X AVISO DE COOKIES: Este sitio web hace uso de cookies con la finalidad de recopilar datos estadísticos anónimos de uso de la web, así como la mejora del funcionamiento y personalización de la experiencia de navegación del usuario. Aceptar Más información
GRUPO PLAZA
EL EXPRESIDENTE, INVESTIGADO POR EL TSJCV

La defunción política de Camps por la Fórmula 1 'salva' a Alberto Fabra

X. AGUAR. 04/02/2015

La errática legislatura del expresidente concluye con una investigación que, paradójicamente, favorece la candidatura del actual jefe del Consell

VALENCIA. El expresidente de la Generalitat Francisco Camps será investigado por el contrato de la Fórmula 1 mientras que la compra de Valmor, ejecutada cuando Alberto Fabra se encontraba al frente del Consell, queda apartada del caso asumido por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).

La apertura de investigación anunciada por la sala certifica la defunción política de Camps en el PP. Una agonía que ha perdurado a lo largo de toda la legislatura y que concluye con un proceso judicial que, paradójicamente, deja vía libre para la discutida candidatura de Fabra a la Generalitat.

No es que el expresidente tuviera alguna opción de volver a ser cabeza de cartel, dado que a lo largo de la legislatura se ha evidenciado el desahucio que sobre él ha ejecutado su partido. La paradoja reside en que Fabra sale indemne -al menos de momento- de un caso que también le afecta en segunda instancia y cuya implicación, de haberse producido ahora, le habría complicado sobremanera sus posibilidades de ser candidato el próximo mes de mayo, una designación que Mariano Rajoy todavía no ha hecho pública.

El auto hecho público este martes por el TSJCV, que incluye crudos testimonios de altos cargos del entorno de Camps, cierra una legislatura negra para el expresidente, quien ha recorrido una travesía política en el desierto que, con este nuevo varapalo judicial, apunta a conducir a ninguna parte.

Francisco Camps, tras ser declarado no culpable en el caso de los trajes 

EL PRESIDENTE QUE GANÓ LAS ELECCIONES Y DIMITIÓ 

Tras ganar los comicios de 2011 con mayoría absoluta, Camps se vio obligado a dimitir del cargo para sentarse en el banquillo por el caso de los trajes, un juicio tortuoso y mediático del que salió no culpable pero sin la jefatura del Consell ni la presidencia del PPCV.

Las maniobras posteriores acometidas por un grupo de sus afines para obtener una restitución de Camps, si no en su antiguo cargo de presidente sí en un puesto de mayor relevancia que el de diputado raso, fueron infructuosas. Los 'pesos pesados' del partido próximos a él como Rita Barberá o Alfonso Rus rechazaron abanderar una pelea contra Alberto Fabra de cara al congreso del PPCV celebrado en mayo de 2012.

Camps rodeado de Rus, Barberá y Costa

No ayudaron al expresidente apariciones como la que había protagonizado dos meses antes en la revista Telva -en Presidencia no daban crédito-, donde tras un extenso reportaje fotográfico en l'Albufera manifestaba sentirse "más preparado que nunca para ser presidente de la Generalitat o del Gobierno". Días antes, Camps también había estado en el centro de la polémica cuando acudió a la Universidad Miguel Hernández de Elche a defender su tesis doctoral, un acto contra el que se manifestaron un centenar de personas.

El otrora todopoderoso jefe del Consell resultaba ya demasiado incómodo tanto para Génova -cabe recordar que Rajoy había permitido que fuera candidato- como para el nuevo presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, que había dejado entrever públicamente su deseo de desmarcarse de la herencia recibida, una circunstancia que molestó notablemente a los fieles a Camps.

Pese a que el nuevo presidente mantuvo algún encuentro con su predecesor en el año siguiente a llegar el cargo, la distancia se hizo cada vez más amplia. En Les Corts, apenas se han producido encuentros dignos de mención entre ambos y la oposición ha utilizado la presencia -o ausencia- de Camps en la cámara y su gestión como arma arrojadiza contra Fabra, una situación incómoda para el presidente.

Los contactos entre Fabra y Camps han sido mínimos en la legislatura

Mediada la legislatura, Camps se vio salpicado por el caso Nóos, por el que finalmente tuvo que declarar como testigo. El expresidente protagonizó un episodio curioso en los pasillos de Les Corts cuando los medios le abordaron para preguntarle sobre este asunto y el exjefe del Consell se anticipó manifestando estar "feliz" por que se cumplía el segundo aniversario de su victoria "aplastante" en las elecciones de 2011. En noviembre, el expresidente engordó el anecdotario cuando la policía judicial trató de recabar su declaración sobre este caso siendo imposible localizarle en su domicilio. Camps,  declaró en dos ocasiones posteriormente, manifestando recordar más bien poco de los acuerdos suscritos con el instituto Nóos dirigido por Iñaki Urdangarín.

Entretanto, conforme la legislatura ha ido entrando en la recta final, el presidente Fabra ha hecho cada vez más extensible -y en público- su pesar por la herencia recibida del anterior Consell. Una estrategia que ha tratado de canalizar a través de los portavoces del Consell o vía filtraciones de su entorno a los medios de comunicación, lo que ha indignado al reducido grupo de fieles dentro del partido que ha conservado Camps.

Así, la investigación abierta ahora por el TSJCV sobre Camps supone la puntilla a una legislatura errática para el expresidente. Poco arropado por su partido y repudiado por su sucesor, que al mismo tiempo respira aliviado por quedarse al margen -de momento- de un caso que podría haber dinamitado sus opciones de ser candidato a la Generalitat.  

Comparte esta noticia

comentarios

Actualmente no hay comentarios para esta noticia.

Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.

Escribe un comentario

Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.

publicidad