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VALENCIA. Se lamentaba el lunes el empresario Vicente Boluda, el poderoso naviero que preside la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), de las incidencias provocadas durante la manifestación de los indignados del 15M porque incumplían las normas, algo ‘sagrado' para el empresario... y para la inmensa mayoría de la sociedad. Tiene razón Boluda: si no fijamos, cumplimos y hacemos cumplir unas mínimas normas del juego, la sociedad se sitúa bajo la ley del más fuerte, deja de funcionar y no progresa.

Días después de los citados incidentes, la comisión Nacional de la Competencia ha anunciado la apertura de expediente sancionador contra buena parte de la comunidad portuaria de Valencia,  organizaciones de transportistas, la propia Autoridad Portuaria de Valencia e incluso la Conselleria de Infraestructuras y Transportes bajo cuyo control se administra la actividad portuaria.

Investiga la CNC para demostrar actividades contra la libre competencia, la esencia misma de la economía de mercado que rige nuestros destinos económicos; si se han producido acuerdos de fijación de precios y de reparto de mercados. Sobra decir que si la citada comisión, presidida por el alicantino y exconseller de la Generalitat Luis Berenguer, se ha atrevido a abrir expediente investigador es porque cuenta con indicios suficientes sobre la comisión de este tipo de irregularidades por las que los citados organismos podrían ser sancionados con cuantiosas multas económicas.

Los empresarios y dirigentes políticos vinculados al puerto conocen a la perfección -mejor que nadie- su funcionamiento, sus protagonistas, sus relaciones y todo lo que allí acontece. Y sabe perfectamente cuál es el nivel de cumplimiento de las normas que allí se efectúa. Y de la tolerancia impotente que cubre a los 'intocables' del puerto desde hace décadas. ¿No merece todo ello ni un pequeño comentario, alguna reconvención, acerca del incumplimiento de normas por parte de determinados sectores portuarios de sobra conocidos y cuya capacidad de ejercer presión por todos los medios resulta inusual en una sociedad moderna? Las hemerotecas están repletas de noticias sobre flotas de camiones destruidos por sabotajes nunca aclarados ni resueltos. ¿Ni un comentario? ¿Valencia o Baltimore?