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VALENCIA. Lladró está en venta. La afamada compañía de porcelanas fundada por Juan, José y Vicente Lladró en 1953 atraviesa una prolongada crisis que hace una década provocó un cisma familiar y que en 2015 puede terminar en la venta de todo o parte del paquete accionarial del 70% que ostentan Juan Lladró y sus cuatro hijas. El grupo está dirigido en la actualidad por Rosa Lladró Sala (presidenta) e Ignacio Jara -esposo de Mari Luz Lladró- y como miembro del consejo de administración figura una tercera hija del patriarca de los Lladró, Ángeles.
Fuentes del entorno familiar de Juan Lladró han confirmado a Valenciaplaza.com que los gestores encargaron hace meses a una consultora la búsqueda de un inversor que resolviese los graves problemas que atraviesa el grupo, cuya producción se ha reducido al mínimo ante la acumulación de existencias.
Tras tantear sin éxito a un grupo asiático, la negociación se centró en Aurelius Capital Management, una sociedad estadounidense considerada en ámbitos financieros como fondo buitre por su preferencia por sacar provecho de empresas y países con graves dificultades. Esta empresa, cuya sede está en Nueva York, fue fundada por Mark Brodsky y Adam Stanislavky y de ella se conoce poco más que sus operaciones con empresas o países en crisis -se atrevió con Argentina, Irlanda y Grecia-, generalmente mediante la compra de deuda o toma de control de empresas para luego negociar o litigar con deudores y acreedores. Su página web, estática, sólo muestra un pedazo de un retratro en bronce del emperador romano Marco Aurelio y los datos de contacto de la oficina neoyorquina.
Valenciaplaza.com se puso en contacto con la sede de Aurelius Capital, cuyo portavoz explicó que no podía facilitar ninguna información. Desde la compañía valenciana, Rosa Lladró negó que hubiera cualquier tipo de negociación para vender la empresa, así como que se haya contactado con este fondo americano. No obstante, las fuentes conocedoras de las conversaciones se reafirman en que están avanzadas, aunque aclaran que el fondo americano no ha aprobado la operación, de momento.
Este periódico ha intentado durante varios días obtener la versión de Ignacio Jara, cuya relación con su cuñada no es la ideal para la gestión conjunta de la empresa, pero no ha obtenido respuesta a las llamadas.
PARTE DE LA FAMILIA NO QUIERE VENDER
La entrada de un inversor como Aurelius Capital no está clara, auque el fondo aprobara la operación, ya que el resto de accionistas tiene derecho de tanteo. El capital de Sodigei, matriz del grupo Lladró, está repartido entre los tres hermanos fundadores de la empresa de porcelana decorativa: Juan, que tiene el 70%; José, con el 15%, y Vicente, con el 15% restante. Este reparto, junto al resto de bienes de la familia, se realizó en 2007 tras años de enfrentamiento entre los tres hermanos fundadores que derivó en el bloqueo de la compañía. Según publicó José en un libro, la decisión de quién se quedaba con el 70% del negocio de la porcelana se tomó mediante subasta.
Valenciaplaza.com ha consultado con miembros de las otras ramas familiares, que desconocen las intenciones de los accionistas de control de Lladró, aunque sospechan que va a haber novedades importantes. Sobe la posibilidad de venta de un paquete acccionarial, aseguran que en los estatutos de la empresa está contemplado el derecho de tanteo, que alguno de ellos está dispuesto a estudiar en función del precio acordado.
De momento, las familias de José y Vicente han solicitado la presencia de un notario en la junta general ordinaria y extraordinaria de accionistas que Sodigei ha convocado para el próximo 25 de junio. En ella, la matriz de Lladró dará cuenta a los socios de aspectos como "información de transacciones sobre activos" -su principal activo es la participación en Lladró-, "información sobre el plan de viabilidad de la compañía" o "información sobre la continuidad en la gestión de la compañía".
Además, informará a los accionistas "acerca de la colección pictórica del grupo, situación actual y plan de futuro". La colección pictórica, integrada en el Museo Lladró, fue desmontada y trasladada a un almacén de Madrid hace dos meses, ya que no entraría la operación de venta.
LOS LLADRÓ SE REPARTIERON 25 MILLONES DE DIVIDENDO EN 2013
Las dificultades que atraviesa la compañía no evitaron que en 2013 los Lladró se repartieran 25 millones de dividendos en 2013, procedentes de la venta de inmuebles de Lladró, en especial, de la sede de su tienda en Beverly Hills (Los Ángeles, EEUU), que reubicó en un establecimiento en alquiler por la misma zona. Lladró repartió 26 millones, que fueron a parar íntegramente a Sodigei, socieda que a su vez repartió 25 millones entre sus accionistas.
Sodigei terminó 2013 en beneficios -0,3 millones frente a los 4,26 millones del año anterior-, pero su fondo de maniobra -capacidad de pago a corto plazo- era negativo en 28,57 millones debido a las deudas con empresas del grupo asociadas a los créditos fiscales que tiene la empresa, que ascienden a 70 millones.
Según la mismas fuentes, el mayor problema para los Lladró no son los, como mínimo, 20 millones de euros que necesita para reestructurar la compañía desde el punto de vista industrial y relanzarla -problemas de deuda con los bancos no tiene-, sino el ajuste de plantilla que es necesario y que la familia no quiere acometer.
La empresa ha ido reduciendo la carga de trabajo para no acumular más stock, ha cerrado edificios y ha concentrado la escasa producción en una parte del complejo Ciudad de la Porcelana, que ocupa una superficie de 100.000 metros cuadrados. De los problemas de stock da idea la medida adoptada en mayo por la dirección, que propuso a la plantilla cobrar en especie -figuras de porcelana- un bono que tradicionalmente se cobraba en metálico.
Es una lastima yo trabaje 36 años en lladro y los que verdaderamente han sacado durante muchos años la empresa adelante hemos sido los trabajadores,porque en todas las empresas hay gente que vive muy bien ganan muy buenos sueldos pero no davan palo al agua
Lamentablemente una empresa que fue un modelo de innovación, de internacionalización y de creatividad se encuentra en esta situación no sólo por la crisis del mercado y el cambio en los gustos de los clientes, sino fundamentalmente por la incompetencia, la codicia y el egocentrismo de quienes han estado al frente. Ojalá LLadró siga adelante y no se pierda su saber hacer único en el mundo.
Que no se cierre, por favor. Ya se ha hecho bastante daño. Hemos de proveer al país de empleos. A ver que imágen vamos a dar en Europa. Grácias.
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