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El autor reflexiona sobre las consecuencias que podría tener, para ambas formaciones, acudir de la mano a las próximas elecciones generales
VALENCIA. Hace poco más de un año, las Elecciones Europeas cambiaron drásticamente el ritmo y las reglas de la política española. Hasta ese momento, el bipartidismo vivía plácidamente una erosión electoral muy importante, pero sin alternativas: ni UPyD ni IU lograban superar la barrera del 10% de los votos, con lo que quedaba evidenciado que, una vez más, la política en España seguía siendo cosa de dos: PP y PSOE. Como siempre.
Entonces apareció Podemos, con un 8% de los votos en las Elecciones Europeas, y las cosas comenzaron a cambiar muy rápidamente. La entrada de Podemos fue un auténtico shock en la política española. Y ello a pesar de que llevábamos años observando con perplejidad la aparente incapacidad de la sociedad española para generar alternativas políticas exitosas que pudieran introducirse en el sistema de partidos. Además, no fue lo único que cambió en esas elecciones. PP y PSOE obtuvieron conjuntamente el 49% de los votos, la primera ocasión en que el sistema bipartidista, normalmente muy sólido en España, bajaba del 50% de los sufragios.
Al día siguiente de las elecciones, el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, presentaba su dimisión, como consecuencia de los pésimos resultados de su partido, los peores de su historia (un 23% de los votos). Una semana después, el rey Juan Carlos I, cuya popularidad se había visto extraordinariamente erosionada en los últimos años, anunciaba su abdicación en su hijo Felipe. Y a lo largo de los meses sucesivos las encuestas otorgaron a Podemos resultados cada vez mejores, hasta llegar a una situación de triple empate con los dos partidos tradicionales del bipartidismo español, PP y PSOE.
Sin embargo, eso ocurrió hace un año. Muchas cosas han sucedido desde entonces, y no todas han sido positivas para Podemos. Entonces todo el mundo hablaba de este partido, que parecía inmune a las críticas; sus rivales no sabían por dónde atacar. Ahora Podemos sigue en el centro del escenario político, pero no tanto (Ciudadanos le está haciendo la competencia con eficacia, en el campo mediático sobre todo); y las críticas comienzan a hacer mella. Algunas actitudes de la cúpula de Podemos son difícilmente conciliables con su proclamada voluntad de cambio democrático protagonizada por "la gente", los votantes.
Y, en fin, sus resultados electorales, aunque muy buenos, no han alcanzado guarismos verdaderamente preocupantes para PP y PSOE, a los que no han logrado superar en ninguna comunidad autónoma. Un cansancio que puede detectarse en las últimas encuestas:
El objetivo de Podemos de cara a estas Elecciones Generales es intentar revertir esta tendencia de decaimiento, con el punto de mira puesto en superar al PSOE. Para ello, necesita tejer pactos con otras formaciones, con algunas de las cuales tenía ya un entendimiento previo. Es el caso de Compromís. De hecho, puede considerarse que la coalición Podemos-Compromís es producto de un pacto previo, surgido a partir de las elecciones autonómicas de mayo, en virtud del cual Podemos apoyaría a Mónica Oltra como presidenta de la Generalitat a cambio de que Compromís acompañase a Podemos en coalición electoral para las Generales. Podemos cumplió el pacto (aunque sin éxito), y ahora sería el turno de Compromís.
Está muy claro que a Podemos le interesan los votos de Compromís, y más si la coalición deja claro en el orden de los partidos que es Podemos el predominante ("Podemos-Compromís", y no "Compromís-Podemos"). Ahora bien, ¿le interesa a Compromís un pacto de estas características? Sin duda, un pacto con Podemos supone para Compromís problemas muy diversos. De cohesión y de identidad, para empezar. Por otra parte, a la luz de las recientes elecciones, en las que Compromís sacó 19 diputados por 13 de Podemos, no parece razonable que Compromís deba ser quien ocupe una posición subalterna en una coalición con Podemos.
Por otro lado, no es ni mucho menos seguro que la suma de Podemos y Compromís resulte una suma virtuosa. A menudo, en política, 2+2 no es igual a 4. Es oportuno recordar la experiencia, precisamente, del primer Compromís, la coalición de 2007 entre el Bloc y Esquerra Unida, que se presentó a las elecciones con el objetivo de que el casi 5% de votos del Bloc no se desperdiciasen (recuérdese que si en 2003 el Bloc hubiera entrado en las Corts, Camps no habría sido investido president de la Generalitat). Pero luego los resultados no acompañaron. Compromís sacó un 8% de los votos, siete escaños. Muy poco más de lo obtenido por Esquerra Unida en solitario en las anteriores elecciones de 2003 (6,45%, seis escaños).
Parece, en fin, que el pacto de Compromís con Podemos supone más problemas que ventajas, sobre todo para una formación como Compromís que es, en sí, una coalición de partidos acostumbrada a hacer complejos equilibrismos internos para asegurar la pluralidad, y que además presenta como una de sus principales virtudes su vinculación con el pueblo valenciano. No parece sencillo conciliar todo esto con el modelo "ordeno y mando desde Madrid" que parece enarbolar Iglesias en Podemos.
Sin embargo, que los inconvenientes sean mayores que las ventajas no significa que no haya ningún elemento positivo en la coalición con Podemos. El que se arguye más a menudo es que con esta coalición Compromís tendría mucho más fácil conseguir grupo parlamentario propio en el Congreso, para lo que se necesitan al menos cinco diputados y un 15% de los votos. Y una segunda ventaja, relacionada con la anterior, es que tal vez Compromís experimente en las Elecciones Generales un descenso significativo respecto del 24 de mayo.
En las elecciones autonómicas Compromís obtuvo un magnífico resultado, en parte por el tirón de Mónica Oltra y en parte por tratarse de los comicios históricamente más favorables para los partidos de ámbito regional. No olvidemos que hace un año, precisamente en las Elecciones Europeas, Compromís sólo obtuvo un 8% de los votos en la Comunidad Valenciana. Es indudable que ahora, en las Generales, sacaría más de un 8%... pero menos del 18% de las Autonómicas.
#prayfor... Isabel San Sebastián
Uno de los acontecimientos más desagradables de esta semana ha sido, sin duda, la desaparición de tres periodistas españoles en Siria, que tal vez hayan sido secuestrados. Y no sólo por el hecho en sí, sino porque el diario ABC, en una nueva muestra (una más) de responsabilidad social y compromiso con el rigor periodístico, decidió desvelar la identidad de los periodistas, a pesar de que tanto el gobierno español como los familiares les pidieron que no lo hicieran. 
Poco después, la periodista Isabel San Sebastián, colaboradora de este periódico, remató la faena: la culpa de la desaparición de los periodistas era de los periodistas mismos, por irse frívolamente a Siria, a informar en condiciones precarias sobre un conflicto particularmente terrible. Según San Sebastián, los periodistas van a estos escenarios de conflicto tranquilamente, porque saben que, en caso de que fueran capturados, el Estado pagaría su rescate. Y así cualquiera, indicaba la sufrida periodista española desde su tertulia.
Podemos es un partit centralista, que no vol saber res del valencia, ni de catalunya. Ja han dit que son contraris a junts pel si. No mes vol aprofitarse del tiro, de compromis. Si hi ha un acord, compromis podemos sera la mort de compromis. Jo votare ERC PV.
Em sembla lamentable que Compromís pacte amb el Coletas i companyia, Podemos al País Valencià no existeix, está teledirigit des de Madrid
¿Tan difícil es de ver que una cosa es la táctica y otra meterse en cama juntos? Compromis + Podemos _ y si invitaran a EU-PV ya sería lo máximo- tienen posibilidades de sacar más escaños que por separado. Incluso si , por no saber vender bien el tema, se les fueran tantos puros de boquilla como aparecen en los comentarios. Necesitamos un banderin de enganche donde se puedan refugiar los que no quieran este PsoE y los que dudan de si su voto va a algún sitio si votan a EU. Solo hay que llegar a un acuerdo que respete los porcentajes autonómicos/municipales y tirar los dados, que luego ya se repartirá lo que toque. El juego de un partido nacionalista es intentar evitar que los mayoritarios puedan imperar en el Paralamento español, en el valenciano se juega a otras cosas, todo lo demás son juegos de salón cuasi religiosos. A veces me hacéis envidiar la PP, la casa común del fachoso y del liberal, del meapilas y del neocón, todos conscientes de su fuerza y todos conscientes de que primero está mantener a los progres alejados del BOE y luego ya hablaremos de lo que cedemos cada uno. Ahora se trata de alejar al PP del BOE y de la consolidación absoluta de su poder judicial, si no enteis eso , a algunos os falta más que un hervor.
Pense que serà un desastre per a Compromís. No m'acabe de creure que el que veuen molts votants (el centralisme de Podemos) no ho veguen els militants de Compromís. Es Podemos qui necessita a Compromís, no al revés. Es Podemos qui va a la baixa. Compromís deu de decidir si vol acompanyar-los en eixe viatge. I que no s'enganye ningú i que vegen la formació i evolució del PSUV veneçolà: allò que anaren a estudiar Iglesias, Errejón y Monedero, "a vore com ho havien fet". ¿Vol Compromís veu pròpia a Madrid?
Todo lo que saque Podemos-Compromis, se lo quedará Podemos y todo lo que saque Compromis, será para Compromis. ¿Quien garantiza que Podemos le va a dar su sitio a Compromis?. Podemos solo tiene un objetivo claro, engordar a costa de los demás en las proximas generales. No soy simpatizante de Podemos y vivo en Valencia. Proponed el nombre de Compromis-Podemos y esperad la respuesta de Madrid.
La meua més enhorabona per l'ús que fan del valencià. Fa goig llegir a gent de la teua terra en la teua llengua... Sembla mentida. Després de dècades d'ensenyament en i del valencià i ací no es diu ni "Bon dia!" Petètic. Pep, amb oerdó per ser un ALDEANO made in Pusetilàndia.
Disclaimer: yo simpatizo con Podemos, soy del País Valencià y vivo en Madrid. En mi opinión hay que confluir, entiendo que Compromís esté pletórico con el resultado tan bueno de las autonómicas, pero en las últimas en clave nacional, las europeas, un nuevo y para muchos aún desconocido Podemos les pasó. En las generales se vota en clave nacional, e históricamente se tiende al voto útil hasta ahora bipartidista y que ahora puede ser tripartidista o cuatripartidista. Pensar que Compromís va a mantener ese resultado sin Mónica ni Ribó de candidatos es ser muy optimistas.Podemos apoyó la postura de fuerza en la Generalitat de Mónica, y ha renunciado a entrar en el Govern, dando así más protagonismo a Compromís. Debería haber un quid pro quo. Juntos se aspiraría a ganar….con el simbolismo que eso supone, y tener entre 10-13 diputados y 4-9 senadores. Hay que recordar como fueron las primarias de Compromís y que el intento de forzar un sistema que hiciese repetir a Morera hizo que se publicase que Mónica podía irse a Podem. El hecho de que Compromís ganase a las encuestas se debió a que mucho voto decidido bien al PSPV, bien a Podemos a última hora se decantó por Compromís para agradecer que Mónica fuese la verdadera voz de la oposición. El bloc aunque sea el partido grande de Compromís orgánicamente debería tener presente que su arrastre de votos es escaso, aparte de los bandazos en lo social (llegaron a ser centro-derecha). Si por mi fuese, acuerdo con 1/3 Podemos, 1/3 Compromís y 1/3 personalidades independientes que tuviesen tirón.
Pues yo creo que si lo venden bien pueden ser primera fuerza en la Comunidad Valenciana para las generales. Compromís obtendría su ansiado grupo propio y Podemos captaría un buen puñado de escaños.
El problema con el que se va ha encontrar Compromís si decide ir por su cuenta y riesgo, es que no puede realizar un movimiento a lo "ciutadans", y por tanto, no va a conseguir la cuota de votos necesaria para lograr el grupo parlamentario propio. Dentro de esta coalición, el partido de Oltra si estaría en condiciones de dar un paso de acercamiento a una posición más centralista (valencianismo dentro del marco estatal). El Bloc por contra, dado su posicionamiento más cercano al nacionalismo catalán, no solo estaría traicionando su propia ideosincracia, sino que además se vería subyugado más si cabe al personalismo de Oltra (cosa que les duele a rabiar). Saludos.
Podemos solo busca pactos electorales donde se encuentra con un competidor potente (en Cataluña, Galicia o País Valenciano). Donde no lo hay, su talante es de desprecio ("pitufos gruñones", "cenizos",...). Su vocación es hegemonizar y dirigir el "cambio". Su política se parecería a lo que hacen los grandes periódicos de Madrid: hacer ediciones locales donde el grueso del periódico acababa siendo el mismo de Madrid, con algunas páginas regionales. En su discurso hablan de "patriotismo", lo que, dicho desde Madrid ya sabemos lo que significa. Por otra parte, el componente nacionalista estricto de Compromís es muy fuerte. Aunque Oltra es muy merecidamente la "foto" de Compromís, su estructura y base social está más decantada hacia la corriente "Bloc". ¿Cuántos votantes del Bloc estarían dispuestos a dar su voto a Podemos? ¿Cuántos votantes verían en la marca "Podemos-Compromís" un componente valenciano?
Hay que ser ingenups para pensar que Podemos le va a dar cancha a Compromis en Madrid. Solo hay que ver como está actuando Pablo Iglesias con sus propios aifiliados. Nosotros, yo. los que venimos a salvar al pueblo, no venden otra cosa. Además Podemos está a la baja. Pablo Iglesias se ha deslegitimado en la eleccion de la lista para el congreso, un fracaso total. Compromis si gestiona bien tiene mucho futuro y si se une con Podemos, desaparecerá a medio plazo. Al menos es como yo lo veo.
De verdad los de Compromis se dejaran llevar por los cantos de sirena que emite Pablo Iglesias? En Valencia no existe Podemos, existe un grupo de amiguetes del CEPS que viven del voto mediatico y que a remolque de los indignados votatantes -muchos de ellos poco informados- han sacado 13 diputados .Podemos-ceps es una burbuja sin consistencia en Valencia.
Los militantes de Compromís hasta donde yo llego no estamos por la labor de dicho pacto. Somos Compromís y no nos vemos representados por Podemos para nada.
Soy simpatizante y votante de COMPROMÍS. Lo he sido del Bloc,.... Ante una alianza de este tipo con PODEMOS, me replantearía el voto. COMPROMÍS debe ser fiel a su ideario. Por favor, no más viajes con AVE a Madrid, a fin de que nos den instrucciones.
Al final, el reparto de escaños del sistema electoral, beneficia mas a las uniones que al voto dispersado. Una coalición podemos - compromís, sería beneficiosa desde ese punto de vista, mucho mas, si consiguieran sumar a eu.
Idea horrible que muchso votantes de Compromis NO compartimos. Si esto acaba siendo cierto, veo una sangria de votos para Compromis en 2019
Yo sinceramente no lo veo, ni lo veo ni me gustaría...Compromis en el Pais Valencia necesita de Podemos lo justo, creo que Podemos necesita más a Compromis. No me gusta la idea, pero solo es mi opinión.
Táctica, o estrategia; prisas, o gradualismo; Madrid, o Valencia. En resumen, esa es la cuestión. Y si Podemos sigue a la baja, el objetivo de grupo parlamentario para Compromís serå dificil de conseguir, salvo que les cedan los primeros puestos en las listas, algo improbable.
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