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VALENCIA (EFE/VP). Las prisiones de la Comunitat Valenciana tienen un 63 % más de internos de los que deberían tener para cumplir con la normativa legal, un porcentaje que aumenta hasta el 73 % en el establecimiento penitenciario de Picassent (Valencia), lo que le convierte en uno de los más sobreocupados de España.

Así se refleja en un informe de la Oficina en Valencia de la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip) sobre la población reclusa en la Comunitat Valenciana, con datos a 1 de junio de 2015.

Según el documento, las siete prisiones valencianas siguen por encima de su capacidad para cumplir la normativa legal de un interno por celda, con un total de 7.119 reclusos, de los que 6.506 son hombres y 613 mujeres, frente a las 4.245 celdas, lo que supone una tasa de masificación del 163,60 %.

En el último año se ha incrementado un 20% el número de internas en la cárcel de Picassent, donde el porcentaje de presas reincidentes es un 10% superior a la media nacional y el más elevado de todos aquellos que albergan a internas.

Respecto a la edad, continúa el rejuvenecimiento de la población reclusa (solo interrumpido de forma puntual el año pasado) que se viene produciendo en los últimos años, al incrementarse de forma importante en el último año el número de internos en los grupos de edad 18-20 y 21-25 años.

Ello contrasta con el envejecimiento de las plantillas de funcionarios de prisiones que, según Acaip, se ve agravado con la falta de nuevos ingresos por la ausencia de Ofertas de Empleo Público. "Si se mantiene esa tendencia será preocupante, ya que cada vez habrá funcionarios más viejos que tendrán que controlar a internos más jóvenes", han advertido.

Según el informe, es muy elevado el número de internos sin clasificar en ninguno de los grados de tratamiento en el centro de Picassent que impide su traslado a otro centro para cumplir condena, lo que se ha convertido en una de las causas por las que este centro no ha visto reducido el número de internos.

Las prisiones de la Comunitat Valenciana acogen a más del 43 % de las internas clasificadas en Primer Grado (las más peligrosas del sistema penitenciario) y en concreto, en la de Picassent está el 64 % de las internas de este colectivo de la Comunitat, lo que supone casi el 28 % de todas las del conjunto del Estado.

Además, según Acaip, las condiciones de seguridad en los módulos de este establecimiento penitenciario donde están ubicados estas internas no son las más adecuadas si se comparan con los centros de construcción más moderna.

El 2,29 % de los condenados (134 internos) lo está en primer grado de tratamiento, el que se aplica a los más peligrosos, conflictivos e inadaptados, mientras que los del tercer grado son 818 y representan el 13,96 % y en teoría solo acuden al centro por la noche a dormir.

Sin embargo, Acaip ha asegurado que debido a la crisis económica y a la imposibilidad de encontrar empleo en el exterior, cada vez son más los reclusos que permanecen en el centro durante el día, a pesar de que las instalaciones no están preparadas para ello.