L. MASERES. 17/11/2010 El presidente del Grupo Aramón, participado al 50% por el Gobierno de Aragón y por Ibercaja, culminará el año que viene una ampliación de 24 millones de euros en las estaciones del Sistema Ibérico Turolense (Cerler, Panticosa y Formigal, en el Pirineo aragonés, y Javalambre y Valdelinares)

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VALENCIA (LIDIA MASERES). El Grupo Aramón, participado al 50% por el Gobierno de Aragón y por Ibercaja, funciona. La empresa mixta es posible, afirma el presidente de la entidad. El próximo año culmina el plan de negocios más ambicioso de la sociedad, una inversión de 24 millones de euros que comenzó en 2009 y que multiplicará por dos la superficie esquiable y los servicios de ocio de las cinco estaciones que gestiona en el Sistema Ibérico Turolense (Cerler, Panticosa y Formigal, en el Pirineo aragonés, y Javalambre y Valdelinares).

Desde 2004, momento en que se puso en marcha la sociedad, los socios han invertido 160 millones de euros para la ampliación, modernización y mejora de las instalaciones Desde la fecha, Aramón ha duplicado su cuota de mercado pasando del 12% hace seis años al actual 23% y las estaciones de esquí también han aumentado su volumen de usuarios en un 97% hasta alcanzar 1.300.000 esquiadores la pasada temporada. Valenciaplaza.com habló ayer con Francisco Bono, presidente del grupo.

-¿Cuál es la estrategia de crecimiento del Grupo Aramón?
-Como grupo, este año estamos consolidando lo que se ha hecho en los últimos cinco o seis años. Ha supuesto una inversión fuerte de 160 millones de euros, tanto en hierros como en convertir las estaciones de esquí en destinos de ocio. Se han mejorado mucho los servicios complementarios.

Este año la inversión total ha sido 8 millones de euros. El caso de Teruel es el más excepcional porque estamos inmersos en un plan de ampliación de tres años, este es el segundo. En 2009 proyectamos la ampliación de Javalamabre y este año la de la estación de Valdelinares con 24 millones de euros y la misma filosofía: que el esquiador esté a gusto y tenga mas actividades que hacer. No se trata sólo de ampliar las pistas, es otra concepción de la estación.

-¿Cómo revierte esta inversión en las zonas próximas a su negocio?
-De una manera muy importante. El 80% de lo que se gasta un esquiador va a parar al territorio y a los servicios que ofrece y un 20% para la estación de esquí. El efecto multiplicante que tiene una estación es impresionante. De hecho, en Aramón tenemos dos objetivos: combinar sostenibilidad económica de la propia sociedad para garantizar futuras inversiones y en segundo lugar, el desarrollo del territorio donde estemos asentados. El impacto es importantísimo.

-El grupo está participado en un 50% por el Gobierno de Aragón. Tal y como están las arcas públicas ¿Han tenido algún tipo de problema de endeudamiento? ¿Funciona el modelo de empresa mixta?
-No hemos tenido problemas porque la inversión fuerte la hicimos en los últimos cuatro años, afortunadamente. Las cosas como son, ahora sería mucho más complicado. Las inversiones se hicieron en la época de prosperidad y los ocho millones de euros entraban en los planes presupuestarios del Gobierno.

Funciona muy bien, es posible este modelo por dos razones. Una, por la buena sincronización de intereses de los dos socios (caja de ahorros y Gobierno), y dos, porque hemos profesionalizado totalmente la gestión de la empresa. Si se cumple esto, funciona. La única diferencia con una empresa 100% privada es que esta beneficia al territorio. Lo que es gestión, está funcionando bien.

-¿Qué tipo de controles o auditorias tiene por estar participados por el Gobierno?
-Tenemos el control de auditorias externas que tiene cualquier S.A. y el control de los órganos del Gobierno, llámese la corporación de empresas públicas o la intervención general de la comunidad autónoma. El control es exhaustivo.

-¿Reciben subvenciones por parte de la Administración pública?
-Subvenciones no, solo funcionamos con ampliaciones de capital que van en el capítulo correspondiente de las cuentas publicas.

-En octubre anunciaron que van a crear su propia cadena hotelera. ¿Para cuándo? ¿Tienen previsto algún hotel en la Comunitat Valenciana?
-Esto es un proyecto a largo plazo y construiremos hoteles en la medida que falten camas en las zonas de esquí. Si alguna entidad privada acometiera hoteles, nosotros puede que desecháramos alguno. Nuestra idea no es ganar dinero, sino aumentar la oferta en la estaciones. Comenzamos este año con uno en Formigal porque ya teníamos el suelo y una estructura hecha, pero las circunstancias económicas y financieras irán marcando el resto, así como la demanda de esquiadores.

-Con la crisis como escenario, ¿Creen que esta temporada bajarán los números?
-No, y da casi reparo decirlo, pero la verdad es no nos ha afectado y tampoco nos ha sorprendido porque hicimos una previsión y lo que podía variar era la distribución del gasto, que es lo que ha pasado. Hemos tenido un aumento de esquiadores y de cuota de mercado y el consumo se ha mantenido estable sobre unos 24 euros por persona contando el forfait.

La temporada será igual que la anterior. Hemos trabajado mucho para que nuestras estaciones den una buena calidad de servicio y robamos, entre comillas, esquiadores a otras zonas. Por otra parte, el perfil del esquiador es una persona muy leal a este deporte. Cuando la gente haga una redistribución de su gasto, que lo hará, priorizará el esquí sobre otras actividades de ocio. Aun así es posible que nos podamos ver afectados. Sólo un dato, en la Comunitat hemos pasado de vender 250.000 abonos a 350.000.