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VALENCIA. Las cosas claras y el chocolate espeso, reza el refranero popular. El líder del PPCV y presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, dejó ayer su impronta personal con dos frases que mostraron su liderazgo tras la reaparición de Francisco Camps en la cena de inicio de curso político, un hecho éste que causó un revuelo considerable en cargos y militancia.
Fabra se enfrentaba ayer a dos importantes retos dentro de su recién iniciada andadura como máximo responsable político en la Comunitat. En primer lugar, una aparición en los desayunos de Televisión Española; en segundo, su participación en la Junta Directiva Nacional del PP. En ambos lugares le preguntaron por su relación con Camps tras la sorprendente reaparición que protagonizó el expresidente el viernes. En ambos casos, dejó claro, sin aspavientos pero con firmeza, quién manda ahora en el PPCV y en el Consell.
Las declaraciones de Fabra muestran que tiene la intención de cortar el paso a futuras apariciones como la protagonizada el viernes por el expresidente. Todo apunta a que Camps quiere permanecer en primera línea para jugar la baza de la absolución -si llega- en la causa de los trajes y optar a ser repescado. La presentación de un escrito por su defensa podría retrasar el juicio a después de las elecciones generales, circunstancia esta que, según fuentes del PP consultadas, Camps podría aprovechar para alguna aparición estelar durante la campaña.
"Cuando venga Mariano Rajoy al mitin de Valencia, por ejemplo, tiene que ser uña y carne con Alberto, no puede aparecer el expresidente de la manera en que lo hizo el viernes pasado y que Rajoy tenga que hacerse la foto con él", comenta un alto cargo del partido.
Públicamente, Fabra desmintió ayer que exista "malestar" por la actuación de Camps. No obstante, la procesión va por dentro y desde su entorno admiten que no fue una aparición "al uso" y que la situación incomodó al propio representante de Génova en el acto, Esteban González Pons. Estos son los motivos por los que Fabra se decidió ayer a exhibir el cetro de mando y desmarcarse de su predecesor en el cargo con dos frases muy medidas pero contundentes: "En algo se habrá equivocado Camps" y "en este momento, es un afiliado más".
ENTREVISTA EN RTVE: "EN ALGO SE HABRÁ EQUIVOCADO CAMPS"
El presidente amaneció en los desayunos de Televisión Española dirigidos por la periodista Ana Pastor en una entrevista donde fue preguntado en diversas ocasiones por su relación con Camps. Cuando fue abordada la cuestión, el nuevo líder del PPCV emitió un expresivo suspiro que parecía decir: "Esto es complicado". Finalmente, recogió el guante y reconoció con firmeza: "Sí, en algo se habrá equivocado Camps cuando ha pasado lo que ha pasado". 
Fabra subrayó que Camps tenía la necesidad de "explicar" lo que había ocurrido al ser interpelado por su reaparición del viernes. La periodista aludió a la "generosidad" del responsable autonómico al permitir esa cesión de protagonismo. "Siempre soy muy generoso", replicó el líder del PPCV.
El presidente también lanzó otro dardo a la postura del que fuera líder del partido y máximo responsable autonómico: "Nunca debimos abandonar la transparencia", en referencia a revelar la documentación sobre el caso Gürtel, en lo que supone establecer mayor distancia entra la forma de actuar de Camps y la línea que pretende adoptar Fabra.
Sobre su gestión al frente de la Generalitat, Fabra expuso su intención de priorizar el empleo y aplicar recortes. "Debemos tener el sentido común de las amas de casa, que no gastan más de lo que tienen", subrayó, haciendo hincapié en la necesidad de una financiación autonómica "justa" por parte del Gobierno Central.
REUNIÓN EN GÉNOVA: "EN ESTE MOMENTO, CAMPS ES UN AFILIADO MÁS"
Más cuestiones tuvo que responder el líder del PP a su llegada a la sede nacional del partido, ubicada en la calle Génova. Preguntado por la participación de Camps durante la campaña para las próximas elecciones generales, Fabra aseguró desconocerla, agradeció la labor del expresidente "durante ocho años" para apostillar después: "En estos momentos, Francisco Camps es un afiliado más". Una frase que evidencia su intención de remarcar su liderazgo ante posibles amagos del exjefe del Consell.
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