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'Madrid City', próxima parada financiera para los grandes clientes de Bancaja

OLIVIA FONTANILLO. 14/06/2010 Además de las ventajas y garantías genéricas que representa para las empresas trabajar con un gran grupo financiero, la fusión de Bancaja con Caja Madrid traerá consigo igualmente cambios de 'costumbres' para los clientes empresariales de la caja valenciana

VALENCIA. Los términos del acuerdo de fusión fría con Caja Madrid dejan libertad a los directivos de Bancaja para seguir gestionando y tomando decisiones sobre la operativa con particulares, pero confían al nuevo órgano de gobierno del grupo configurado a través del SIP, ubicado en Madrid, la aprobación de los movimientos por importe superior a los diez millones de euros. Las decisiones sobre grandes operaciones con empresas y administraciones públicas valencianas se adoptarán en la capital del Estado.

A cambio, la unión con Caja Madrid permitirá a Bancaja acceder a fondos que, de otra manera, no tendría al alcance dada la crisis de deuda que viven los mercados financieros internacionales y el impacto del alto riesgo país de España en las preferencias de los inversores. El SIP integrado por las dos cajas de ahorros, además de otras cinco entidades de menor tamaño, prevé solicitar el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob) 4.465 millones de euros. Está por definir qué parte de ese dinero corresponderá a Valencia y cómo se gestionará.

Lo cierto es que Bancaja ha jugado en los últimos años un importante papel como soporte de entidades públicas y privadas de la región, en un momento de crisis económica y dificultad de acceso a fondos, incluso a costa de sacrificar margen e incrementar el nivel de riesgos. Es cierto que muchas de esas operaciones se han cerrado bajo presiones del sector político y empresarial. La alianza con Caja Madrid supone entrar en un nuevo escenario en el que las grandes decisiones tendrán que justificarse con criterios estrictamente económicos. Un avance positivo en términos de gestión, pero cuyo impacto en la economía valenciana está aún por determinar.

La Generalitat Valenciana y los organismos que de ella dependen son uno de los principales deudores de Bancaja. Al cierre del ejercicio 2009, la deuda del Gobierno autonómico con la caja ascendía a 170,3 millones de euros, según los dato del Informe de Gobierno Corporativo entregado por la entidad financiera a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Además, Bancaja ha sido uno de los soportes de la política industrial y financiera de la Generalitat, que ha propiciado su presencia en proyectos como Terra Mítica, el Aeropuerto de Castellón o los fondos de capital riesgo promovidos por el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF).

RENEGOCIAR CON MADRID

Entre los acreedores privados, prácticamente todas las grandes empresas de la región mantienen deudas y líneas de crédito con Bancaja, en todos los sectores de actividad. Desde Mercadona, hasta Ros Casares, Air Nostrum o Porcelanosa, pasando por los principales grupos inmobiliarios, como Lubasa, Sedesa o Cyes. La entidad valenciana ha estado presente en la mayor parte de los procesos de renegociación de deuda que ha vivido el sector empresarial valenciano en los últimos meses, con un papel clave en la viabilidad de firmas como Lubasa o Llanera.

La relación de Bancaja con los grupos inmobiliarios va más allá de los préstamos directos. La entidad financiera está directamente vinculada al desarrollo de proyectos en la región, a través de sus filiales especializadas, Cisa y Bancaja Hábitat. La cartera de ambas sociedades ha ido creciendo en los últimos años como consecuencia de acuerdos de canje de activos por deuda, así como los procedentes de ejecuciones hipotecarias.

Como resultado de estos movimientos, Bancaja es hoy en día uno de los principales propietarios de suelo y de promociones inmobiliarias en la Comunidad Valenciana. Esta posición está penalizando los ratios internos y los rating otorgados al grupo por las agencias internacionales de calificación de riesgos.

BANCAJA Y SUS FILIALES

La centralización de las decisiones sobre operaciones de gran envergadura afectará, asimismo, a la relación financiera de Bancaja con sus filiales. El ejemplo más claro es el de la inmobiliaria Cartera de Inmuebles (Cisa). Esta sociedad recibió el año pasado un préstamo de 1.600 millones de euros de la matriz, que se sumó a la inyección de 800 millones en el capital realizada en 2008. En el futuro, decisiones de este calado deberán contrar con el visto bueno "de Madrid".

Entre la multitud de asuntos pendientes, queda por estudiar cómo se resuelve la batalla entre ACS e Iberdrola, fuertemente participadas accionarial y políticamente ambas y respectivamente por Cajamadrid y Bancaja. En todo caso, esas participaciones servirán para redoblar el poder que el presidente del grupo resultante, Rodrigo Rato, tiene como dirigente del ahora ya tercer grupo financiero de España.

Tampoco hay que olvidar que Bancaja es también el principal acreedor del Valencia C.F. El club deportivo adeuda alrededor de 270 millones de euros a la caja, sin cuyo respaldo probablemente se habría visto abocado al concurso de acreedores. Por su parte, la caja madrileña ha respaldado la gestión de Florentino Pérez al frente del Real Madrid.

Por lo que se puede deducir del análisis de estos y otros datos similares, podría quedar aún mucho partido por jugar en las negociaciones entre ambas entidades.

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1 comentario

Manuel abad Somovilla escribió
17/06/2010 11:45

Cuando hay una alizanza, como la actual en la SIP de Bancaja y Caja Madrid se abre un proceso de adaptación, en el cual los actos más importantes, a los que hace referencia el articulo, seran consesuados por el órgano pertinente creado al efecto. Bancaja, estará representado, según los datos, en el 42%. La caja en su día a día no variara la forma gestión que tiene actualmente. El cambio de criterio que menciona el articulo sobre la racionalidad en la decisiones, creo que ya está extendida en Bancaja sino en todo el ambito financiero internacional, no creo que suponga muchos cambios. Las ventajas de esta alianza son muchas. Valencia cuenta con determinadas infraestructuras que son vitales para la empresas madrileñas, como lo es el puerto. También el turismo es un factor muy importante en la comunidad valenciana y que, tiene muy buena sintonia dese hace tiempo en la Comunidad de Madrid.Valencia y Alicante seran las ciudades más proximas en tiempo a Madrid con el AVE. Esta alianza mejorará las prespectivas de inversiones turisticas en nuestra comunidad y de las cuales estamos necesitados. Hay que recordar que la Comunidad de Madrid es muy activa en dicho sector. Sin contar con la mejora del turismo internacional del que Madrid es un importante receptor, por sus infraestructuras y conexiones, y por el Valencia está haciendo grandes esfuerzos por conseguir. Por otra parte, la facilidades de inversión de la SIP resultante verán con mejores opciones a la Comunidad ya que forma parte de ella como socio. Permitiendo a la empresas valencianas un mejor acceso al mercado de Madrid. Esta alianza, como todas, tiene ventajas e inconvenientes, según se sepa manejar las situaciones, las expectativas seran mejores, tanto en mejora de PIB valenciano como facilitadora del desarrollo autoctono. Esta alianza tiene muchas posibilidades de mejora para la Comunidad Valenciana, es labor de todos hacerlas realidad. Manuel abad

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