L.M.. 02/12/2010 El director de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada, Pablo Vázquez, exige un mayor esfuerzo al Gobierno para liderar políticas que fomenten la recuperación del tejido empresarial. Su hoja de ruta, afirma, no es costosa econoómicamente hablando, sino que se trata de una cuestión de actitud

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VALENCIA (L. MASERES). Productividad, competitividad y demanda son los tres factores claves que permitirían crear tres millones de puestos de trabajo en España en un periodo de cinco años aproximadamente. Esto asegura el estudio 'Una agenda de crecimiento para España' elaborado por McKinsey&Company y Fedea (Fundación de Estudios de Economía Aplicada), el cual destaca que los sectores de servicios empresariales, bienes exportables y turismo podrían revertir la situación del desempleo y colocar a España en una mejor posición a la actual.

"España puede crear hasta tres millones de empleos sostenibles , en un horizonte de cinco años, si se toman las medidas adecuadas", declara a Valenciaplaza.com el director de la Fundación, Pablo Vázquez. Desde su punto de vista, el texto es muy aspiracional, pero asegura que si el sector privado se implicara más y el público liderara el cambio, esta hoja de ruta podría funcionar como cualquier plan de negocio empresarial. En este caso, la sociedad sería "España S.A.", apunta.

Según el documento, el turismo y los bienes exportables podrían convertirse en uno de los motores de arranque nacionales si se reestableciera el equilibrio comercial del país. "Estimamos que el potencial de creación de empleo máximo en estos dos sectores es de 600.000 empleos", destacan los expertos.

Las políticas que proponen para acelerar el crecimiento de esta industria son: promocionar de la diferenciación y la innovación, aumentar la competitividad en los costes y consolidar la colaboración entre las empresas. En cuanto a la inversión que los actores sociales deberían llevar a cabo para materializar esta estrategia, Vázquez afirma que no sería muy elevada, ya que parte de sus planteamientos no cuestan dinero. "Por ejemplo, para ayudar a las empresas a internacionalizarse, y a pesar de los servicios del IVEX, el cuerpo diplomático debería estar mucho más implicado. Se trata de convertir en prioridades ciertos asuntos. No es un plan costoso, es más de actitud", afirma el director de Fedea.

POTENCIAR LOS SERVICIOS EMPRESARIALES

Uno de los sectores con más potencial es, según el informe, el de los servicios empresariales (ingenierías, tecnologías de la información, Internet etc.), a pesar de las grandes diferencias que existen entre España y Europa o América respecto a este tipo de actividades. "Mientras que en Europa estos servicios han supuesto más del 15% del empleo creado entre 1995 y 2005, en España su aportación ha sido inferior al 5%. Si logramos acercarnos a los niveles de productividad y empleo de países mas se pueden crear hasta 2,5 millones de empleos sostenibles", destaca el texto.

Además de estos dos sectores con perspectivas de crecimiento, el documento hace también referencia al de las infraestructuras y la construcción. Sobre el primero aclara que aunque España ocupa una de las primeras posiciones en el mundo, necesita un mayor empuje para optimizar sus resultados. Y en cuanto al ladrillo, afirma que dicho mercado debería reestructurarse mediante la aceleración del reconocimiento de pérdidas y la recapitalización del sector financiero.

LAS CLAVES

Para conseguir los objetivos y darle una vuelta al tejido empresarial nacional, Fedea y McKinsey&Company establecen varios puntos clave a seguir para "estructurar un cambio radical de políticas y potenciar el crecimiento sostenible".

La reforma laboral abordada hace unos meses por el Gobierno parece no ser suficiente para los expertos. Desde su punto de vista, ésta debería hacer más hincapié en eliminar la dualidad y "descentralizar sustancialmente la negociación colectiva". "Esto facilitará la inversión en actividades de mayor valor añadido y la creación de empleo de calidad permitirá que los salarios y condiciones laborales se ajusten a la realidad económica de cada empresa".

Por otra parte, exponen que se debería fomentar, además de la innovación en sectores con crecimiento potencial, la creación de empresas con mayor tamaño al actual. "El retraso respecto a Europa se debe a nuestro tipo de actividad. En el sector de la construcción hay grandes empresas, pero la mayoría son pymes que permiten vivir bien a sus propietarios", explica Vázquez. "Nuestro desarrollo ha sido más tardío, es un problema de madurez", añade.

Por último, el informe recoge otras propuestas como una simplificación "radical" de la regulación para simplificar la actividad empresarial; garantizar el acceso a un adecuado capital humano incrementando la formación y reformando las políticas activas y apoyar a las empresas en su búsqueda hacia nuevos mercados como el asiático. "Visión, liderazgo y rigor. España está en una situación crítica pero el crecimiento es posible".