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VALENCIA. El escultor Miquel Navarro ha remitido un requerimiento notarial al IVAM con motivo de la próxima cancelación de la exposición de su donación. El escultor presentó este miércoles al instituto dicho requerimiento, un día antes de que se celebre el Consejo Rector que decidirá sobre el destino de su obra.

En el mismo, redactado por el notario Salvador Alborch Domníguez, Navarro relata como se enteró por una "llamada telefónica" de que la muestra permanente de su obra se iba a cancelar, hecho que le fue confirmado después por las noticias aparecidas en la prensa local.

El escultor reclama al IVAM que le confirme si la Sala Permanente Miquel Navarro, inaugurada el 17 de Septiembre de 2013, se considera por parte del centro de arte valenciano en "cumplimiento de la cláusula segunda, apartado 2.3, letra a) del contrato de donación" o, por el contrario "debe el compareciente tener por no cumplida tal condición". En todo caso, el escultor "se reserva la aceptación del cumplimiento de la citada condición".

Igualmente pregunta "si se va a cumplir y cuándo" la promesa de la edición de un catálogo razonado de su obra, conforme a lo establecido en la cláusula segunda, apartado 2.3. letra b) del mismo contrato de donación. Navarro también "se reserva la facultad de aceptación del cumplimiento de tal condición", si bien en este caso "con sujeción al resultado del catálogo propuesto", dice el texto.

Por último, Navarro manifiesta "expresamente" que de la misma forma que aceptó la propuesta de fijar la la sala permanente sin necesidad de ampliar el museo, "no acepta ninguna modificación unilateral de la donación que suponga alteración de los términos establecidos en el citado contrato", el cual se firmó el 20 de diciembre de 2004.

El escrito presentado por el escultor constituye el primer paso para una hipotética retirada de la donación, extremo que asegura Navarro que no quiere llegar a hacer. Si las explicaciones dadas por la actual dirección del IVAM no le satisfacen, el escultor ya ha anunciado que solicitará a sus abogados que inicien una demanda para recuperar la obra donada, 525 piezas valoradas en su día en 18 millones de euros por el entorno del artista valenciano.