El intenso ajuste del mercado registrado en 2008 se mantuvo el año pasado, aunque con menor intensidad, según recoge el sexto informe del sector elaborado por la consultora KPMG, que refleja hasta qué punto acusaron las principales inmobiliarias los primeros síntomas de la crisis  

-Ranking del desastre inmobiliario

-Diez recomendaciones para empresas y Administración

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VALENCIA (VP). El año 2008 supuso un punto de inflexión en la burbujeante trayectoria de las grandes inmobiliarias valencianas. El primer embate de la crisis financiera conllevó unas pérdidas de 22 millones de euros entre las 21 principales inmobiliarias de la Comunitat y sacó a la luz los primeros signos de agotamiento de un modelo de crecimiento basado en el ladrillo.

Como se observa en el documento adjunto, nueve de las 21 compañías analizadas por KPMG en su sexto informe del sector inmobiliario entraron en pérdidas en 2008 (Torreviñas, Prodaemi, Torrevisa, Edival, Promociones Euro-House, Viviendas Jardín, Edificaciones Calpe, Gesfesa y Residencial Vista Alegre) y sólo seis incrementaron ligeramente su resultado respecto a 2007.

En total, doce de estas firmas tuvieron beneficios y diez incluso repartieron dividendos, pero "será muy complicado encontrar una sola de estas empresas con un resultado positivo", según vaticinó el socio director de la consultora KPMG en Valencia, Juan Latorre, debido esencialmente al elevado apalancamiento que sufren este tipo de empresas y la escasez de financiación.

El estudio indica que las ventas del conjunto de las 21 sociedades analizadas disminuyeron el 10%, hasta situar la cifra de negocio en 1.564 millones de euros frente a los 1.734 millones de 2007. Esta reducción es el resultado de la caída tanto en el volumen de operaciones como del precio medio de las mismas.

Por tipo de producto vendido, el 77% de la cifra de negocio corresponde a ventas de edificaciones y locales comerciales (88% en 2007), el 17% a ventas de terrenos y solares (8% en 2007) y el 6% restante proceden de otros ingresos. La reducción del peso de las ventas de edificaciones y locales comerciales a favor de terrenos y solares se debe a que algunas sociedades tratan de obtener liquidez mediante la reducción de su cartera de suelo; así como por las ventas de suelo a entidades financieras realizadas por las sociedades que han refinanciado su deuda en 2008.

Durante 2008, los beneficios de explotación obtenidos experimentaron una notable caída hasta los 223 millones de euros, prácticamente la mitad del resultado de explotación de 2007. En porcentaje sobre ventas, el resultado de explotación pasó del 26,1% en 2007 al 14,3% en 2008, debido a que la reducción de los precios de venta de las viviendas y terrenos ha sido superior a la reducción de los costes de ventas y de los gastos de explotación.

Adicionalmente, el conjunto de las 21 empresas inmobiliarias analizadas registra pérdidas por deterioro de activos inmobiliarios por importe de 140 millones de euros, para ajustar el valor contable de los mismos al valor razonable. Asimismo, algunas sociedades han vendido en 2008 activos inmovilizados con importantes beneficios que han compensado, en parte, la caída del resultado de explotación.

El resultado neto después de impuestos ha sido negativo, con unas pérdidas de 22 millones de euros, por el incremento de los costes financieros, principalmente derivados de la subida de los tipos de interés; así como por el deterioro de los instrumentos de patrimonio en empresas del grupo y asociadas. El resultado financiero supone el 17% de la cifra de negocios de las 21 empresas inmobiliarias de la Comunidad Valenciana.

Respecto a magnitudes del balance, la partida de existencias disminuye el 6,7% en términos relativos, aunque se mantiene como la partida de mayor peso del activo agregado, mientras que las deudas con entidades de crédito, principal partida del pasivo, se reducen el 6%; por lo que las sociedades analizadas mantienen su ratio de endeudamiento en 2008, situado en un promedio de 2,83.

Únicamente dos de las 21 sociedades analizadas habían cerrado la refinanciación de su deuda en 2008. El resto lo ha completado durante 2009.

500 PUESTOS DE TRABAJO MENOS

Por lo que se refiere a la evolución del número de empleados, 13 de las 21 sociedades han reducido su plantilla media en 2008; lo que ha supuesto la pérdida de 458 puestos de trabajo.

En consecuencia, 2008 ha sido un año de ajuste para el sector inmobiliario valenciano, que ha continuado, aunque en menor medida, en 2009. Los ajustes para adaptar la actividad de las empresas a la menor demanda y para afrontar la compleja situación que provoca la falta de liquidez, así como la finalización de los procesos de refinanciación bancaria, serán determinantes para superar la actual crisis económica.

Asimismo la contracción del mercado nacional obliga a las empresas a la búsqueda de nuevos mercados en países emergentes.

Para los expertos de KPMG que han elaborado el estudio: "En la situación actual, definir la estrategia a medio y largo plazo es más necesario que en cualquier otro momento. Las empresas han de evaluar su modelo de negocio, sus puntos fuertes y debilidades; centrarse en la actividad en la que cuenten con más experiencia y diferenciarse de sus competidores; tomar el servicio al cliente como eje fundamental de su actividad y retener a los mejores profesionales de la organización para que gestionen esas decisiones. No es menos cierto que los momentos de crisis lo son también de oportunidades y los que superen esta etapa saldrán reforzados".