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VALENCIA (EP). El diputado de Compromís Fran Ferri ha desvelado este sábado un informe elaborado en 2010 por la Conselleria de Industria que cifra la sobrefacturación de las empresas concesionarias de las estaciones de Inspección Técnica de Vehículos (ITV) desde su privatización en 1998 hasta el año 2009 en 317,5 millones por encima de las previsiones del Consell en la concesión del servicio.

En este informe, conseguido por el diputado a través de peticiones de documentación en las Corts, la Conselleria recuerda que la valoración inicial que fijaba el pliego de concesión como tarifa media ponderada de las revisiones de ITV era de 18,47 euros y que finalmente el precio de las revisiones de vehículos alcanzó una media ponderada de 46,59 euros.

Asimismo, en un comunicado Ferri ha recordado que "se instauró una prueba de sonometría inexistente en el resto del Estado, convirtiéndose la autonomía valenciana en el territorio en que más caro era pasar la ITV".

MULTIMILLONARIO

"Este informe demuestra que el gobierno del PP ha sido consciente en todo momento de que la privatización de las ITV ha sido un negocio multimillonario para las empresas concesionarias, por cierto muy cercanas al poder", ha agregado el parlamentario, que ha lamentado que los valencianos han pagado las inspecciones "a un precio elevadísimo para se forraran unos cuantos empresarios amigos del PP, ya que, además, no se ha revisado el canon que deben ingresar las concesionarias a la administración por sus beneficios".

Del informe, según la coalición, se deduce que con esa sobrefacturación "estaba más que justificada la exigencia de Compromís al Consell del abaratamiento de las tarifas generales de la ITV y de las tarifas de las segundas inspecciones, un abaratamiento que no ha llegado hasta 2014 y en una cuantía que nos sitúa todavía por encima de la media del Estado, alargando todo lo que han podido el negocio millonario de estas empresas".

DOCUMENTO INTERNO

Además, se calcula en el documento interno "que con esas ganancias las empresas concesionarias podrían haber incrementado sobremanera la construcción de líneas de inspección de vehículos".

Para Ferri, "al final todas las pruebas indican que lo que hubo detrás de la privatización de las ITV fue la intención del gobierno del PP de beneficiar al máximo a las concesionarias. Estamos ante otro negocio millonario para unos pocos que los valencianos hemos pagando muy caro y que ha perjudicado gravemente la competitividad de sectores como el del transporte y en general a las familias valencianas".

"Las ITV son un ejemplo más de cómo la privatización de los servicios públicos son en realidad una estafa que perjudica gravemente a la ciudadanía para beneficiar a empresas muy concretas cercanas al poder", ha concluido.