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BRUSELAS (OTR/PRESS). El grupo de reflexión sobre el futuro de la Unión Europea presidido por Felipe González presentó este sábado sus recomendaciones finales tras un año y medio de trabajo, entre las que destaca la flexibilización del mercado laboral y el retraso de la edad de jubilación para sostener el modelo social europeo y la defensa de la energía nuclear para garantizar la seguridad de suministro. González dijo que la UE lleva una década de retraso en las reformas para ser competitiva y alertó de que si no las lleva a cabo caerá en la "marginalización".

"Si no se hacen las reformas, Europa avanzará hacia una marginalización", dijo González en rueda de prensa durante la presentación de su informe. "Salvo que reaccionemos en las reformas estructurales que necesitamos y pongamos a funcionar Europa sobre otros carriles, dentro de diez años seguiremos hablando de la crisis, porque no la habremos superado", alertó.

A su juicio, la crisis económica "ha evidenciado con más fuerza los problemas estructurales que arrastra la UE", como la baja productividad, el desempleo estructural, el débil crecimiento o el envejecimiento de la población. Estos problemas además "hacen más difícil la recuperación europea que la posible recuperación americana, que está en el origen de la crisis financiera".

REFORMA DEL MERCADO LABORAL

El grupo de reflexión aboga por "redefinir" el modelo europeo de economía social de mercado, ya que "en las últimas dos décadas, el potencial de generación de crecimiento y empleo de la UE y, por consiguiente, de mejorar los niveles de vida, ha quedado por detrás del de sus principales socios comerciales". "La reforma del mercado laboral es fundamental para la creación de más y mejores empleos", insiste el informe.

Esta reforma debe permitir una mayor "flexibilidad laboral" pero al mismo tiempo debe garantizar "seguridad" para los trabajadores. "En un mundo en veloz evolución no son los puestos de trabajo lo que hay que proteger, sino a la persona que pierde el empleo, mejorando su capacidad de inserción laboral", señalan los expertos. También reclaman mejorar la movilidad laboral y los métodos de gestión de las empresas.

El informe alerta de que, si no se toman medidas compensatorias, en los próximos 40 años el coeficiente población activa/población inactiva caerá en picado, quedando cuatro trabajadores contribuyentes para mantener a cada tres jubilados. Por ello, el grupo de González reclama reformar "radicalmente" los sistemas de pensiones, de manera que "la jubilación debe pasar a ser una posibilidad, más que una obligación, para las personas".

"Deberán desalentarse las actuales prácticas de jubilación anticipada" y "la vida activa debe prolongarse aumentando la edad de jubilación real y legal", recomienda el informe, que pide a los Gobiernos hacer "más atractivos la contratación y el empleo de trabajadores de edad avanzada".

En materia educativa, el grupo de sabios apuesta por crear una red de universidades "de máximo nivel capaces de rivalizar con los mejores del mundo", aunque alerta de que la búsqueda de la excelencia "no descarta un esfuerzo simultáneo de fomento de un mayor acceso a la enseñanza universitaria". También debe fomentarse la autonomía financiera de las universidades y para ello "los estudiantes de alto nivel de renta deben contribuir a los costes cada vez mayores de la educación, y a la vez debe ponerse a disposición de los estudiantes que necesiten apoyo financiero un sistema de becas y créditos estudiantiles".

Si no se hace nada, de aquí a 2030 la dependencia energética de la UE aumentará del 50% actual al 60%. Para frenar esta tendencia, el grupo de reflexión pide en primer lugar aumentar el ahorro energético al 50% en 2030 desde el 20% para 2020 que ya está acordado. Y también apuesta por la energía nuclear.

"Europa no puede permitirse el renunciar a esta fuente de energía tan importante, pero el desbloqueo de las inversiones en energía nuclear requiere un nivel mayor de certidumbre normativa, y también que prosiga la elaboración de normas de seguridad", apunta el informe.

APOYO A TURQUÍA Y A NUEVAS AMPLIACIONES

El grupo de reflexión --compuesto por 12 miembros entre los que se encuentran también la ex presidenta letona Vaira Vike-Freiberga, el ex presidente ejecutivo de Nokia, Jorma Olilla, o el fundador del sindicato polaco Solidaridad, Lech Walesa-- se creó a propuesta de Francia en diciembre de 2007. Su mandato consistía en hacer propuestas para consolidar la estabilidad de la UE en el horizonte 2020/2030, excluyendo cuestiones presupuestarias y de reforma del Tratado. Sus trabajos han costado 1 millón de euros para viajes y dietas, ya que los miembros no han cobrado por su trabajo, explicó González.

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, quería también que el grupo de reflexión decidiera si la UE debe dotarse de fronteras o no, en un intento de lograr apoyos a su rechazo a la entrada de Turquía. Sin embargo, el informe final señala que "la UE debe seguir abierta a la adhesión de nuevos miembros potenciales de Europa" y pide "cumplir sus compromisos frente a los actuales candidatos oficiales, Turquía entre ellos, y continuar el proceso de negociación".

"Si el Consejo piensa que no tiene margen de maniobra suficiente para completar la negociación con Turquía, o con cualquier otro candidato, tiene que ser acordado entre las partes, UE y Turquía. Si no, 'pacta sunt servanda'. Europa no puede perder credibilidad incumpliendo sus propios compromisos", dijo González.
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