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José Vicente Morata y Alberto Fabra en la única fotografía del encuentro, remitida por Cámara Valencia el pasado año
VALENCIA. Cada año, la plana mayor de la economía y la política mundial se reúne desde 1954 en una cumbre privada. Se les conoce como el Club Bilderberg, por ser en esta localidad holandesa donde se celebró el primer encuentro, y la nómina de participantes se limita a unas 130 personas: los auténticos dueños del mundo, según algunos.
De forma más modesta y más alejada de interpretaciones conspiranoicas, el presidente del Consejo de Cámaras de la Comunitat valenciana, José Vicente Morata celebra al final del verano un encuentro privado desde hace un lustro con poco más de una treintena de representantes de la economía valenciana para exponer las perspectivas del nuevo curso y hacer repaso "de lo que importa" ante el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra y los consellers de Hacienda y Economía, Juan Carlos Moragues y Máximo Buch.
En mangas de camisa, llegan conduciendo en muchos casos sus propios coches los presidentes y consejeros delegados de las principales empresas valencianas a una discreta barraca en pleno parque natural de l'Albufera. Este ambiente informal, rodeado de la más absoluta discreción sin prensa ni testigos, la cita no tiene un fin en concreto, pero vale para mucho, según distintos participantes.
EL MENÚ DEL DEBATE
La estructura del acto es algo más formal que las cenas que celebra en su propia barraca en Náquera Federico Félix, expresidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) cada cierto tiempo. En este caso, la bienvenida correrá a cargo del anfitrión que cederá la palabra al presidente Fabra.
A continuación, cada participante pone en común sus objetivos, las impresiones sobre la marcha de la economía y las necesidades de la Comunitat, con posibilidad de preguntar sobre determinados aspectos al jefe del Consell o al resto de participantes, como los representantes de las entidades financieras.
Se espera que se hable de la situación de las exportaciones, el comportamiento del mercado, la contención del crédito bancario, la situación de grandes infraestructuras como el corredor mediterráneo u otros aspectos que, dependiendo de sectores, se entienden como claves.
EL ASUNTO MÁS ESPINOSO
Los organizadores aseguran que el tema central de la reunión no es la polémica entre Valencia y Madrid sobre la reforma del sistema de la financiación, a la que Rajoy se niega y que ha servido al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y su equipo para hacerles distintos desplantes al gobierno valenciano y al empresariado local.
Sin embargo, esto no quiere decir que el asunto no se descuelgue en alguna de las intervenciones de los invitados de carácter más irreductible, según distintos invitados. Aunque no todos los participantes consideran que sea el marco más adecuado para este asunto.
"La comida de la Cámara no está pensada para que nadie se ponga reivindicativo", señala uno de los asistentes, "sino para ver cómo están los ánimos". Aunque esta actitud no es compartida de forma generalizada, algunos entienden que no es una buena idea hacer que Fabra pase un mal trago, ya que sigue siendo el puente institucional con Madrid, a pesar de los deslices que pueda haber cometido.
En todo caso, pesa en la opinión de muchos empresarios la incapacidad demostrada por el presidente de la Generalitat a la hora de imponer exigencias planteadas por los empresarios o el hecho de comprometerse a convocar una reunión con Montoro en julio y que el ministro le diera largas y aplazara el encuentro hasta después del verano. Una cita que sigue pendiente de fecha.
REDUCIDA NÓMINA DE INVITADOS
En esta ocasión, los elegidos han sido sólo 37 y entre ellos se cuentan tanto Héctor Colonques, presidente de Porcelanosa; Federico Michavila, presidente de Torrecid; además de responsables de primer orden de Mercadona, Consum, Telefónica, Vossloh, Agricultores de la Vega, SRG Global o Ford España, aunque este último estaba en duda hasta última hora.
A ellos se suman los delegados territoriales de BBVA, Banco Santander, Caixabank, Bankia, SabadellCAM y Bankinter; la plana mayor de la Cámara de Valencia con los vicepresidentes Vicente Folgado y Vicente Lafuente; el naviero y presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), Vicente Boluda; el presidente de la patronal de la provincia de Valencia CEV, Salvador Navarro; Juan Cámara (Torrescamara) y Pau Villalba (Mercadona).
También acuden la presidenta de Cámara Castellón, Lola Guillamón; representantes de Cámara Alicante; el presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia, Rafael Aznar; los presidentes de la Federación Valenciana de Empresarios de la Construcción (Fevec), Francisco Zamora; el de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja), Cristóbal Aguado; el presidente de la Confederación de Cooperativas, Emili Villaescusa; y representantes de la Universidad Politécnica de Valencia y de la Universitat de València y de sus consejos sociales.
Menuda competició de figues molles. Aixina va valencia, se creuen que van a rebufo de madrid i lo que fan es menjarse la m.r.d. Sense banca i sense proactivitat propia, mes dependencia i menos economia.
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