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VALENCIA. El nuevo SL de Mercedes se presenta mucho más ligero y con innovaciones tecnológicas muy novedosas. Mercedes-Benz presenta antes de finales de año la nueva edición del SL, un roadster de desarrollo completamente nuevo y ejecutado, por primera vez, casi íntegramente en aluminio. La carrocería básica de aluminio pesa unos 110 kg menos que una carrocería similar con la tecnología del modelo antecesor. Por otra parte, la nueva generación de deportivos de lujo se transforma en una sala de conciertos, tanto al aire libre como cubierta.

 La nueva estructura de la carrocería permite incorporar un sistema Frontbass único en el mundo que celebra su debut en este modelo. Otra primicia mundial del nuevo Mercedes-Benz es el sistema limpia-lavaparabrisas adaptativo.Este eficiente equipo pulveriza con precisión el agua necesaria directamente por delante de la escobilla limpiaparabrisas, teniendo en cuenta el sentido de barrido. De ese modo, el cristal queda limpio como por arte de magia sin que se aprecie un chorro ni una película de agua.

La nueva generación del Mercedes-Benz SL se toma muy en serio el significado original de la famosa sigla «SL»: deportivo y ligero. Al igual que en el modelo fundador de la saga -el SL de 1954 con bastidor tubular ligero-, la reducción sistemática del peso es uno de los logros constructivos más destacados del nuevo SL. Es la primera vez que Mercedes-Benz produce en grandes series una carrocería básica íntegramente de aluminio. Son muy pocos los componentes fabricados utilizando otros materiales. En la pared trasera, por ejemplo, los proyectistas han utilizado un material aún más liviano, el magnesio. En los montantes delanteros se integran tubos de acero de alta resistencia.

Este nuevo desarrollo pesa unos 110 kg menos que una carrocería equiparable ejecutada con la tecnología anterior. «Es como si se bajara del vehículo un acompañante de la categoría de pesos pesados, cargado con un voluminoso equipaje», afirma Thomas Rudlaff, responsable de Carrocería de Aluminio en Mercedes-Benz. «El resultado se nota y puede medirse. Menos peso significa más dinamismo y menos consumo. En otras palabras: el placer de conducir aumenta y el impacto medioambiental disminuye».

La estructura de aluminio se muestra superior en términos de rigidez, seguridad y confort a la ejecución de acero del modelo antecesor. Ello se debe a la construcción ligera inteligente con componentes optimizados en función de la finalidad prevista. Así, por ejemplo, se emplean distintos tipos de tratamiento del aluminio. Según su función, los componentes se fabrican por fundición en coquilla o por fundición inyectada en vacío, se procesan a partir de perfiles extrusionados o se incorporan en forma de chapas de aluminio de distinto grosor. El resultado es una gran rigidez y alta seguridad, unidas a bajos niveles de resonancia y vibraciones.

Los componentes se ensamblan en fábrica utilizando diferentes técnicas, algunas de ellas muy innovadoras, y siempre de acuerdo con los esfuerzos que deberán soportar. Para garantizar uniones seguras se recurre, por ejemplo, a procedimientos como la soldadura en atmósfera de gas inerte, el engatillado, la adhesión, los tornillos roscadores por fluencia, los remaches roscados estampados o la soldadura por fricción-agitación.