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MADRID. Las obras del Ágora nunca estuvieron acabados y el estudio del arquitecto Santiago Calatrava ya advirtió de la provisionalidad del edificio y la necesidad de llevar a cabo distintos trabajos que nunca se ejecutaron. Además, ha precisado que entre las labores que se le encomendaron no se encontraban ni la Dirección de Ejecución de la Obra ni del Control de Calidad de las obras, en contra de la versión de la Generalitat.
Desde el estudio de Calatrava aseguran en una nota de prensa que en febrero de 2013 (y a petición de CACSA) se entregó un Certificado Final Parcial de Obra para el Ágora. En él se incluía una relación de los principales trabajos pendientes para la finalización del edificio.
Entre estos trabajos ya se apuntaba, por ejemplo, los remates de cubierta que garanticen la estanqueidad del edificio, la finalización de los acabados de algunas zonas de la fachada o la impermeabilización y acabado definitivo de los estanques, entre otros.
Según la versión del arquitecto, nunca certificó que las obras estuvieran finalizadas. Es más, añade, "muy al contrario" de la versión de la Generalitat, a lo largo de estos años el de Burjassot insistió en sus comunicaciones con CACSA en la provisionalidad del edificio y en la necesidad de llevar a cabo distintos trabajos que estaban pendientes de ejecución.
Además, desde el estudio del arquitecto precisan que ellos solo tienen bajo su responsabilidad las funciones de Proyectista y Dirección de Obra. "Lo cual quiere decir", apuntan, "que diseña lo que se va a construir y posteriormente, durante la ejecución, asiste al proyecto para interpretar dicho diseño y aclarar detalles de manera que se respete lo que se ha diseñado. No se encuentran, por el contrario, entre sus cometidos ni la Dirección de Ejecución de la Obra ni del Control de Calidad de la misma."
UN EDIFICIO EN CONSTRUCCIÓN
El Ágora es un edificio cuya construcción no se ha finalizado conforme a lo establecido en el proyecto. Ya en el año 2009 y en contra de la recomendación del arquitecto, CACSA solicitó detener las obras para que el edificio pudiera usarse para la celebración del Open 500 de Valencia de Tenis.
En 2013, añaden, debido a cuestiones financieras, CACSA decidió detener temporalmente el curso de las obras y solicitó al Estudio de Arquitectura de Santiago Calatrava que aceptara una fase provisional de las obras para que CACSA pudiera usar el edificio temporalmente.
"Esta provisionalidad, que se ha prolongado durante años", apuntan "ha ocasionado deterioros en la obra, tal y como pudieron constatar miembros del equipo de Santiago Calatrava en una visita al Ágora a principios de julio, con el objetivo de comprobar el estado del edificio".
Fue en dicha visita, añade, cuando tuvieron conocimiento de que se habían producido goteras en el interior del edificio, entre otras incidencias. Por ello, el arquitecto sugirió a CACSA que se realizase un completo estudio del estado actual del edificio, desarrollado por especialistas en fachadas y revestimiento, para determinar el alcance de los trabajos necesarios para que el edificio tenga una impermeabilización permanente.
TOTAL COLABORACIÓN
Durante estos años, aseguran desde el estudio, "Santiago Calatrava ha mostrado siempre su disposición a colaborar con CACSA para avanzar en el proyecto. En todas las ocasiones que CACSA ha contactado con el arquitecto, siempre ha respondido a las demandas que se encontraban dentro de sus funciones y competencias como proyectista".
Por ejemplo, añaden, además de ejercer la Dirección de la Obra del actual proceso de reparación de la fachada, CACSA ha solicitado recientemente al Estudio de Arquitectura de Santiago Calatrava una relación de los trabajos más urgentes para consolidar la obra del Ágora, que ya ha sido respondida.
Que el Agora era una instalación inacabada, era oficial, público y notorio. ¿Donde está la sorpresa y la noticia?. El actual Consell va a tener que elegir nuevos métodos de trabajo para afrontar el reto de la Ciudad de las Artes y las Ciencias que no sea el de la "Improvisación" como hizo el Sr.Zaplana, construyendo la oferta de ocio del complejo a base de ocurrencias o haciendo la actual reforma a base de "bricolaje casero", como ha hecho el Sr. Fabra.
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