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DEBATE ABIERTO SOBRE LA CANDIDATURA A LA GENERALITAT

Fabra reta a los suyos: "Si alguien se quiere presentar, que lo diga"

X. AGUAR. 04/12/2014 El presidente de la Generalitat acusa la ausencia de respaldo específico de Madrid mientras los referentes del PPCV siguen manteniéndose al margen

VALENCIA. La manera de afrontar el debate sobre la posible candidatura a la Generalitat del actual presidente, Alberto Fabra, evidencia la soledad del líder del PPCV ante el futuro incierto teledirigido desde Madrid.

Al jefe del Consell no le queda ahora mismo ningún respaldo de consistencia en la formación ‘popular'. Ahora bien, en el PPCV -que se le pregunten a Eduardo Zaplana o Francisco Camps- los apoyos vienen y van según sople el viento.

A día de hoy, la realidad es que en Génova no están dispuestos a hacer ningún 'guiño' a Alberto Fabra. María Dolores de Cospedal ya se encargó de desinflar sus deseos de ser confirmado como candidato hace ahora un año. Este martes, la número dos del PP volvió a dejar la puerta abierta a que la dirección nacional haga la elección que considere oportuna: "Tenemos posibilidades de elegir entre varios candidatos", comentó, preguntada en rueda de prensa por las opciones de Esperanza Aguirre y del presidente valenciano.

Bien es cierto, como argumenta Fabra, que ningún candidato ha sido públicamente confirmado desde Madrid. También es verdad que la alcaldesa de Valencia, Rita Barberáse ha autoproclamado candidata públicamente en varias ocasiones en los últimos meses -incluso en una situación delicada con Nóos-y nadie en Génova se atrevió a decir absolutamente nada. De cualquier manera, los políticos de cierta altura o en un cargo importante como el que ostenta Cospedal, tienen -o se les presupone- la habilidad de decir las cosas sin expresarlas explícitamente. Es decir, y en esto coinciden distintos dirigentes ‘populares', si la secretaria general del PP hubiera querido tener un gesto tranquilizador hacia Fabra podría haber encontrado la manera.

El caso es que el debate no se cierra -y parece que se prolongará hasta enero o febrero- y el presidente valenciano se ve obligado a seguir respondiendo preguntas sobre el asunto. Este miércoles, sin ir más lejos, le tocó contestar sobre las palabras de Cospedal sobre su hipotética candidatura: "Nadie ha dicho que no pueda estar, al contrario, lo que dicen es que hay posibilidades", dijo. Preguntado por si contemplaba no ser candidato respondió: "No lo contemplo, y si alguien se quiere presentar, que lo diga", retó el jefe del Consell.

Dada la situación, y aunque pueda ser un error estratégico, ya apenas sorprende que Fabra arroje el guante -tanto a Cospedal como a sus compañeros del PPCV- de esta manera. El presidente ha tenido muy poco respaldo de Madrid en los últimos tiempos y sabe que no tiene la fidelidad de los principales referentes del partido en la Comunitat Valenciana.

Rita Barberá y Alfonso Grau

Como muestra, un botón: a Rita Barberá también se le preguntó ayer por las declaraciones de Cospedal: "Eso tendrán que preguntárselo a la señora Cospedal, yo no tengo nada que opinar al respecto. La señora Cospedal sabrá por qué lo ha dicho. Yo no lo sé", respondió la alcaldesa de Valencia. Estas palabras, aparentemente asépticas, pueden contraponerse por ejemplo a la manera cómo defiende Barberá a alguien de su plena confianza como Alfonso Grau.

Más aún, lo lógico es que la máxima responsable municipal, una dirigente que es recibida en La Moncloa por Mariano Rajoy con tratamiento de jefa de Estado -como ocurrió en septiembre-, sepa algo de este asunto de la candidatura a la Generalitat. Que no ponga empeño alguno en defender al actual presidente como cabeza de lista puede deberse a que su sintonía es nula o a que observa que sus posibilidades de ser candidato son cada vez menores. En cualquiera de los dos casos, son malas noticias para Fabra.

LA DISPERSIÓN DE LOS 'PESOS PESADOS' DEL PPCV

Catalá, Fabra, Císcar y Bonig

De la misma manera, el resto de referentes del PPCV tienen sus propias aspiraciones y ofrecen un respaldo muy débil al presidente mientras no sea designado oficialmente candidato. El líder provincial del PP de Valencia, Alfonso Rus, hace la guerra por su cuenta como ya ha demostrado con la creación de ‘TeleRus'. La coordinadora general del partido y consellera de Infraestructuras, Isabel Bonig, tiene -o al menos otros quieren que las tenga- aspiraciones como candidata. El vicepresidente y presidente provincial de Alicante, José Císcar, mira hacia su territorio aunque no se descarta para nada; y su homólogo en Castellón, Javier Moliner, el más joven de todos, aspira a revalidar su mandato al frente de la diputación consolidándose como un barón de futuro.

La situación no es la mejor para el jefe del Consell. Y sin embargo, Fabra todavía tiene alguna opción de salvar los muebles si es designado candidato. La irrupción de Podemos y la más que dudosa capacidad de reacción del PSPV-PSOE pueden dibujar una situación imprevisible en la que los ‘populares', si la izquierda no se pone de acuerdo, aun pudieran alcanzar la Presidencia aunque no obtengan la mayoría absoluta. A esta opción se aferra el jefe del Consell, que necesita cerrar a su favor de una vez el debate sobre la candidatura a la Generalitat.

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