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VALENCIA. Para muchos Zarra no es más que el nombre de aquel mítico jugador de fútbol. Para los que conocen el interior de la provincia de Valencia, es un municipio, aunque podría pensar por el nombre que guipuzcoano. No andarían desencaminados desde el punto de vista etimológico, pues Zarra tiene un origen vasco. Para los que siguen la actualidad política, Zarra es el famoso pueblo del cementerio nuclear, ese que tanta polvareda levantó en la anterior legislatura para acabar llevándoselo María Dolores de Cospedal a Castilla La Mancha. 

Zarra es como una isla en la que no ha pasado el tiempo desde hace 35 años. Una isla en el interior de la provincia de Valencia en medio de un mar de alcaldías 'populares'. Aquí no gobierna el PP, pero tampoco el PSOE, ni IU ni Compromís. Gobierna un alcalde independiente. El dato no tendría más importancia si no fuera porque el alcalde, Juan José Rubio, lleva al frente el municipio desde 1979.

Y desde entonces han ocurrido cosas. En 2006, Rubio fue expulsado del PSOE tras ser imputado por irregularidades urbanísticas y en 2008 eludió la prisión por delitos contra la ordenación del territorio, prevaricación, fraude y estafa tras pagar una fianza de 36.000 euros. No obstante, el primer edil volverá a presentarse -bajo las siglas AEPZ como viene haciendo desde 2007- con "tres imputados más en la lista".

Así lo señala el candidato 'popular' a la alcaldía, Enrique Martínez, que lamenta que en un momento "en el que todos los partidos intentan vender limpieza y ejemplaridad, Rubio no se plantea dar un paso atrás". "El alcalde tiene pendiente un juicio por el que el fiscal le pide 8 años de prisión y 22 de inhabilitación por fraude y falsedad documental en la venta de unos terrenos municipales a su propio hijo. Un juicio que podría salir en unos meses y dejaría a Zarra sin gobierno municipal en el caso de que Rubio volviese a ganar las elecciones y fuera condenado", comenta Martínez.

En esta línea, el candidato del PP admite enfrentarse "al difícil reto de poner fin a más de 35 años de régimen" aunque se muestra "optimista" por el proyecto "totalmente renovado" que capitanea. "Somos los únicos que presentamos un proyecto alternativo al de Rubio y que podemos sacar al pueblo de la parálisis en la que está. Zarra no sólo tiene un gran problema de corrupción, sino que el municipio está igual que hace tres décadas, sin inversiones ni de empresas ni de las administraciones".

A juicio de Martínez, el alcalde "no solo ha alimentado sus propios negocios personales a costa del ayuntamiento" sino que también "ha generado una enorme brecha social en la que medio pueblo no se habla con el otro medio. Una división de la que él se alimenta para seguir en el poder". "En Zarra esto ha llegado al extremo de tener que celebrar los plenos con presencia de dos patrullas de la Guardia Civil y con concejales saliendo del ayuntamiento escoltados. Una estampa más propia de otras zonas de España en épocas por suerte ya pasadas", relata.

Martínez destaca que uno de sus retos es recuperar "la paz social y la ilusión por un futuro mejor". "El pueblo debe mirar al futuro e ir todos juntos, por eso en mi campaña no sólo voy a pedir el voto a los simpatizantes del PP, sino también a los socialistas que quieren un cambio y no han presentado este año candidatura local y a los que en anteriores elecciones votaron a Rubio. Sólo con el apoyo de todos podremos hacer que Zarra avance", aseguró.

El candidato del PP tiene ante sí el objetivo de ganar en lo que él llama 'el pueblo más difícil de Valencia' por la situación que, a su juicio, "ha generado Rubio en estas décadas". "Vamos a por todas, y lo hacemos con esfuerzo, con ilusión y sobre todo presentando una alternativa de gobierno. La gente quiere trabajo, quiere que vengan inversiones a Zarra, que haya turismo, oportunidades de futuro para que los jóvenes no se vayan, y eso Rubio no lo ha ofrecido ni lo va a ofrecer. Vamos a dejarnos la piel por presentar un programa serio, por comprometernos con inversiones. Zarra tiene un enorme potencial por ejemplo en el turismo de naturaleza y todo esto se está desaprovechando si no hay ya un cambio en el Ayuntamiento, independientemente de lo que luego diga la Justicia", sentenció.