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En Blanquerías lamentan la falta de visión desde Madrid hacia los comicios autonómicos mientras que distintos dirigentes del partido temen que se redoble la estrategia de 'todos contra el PSPV' procedente de Podemos y de candidatos de la izquierda como Oltra (Compromís) y Blanco (EU)
VALENCIA (X. AGUAR). Los socialistas valencianos se encuentran bloqueados. Los comicios europeos fueron un duro golpe para la formación que lidera Ximo Puig, candidato a la Generalitat, dado que rompieron los esquemas que el PSPV-PSOE había trazado de cara a las elecciones autonómicas y locales de mayo de 2015.
Desde Blanquerías, la hoja de ruta estaba clara: dejar que el PPCV fuera hundiéndose mientras el PSPV dibujaba un tripartito en el que llevaría la voz cantante. Pese a que pudiera enunciarse públicamente el deseo por parte de los socialistas valencianos de llegar a ser primera fuerza política en las urnas, las señales emitidas iban encaminadas a liderar un gobierno junto a Compromís y Esquerra Unida. Los resultados de las elecciones europeas y los posteriores sondeos, que otorgan a Podemos una presencia muy relevante en la Comunitat Valenciana, han roto los planes de un PSPV que no termina de reaccionar.
'TODOS CONTRA EL PSPV'
El entorno de Puig sigue sin definir una estrategia clara ante el crecimiento de Podemos: el discurso interno del pinchazo del soufflé y el uso de la calculadora para reinterpretar los sondeos, apuntan a convertirse en dos grandes errores del PSPV que pueden pasarle una factura muy cara en mayo de 2015. Fuentes socialistas próximas a la dirección admiten a este diario su temor a que se acentúe el 'todos contra el PSOE' de la mano de candidatos de la izquierda como -la todavía no oficial- Mònica Oltra (Compromís) e Ignacio Blanco (Esquerra Unida).
De hecho, nadie esconde en el partido que desde el entorno de Puig se había trabajado con mayor ahínco la relación con los actuales síndics en Les Corts Enric Morera y Marga Sanz. Se espera que tanto Oltra como Blanco tejerán un discurso mucho más ofensivo contra los socialistas con el ánimo de arrancarles votos. La posible candidata de Compromís ya lo apuntaba este domingo en una entrevista en el diario Levante-EMV: "Si la aritmética lo permitiera, pactaría con Podemos y Esquerra Unida un Consell sin el PSPV; eso sí sería el verdadero cambio", señalaba Oltra, una de las supuestas 'aliadas' con la que los socialistas valencianos estarían, en teoría, condenados a entenderse para gobernar.
SIN RENTABILIZAR LA FUGA DE VOTOS DEL PPCV
Por otro lado, desde posiciones críticas hacia la cúpula de Blanquerías lamentan la falta de reacción ante Podemos y la débil capacidad para reivindicarse como una opción alternativa al PP. A día de hoy, uno de los grandes problemas de los socialistas a juicio de algunos dirigentes es su "invisibilidad" para el votante de centro. El PPCV, pese la amarga legislatura que está viviendo con los casos de corrupción, el desencanto de sus redes clientelares, el endeble liderazgo de Alberto Fabra o la pocas concesiones del Gobierno central, sigue manteniendo en todos los sondeos autonómicos en torno a un 30% de los votos. ¿Dónde recae el casi 20% de sufragios perdidos por el PPCV?
Esa intención de recoger los votos de centro perdidos por los 'populares' fue remarcada precisamente por el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, en su reciente visita a Valencia. "La gran mayoría de militantes del PP son gente honesta pero no así sus dirigentes, que han convivido con la corrupción durante años", recalcó.
Sin embargo, y de esto se quejan varios cargos intermedios y algunos dirigentes locales socialistas, el PSPV no está "rentabilizando" la caída de los 'populares'. "El ex elector del PP indeciso podría quedarse en casa, irse a UPyD, Ciudadanos, Podemos o incluso volver al PP. Pero no parece que los socialistas seamos la opción favorita para recoger ese votante", lamenta un responsable provincial del partido. Por el contrario, los más optimistas dentro de la formación opinan que precisamente el PSPV se está sosteniendo -relativamente- porque está recogiendo votos del centro aunque tiene fugas por la izquierda.
El problema de estrategia no es baladí. Las formaciones de izquierda atacan al PSPV como el otro miembro ilustre del bipartidismo -Podemos lo califica de 'casta'- y los socialistas no terminan de escaparse de la connotación peyorativa de esta etiqueta. Fuentes socialistas admiten que la dirección no está siendo capaz de apropiarse de la idea de "echar al PP" de la Generalitat y al mismo tiempo arrogarse el liderazgo de un cambio sin que exista un gobierno descontrolado. Esa falta de estrategia ante Podemos y las otras formaciones de la izquierda, que algunos sectores del partido achacan a la dirección, está ocasionando la falta de visibilidad como la opción de transición "tranquila" que, a su juicio, "necesita la Comunitat Valenciana".
DESCONEXIÓN DE FERRAZ RESPECTO A LAS AUTONÓMICAS
Una de las circunstancias que preocupa en Blanquerías y al propio líder del PSPV, Ximo Puig, es la estrategia seguida desde la dirección federal del partido en Madrid. A juicio de distintas fuentes consultadas por este diario, Ferraz tiene la mirada puesta en las elecciones generales de finales del año próximo y no está cuidando la importante cita que suponen los comicios autonómicos y locales del mes de mayo.
A juicio de veteranos dirigentes del partido esto es un error de bulto: si el PSOE no logra alguna victoria autonómica o un buen resultado que le permita gobernar en Madrid o Comunitat Valenciana, el líder Pedro Sánchez saldría 'tocado' de cara a su examen en las urnas. "No debería olvidar que ganó merced a los votos de Andalucía y de la Comunitat Valenciana", comentan en este caso fuentes próximas a la cúpula de Blanquerías a este diario, que discrepan con ciertas estrategias adoptadas desde Madrid poco enfocadas hacia la inminente cita con las urnas. "Estamos al final de una legislatura, no al principio. Hay que volcarse en las elecciones", recalcan las citadas fuentes.
En este capítulo referente a las relaciones con Madrid también hay algún reproche para el líder de los socialistas valencianos, Ximo Puig, dado que algunos dirigentes -especialmente del sector crítico- consideran que como candidato a la Generalitat debería dejar el Congreso de los Diputados para centrarse "al 100%" en la Comunitat. "Aunque el Parlamento no le robe demasiado tiempo, sería un gesto importante", admite un miembro de la Ejecutiva.
En definitiva, una serie de asignaturas pendientes a juicio de los críticos que el líder del PSPV debe afrontar en los próximos meses si quiere ser presidente de la Generalitat. La preocupación entre los socialistas sigue creciendo ante escenarios complicados para sus intereses: ya no solo por la evidente dificultad de alcanzar al PPCV, sino por la posible pérdida del segundo puesto. Una incógnita respecto a los posibles resultados que, y este es otro temor del PSPV, podría terminar en el dilema para Puig de tener que apoyar a una coalición sin los socialistas integrada por Podemos, Compromís y Esquerra Unida o permitir que continuara un gobierno del PP en minoría.
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