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VALENCIA. La tarde noche del miércoles fue agitada en Alicante. La dimisión del presidente provincial del partido, José Joaquín Ripoll, y su relevo al frente de la formación en Miguel Ortiz, alcalde de Altea y cercano al ya expresidente, ha causado revuelo en las entrañas de la provincia alicantina.

Según las fuentes del PP alicantino consultadas por este diario, la dimisión de Ripoll estaba "pactada" de antemano con el presidente regional de la formación, Alberto Fabra, quien rechazó la posibilidad de armar una gestora que condujera al partido hasta el congreso provincial que se celebrará en junio.

Una de las opciones que apareció sobre la mesa, merced a la intervención del exministro Federico Trillo, fue la de situar a la exsecretaria general del PPCV y alcaldesa de Elda, Adela Pedrosa. Esta posibilidad, rechazada por el sector ‘ripollista', tampoco fue aprobada por Alberto Fabra.

Las citadas fuentes aseguran que el presidente regional no tiene intención de elevar a ninguno de los aspirantes al liderazgo provincial por el momento. De hecho, Fabra contempla la opción de impulsar para el cargo a una cara nueva y joven para el futuro en vez de a un dirigente con ‘solera'.

La renovación en Alicante es necesaria. Según señalan dirigentes del partido, la alcaldesa de Elche, Mercedes Alonso, es una de las que ha mostrado su interés por encabezar la presidencia en el futuro. Conocida por Mariano Rajoy -hizo visita puntual a Elche en la campaña de las autonómicas- y primera edil de un municipio importante, es una de las favoritas para auparse en el cargo.

No obstante, la sintonía con la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, y su entorno, no es buena, al igual que con el sector ‘ripollista'. La propia Castedo sería otra de las aspirantes al cargo si no fuera por su delicada situación respecto al caso ‘Brugal', un asunto que, lejos de solventarse, parece complicarse cada día más.

Otro de los dirigentes de relevancia para el cargo es José Císcar, conseller de Educación, quien, dado el peso de su cartera, debería dejar su cargo para acceder a este tipo de responsabilidades. Fuentes consultadas por este diario señalan, en cambio, al exalcalde de Teulada como posible próximo secretario general del partido.

Habrá que ver también el papel que adopta la actual presidenta de la Diputación, Luisa Pastor. A priori, una dirigente que no se postula pero que, en un momento determinado, podría convertirse en una solución neutra para todos y dócil para Alberto Fabra. 

LAS BICEFALIAS YA NO SON TABÚ: CARAS NUEVAS

Con Alberto Fabra, están cambiando también conceptos hasta ahora inamovibles en los últimos años en el PPCV. La posibilidad de que se produzca una bicefalia en Alicante comienza a ser contemplada. En este sentido, el líder regional ha "abierto" el abanico de opciones para encabezar el PP de Alicante, según asegura un dirigente de la provincia.

De esta manera, además de la posibilidad de Mercedes Alonso, Fabra estudia la opción de acometer un proceso de renovación en Alicante con una cara diferente al frente del proyecto, impulsando a la primera línea a la nueva generación de dirigentes ‘populares' alicantinos. Una decisión que podría beneficiar al presidente regional para un mejor control del partido pero que podría incomodaría a dirigentes con recorrido histórico en el partido.