticas gracias a la llegada del AVE, a la fusión entre Bancaja y Caja Madrid y a los planes de promoción turística conjuntos anunciados por sus gobiernos autonómicos

VALENCIA (LIDIA MASERES). Madrid y Valencia están cada vez más cerca. Las dos capitales se atraen, están unidas por intereses económicos... y políticos (ambas llevan años gobernadas por el mismo partido). Las últimas operaciones financieras y las nuevas infraestructuras que las conectarán, previsiblemente en unos meses, hace que cada vez haya menos kilómetros entre ambas. La fusión entre Bancaja y Caja Madrid, y la llegada del AVE, junto con el turismo, son algunas de las claves de esta relación, por el momento, de atracción fatal.

Valencia está cada vez más presente en Madrid, y viceversa. Los negocios y estrategias logísticas entre las dos ciudades son cada vez de mayor calado, sobre todo desde que hace unas semanas, Bancaja y Caja Madrid acordaran su unión para convertirse en la primera caja de ahorros de España y en el tercer grupo financiero del país por detrás del Banco Santader y del BBVA.

A pesar de que Valencia se haya quedado sin su entidad de referencia, la ciudad ha cobrado protagonismo en Madrid. Que Bancaja forme parte de Caja Madrid podría atraer inversiones y negocios a la ciudad gracias al mayor reconocimiento internacional de la caja que preside actualmente Rodrigo Rato. Además, conviene recordar que la cartera industrial de Caja Madrid (Cibeles) va a estar bajo control indirecto valenciano, y ésta tiene alrededor de 2.500 millones de euros.

Por otra parte, el traslado del centro de decisiones financieras a Madrid obligará a muchos directivos valencianos a desplazarse hasta la capital, fomentando así mayores relaciones entre las ciudades.

"La llegada del AVE y la fusión de Bancaja supone un claro acercamiento entre las dos comunidades. Las empresas de la Comunitat necesitan centros próximos de decisión y gestión para que la financiación fluya. Por eso, es importante que, dentro de los acuerdos de los SIP, se incluya el mantenimiento de las estructuras actuales que permitan a nuestras pymes mantener esa relación de proximidad", afirman fuentes de Cierval.

No todos opinan igual. "Tengo la sensación de que con la fusión hemos perdido, casi sin darnos cuenta, mucho de nuestro marchamo financiero. Sin duda la unión a Caja Madrid creará una entidad más fuerte pero en la que lo valenciano se verá difuminado", opina Javier Navarro, director de GBS Finanzas en la Comunidad Valenciana, para quien la unión de las entidades financieras no ha sido demasiado positiva.

Junto con estos dos hechos relevantes, hace unos meses, un grupo de empresarios valencianos creó la Fundación Conexus, una plataforma para dar el salto a la capital y defender desde allí los intereses de las empresas de la Comunitat. Según declaró Javier Serratosa, presidente de la entidad, no se trata de un lobby, sino de un grupo de empresarios que va a estar cuestionándose qué hacer para tener más presencia y peso en Madrid.

"Se están produciendo acontecimientos que van a resultar determinantes para el futuro desarrollo comercial y económico de la Comunitat Valenciana. De la fusión de Caja Madrid y Bancaja y la entrada en funcionamiento del AVE cabe esperar y exigir que sean un motor de dinamización de la economía para nuestra Comunitat, un factor esencial para el desarrollo de nuevas oportunidades y un punto de partida para afrontar una nueva etapa que traiga prosperidad y desarrollo a la Comunitat Valenciana, llamada a ser sin duda un actor con el máximo protagonismo en el proyecto de revitalización económica del conjunto de España", señala a Valenciaplaza.com Javier Serratosa.

CAMPAÑA DE PROMOCIÓN COMPARTIDA

Además de los negocios estrictamente económicos, los gobiernos autonómicos de las dos comunidades, ambas gobernadas por el Partido Popular, estrecharon más sus relaciones el pasado lunes ante la llegada de la alta velocidad que las unirá, según afirmó esta semana el Ministerio de Fomento, las próximas navidades.

Tras reunirse, hace un par de semanas, con el consejero de Economía y Hacienda madrileño, Antonio Beteta, la consellera de Turismo de la Comunitat, Belén Juste, anunció que Valencia y Madrid iban a llevar a cabo, de forma conjunta, una campaña de promoción de los dos destinos, "identificando todos los recursos turísticos entre los que se pueden establecer sinergias".

Como adelantó -no hay más noticias sobre dicha estrategia-, las dos autonomías van a trabajar en el diseño de una denominación común, en un plan de promoción conjunta en los mercados emergentes, así como en un plan de fomento de pasajeros. "La clave está en identificar y aunar las fortalezas de ambos destinos creando binomios complementarios con elementos como el sol y playa, cultura, ocio o la gastronomía", declaró la consellera.

EL AVE ATRAERÁ 2,5 MILLONES DE USUARIOS MÁS

Las repercusiones que tendrá la alta velocidad en la Comunitat todavía no son más que un esbozo, pero según las previsiones de la Conselleria de Turismo, en su primer año de funcionamiento se prevé que tres millones y medio de usuarios elegirán este medio para desplazarse a Valencia. Traducido en euros, los ingresos podrían ser de 140 millones. En el caso de Alicante, se calcula que usarán la línea alrededor de tres millones de viajeros.

"La cifra de usuarios prevista es sensiblemente superior a la que actualmente opta por el transporte ferroviario para viajar desde o hacia la capital de España, pues apenas supera el millón de personas", aseguraron a VP fuentes de la conselleria.

Para Mariano González, miembro de la junta directiva de la Asociación Española de Profesionales del Turismo (AEPT), la llegada de la alta velocidad que conectará Madrid y Valencia va a suponer una fuente de enriquecimiento para ambas comunidades, así como un "lanzamiento turístico extraordinario". Pero afirma que no puede quedarse sólo en eso, las administraciones públicas y todos los empresarios implicados tienen que invertir, de lo contrario, se desaprovechará la oportunidad de negocios.

Según afirmó, además de patrocinar a las capitales, todo su entorno participará también de los beneficios de la nueva infraestructura. Habla de Madrid y de Valencia, pero también de Toledo, de Ciudad Real, de toda la costa del Levante. "Valencia se va a convertir en el puerto de Madrid gracias al auge del sector de los cruceros. Con el AVE, no habrá ningún puerto español que esté más cerca de la capital que el de Valencia", argumenta al teléfono. Asimismo, destaca que ir a ver un estreno a Gran Vía, o comer una paella en el Mediterráneo y volver a casa para dormir no será un suplicio, todo lo contrario.

Desde la patronal valenciana, Cierval, declaran que se potenciará el papel de la Comunitat como centro de servicios y negocios, potenciará el turismo y el mercado de segundas residencias y todo ello beneficiará a otros sectores como el comercio, la restauración, la cultura, etc.

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2 comentarios

Manuel escribió
12/07/2010 11:36

Valencia es el bar de Madrid. Aquí seremos sus camareros mientras que los empleos cualificados (desde la banca a la electrónica) se quedarán en Madrid. Y no por méritos propios sino por ser la capital de España y estar allí todos los peces gordos. ¿encima tenemos que estar contentos?. Tengo tres hijos y los tres se han tenido que ir a Madrid. O sea que mirar más allá es emigrar todos para que vengan a su vez inmigrantes dispuestos a trabajar por menos para servir a los madrileños. ¿es eso lo que queremos?. Pues es a eso a lo que nos leva esa actitud siucida.

BTAB escribió
10/07/2010 11:52

Considero fantástica jugada táctica la de reunir Valencia con Madrid, geográficamente las dos comunidades no se hacen la competencia y saldrán beneficiadas las dos, incluso me atrevería a decir que Valencia tiene más a ganar que Madrid, por lo que no entiendo la "atracción fatal" que acusa Lidia Maseres. Las inversiones siempre son deficitarias, los primeros pasos suelen estar por pulir, pero de ahí a tachar de "atracción fatal". Miremos más allá, el corto plazo es inválido para estas situaciones.

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