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MADRID (EP). Seis de cada diez conductores españoles reconocen haberse quedado dormidos mientras conducían, lo que se conoce como 'microsueños', según ha revelado un estudio por la Fundación CEA a 743 conductores entre los meses de marzo y mayo de este año.

De acuerdo con los datos del informe, los conductores que presentan el mayor riesgo de accidentes por sueño son fundamentalmente jóvenes entre 18 y 29 años, trabajadores a turnos, conductores que lo hacen bajo efectos de alcohol y/o drogas y aquellos que presentan enfermedades relacionadas con el sueño, quienes cierran los ojos por dos a tres segundos, pierden la consciencia respecto a la carretera y causan accidentes.

En este sentido, la directora de comunicación de la Fundación CEA, Nuria Alonso, ha señalado que el 24% de los accidentes mortales en autopista en Europa son producidas por accidentes vinculados a quedarse dormido frente al volante.

Por su parte, el director general de la fundación, Fernando González Iturbe, ha advertido de que producir un accidente tras quedarse dormido al conducir es considerado por el Código Penal como un "delito de imprudencia grave".

"El conductor siempre debe tener un control absoluto del vehículo. Y la ley castiga quedarse dormido porque considera que antes de dormirse, el que conduce tiene la sensación de que se está quedando dormido y está obligado a detenerse para descansar", ha añadido.

Además, ha añadido que la penas por este delito son de prisión por hasta cinco años y suspensión de la licencia de conducir por hasta nueve años.

Ante ello, CEA ha exigido que se desarrollen más campañas institucionales y que también se regule la implementación en los coches de la tecnología ya disponible que detecta síntomas de cansancio en los conductores y los obliga a detenerse.

Asimismo, han solicitado que los médicos de atención primaria, especialistas y farmacéuticos informen a los pacientes de las contraindicaciones de los medicamentos, ya que, de acuerdo con la encuesta, casi un 23% de los conductores han asegurado no recibir instrucciones o leer el prospecto de los posibles efectos al conducir que producen los medicamentos prescritos por sus médicos.

SOLO EL 16% PARA A DORMIR SI SIENTE CANSANCIO

El informe también ha señalado que apenas el 16% de los conductores se detienen a dormir al sentirse cansados. El 69%, en cambio, para en un área de descanso y toma un café, agua o algún tipo de refresco. Un 4% prefiere no detenerse para llegar lo "más rápido posible" a su destino.

En este sentido, el 71% de los encuestados ha afirmado sentir somnolencia al volante, mientras que un 41% ha indicado sufrir de pérdida de concentración, un 32% de parpadeo constante de ojos, y un 26% de dolores de espalda o calambres.

El estudio argumenta que la madrugada (entre las 3 y las 5) y las primeras horas de la tarde (entre las 2 y las 4) son los momentos en los que el sueño aparece con más facilidad. "Independientemente de cuanto se haya dormido, durante estas horas siempre se tiene un poco más de sueño. Por ello es necesario tratar de evitar conducir durante estos periodos o, al menos, extremar la precaución", indica.

Finalmente, explica que los entornos viales monótonos favorecen la somnolencia y los entornos ricos en estimulación ambiental ayudan a mantenerse despierto. "Encender la radio o mantener una conversación con el acompañante puede ser de gran ayuda en ciertas ocasiones", añade.