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ambiente tenso en el segundo escalón de la Generalitat

Malestar entre los altos cargos por la línea roja de Fabra y la "desprotección" del Consell

X. AGUAR. 19/07/2014

El pasado jueves, en la reunión habitual preparatoria del pleno del Consell, se produjeron voces discrepantes ante el inminente cese de Eusebio Monzó, que ha dejado el cargo tras su imputación esta misma semana

VALENCIA. Este viernes se confirmó la noticia esperada desde el miércoles pasado. La portavoz del Consell, María José Catalá, anunciaba el cese de Eusebio Monzó, secretario autonómico de Hacienda, tras ser imputado por supuestas irregularidades en la concentración de Centro de Convenciones de Castellón, cuyo proyecto correspondió al arquitecto valenciano Santiago Calatrava.

El número dos del conseller Juan Carlos Moragues, cuya imputación se debe a su responsabilidad como  director general en Proyectos Temáticos años atrás, es sustituido por el actual responsable del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), Enrique Montes. La salida de Monzó obedece a la estricta 'línea roja' establecida por el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, quien a lo largo de la legislatura ha forzado la dimisión de los altos cargos del Ejecutivo que han sido imputados en distintas causas.

Precisamente esta doctrina del presidente salió a relucir en la reunión habitual de subsecretarios y secretarios autonómicos que se celebra los jueves para preparar el pleno del Consell del día siguiente. Fuentes de la Generalitat señalaron a este diario que varios altos cargos expusieron su malestar por el caso Monzó y lamentaron la rigidez aplicada por Fabra en estos casos.

Eusebio MonzóEn esta línea, algunos de los altos cargos presentes coincidieron en que existía una "desprotección" por parte del Consell a los dirigentes del segundo escalón de la Generalitat, sobre los que recae en la mayoría de los casos la responsabilidad de firmar distintas actuaciones que, a posteriori, están siendo llevadas en algunos casos a los tribunales.

El caso de Monzó ha resultado especialmente significativo por varios motivos. Uno de ellos es que otro de los imputados en este asunto es el subsecretario del Ministerio de Educación, Fernando Benzo, por su etapa como director de oficina de Calatrava. Sin embargo, el responsable de esta cartera, José Ignacio Wert, le mantiene en el cargo a diferencia de Fabra, que no ha vacilado en propiciar la salida de Monzó. Además, cabe recordar que esta baja es una pérdida muy inoportuna para el conseller de Hacienda, dado que el secretario autonómico viene siendo una pieza fundamental tanto en la gestión de pagos como en las relaciones con Madrid en la negociación del nuevo sistema de financiación. 

En este sentido, se da la circunstancia que el PP en el ámbito nacional no sigue la misma tesis de Fabra en lo que se refiere a las imputaciones. De hecho, las conclusiones arrojadas en la última escuela de verano de la formación 'popular' celebrada la pasada semana apuntan a que la 'línea roja' del partido en España se sitúe en la apertura de juicio oral y no en la imputación. Es decir, desde Génova no coinciden con la cruzada llevada a cabo por Fabra en este ámbito, lo que provoca que haya distintas varas de medir para los cargos nacionales y para los del Gobierno valenciano.

LOS ALTOS CARGOS QUIEREN REUNIRSE CON FABRA PARA TRATAR ESTE ASUNTO

Juan Carlos Moragues y Alberto FabraFuentes del Ejecutivo señalaron a este diario que el malestar en el segundo escalón ha ido creciendo en los últimos meses. Prueba de ello, recalcan, es el goteo de abandonos que se han producido en las distitnas consellerias en dirección a la empresa privada o de regreso a las plazas que algunos ostentan. Cada vez existen más dudas en los subsecretarios y secretarios autonómicos para estampar su firma en determinadas órdenes o actuaciones: las citadas fuentes apuntan a que se ha creado cierto "pánico" a la hora de suscribir iniciativas, lo que está ralentizando determinados procesos.

En este sentido, desde el segundo escalón han planteado reunirse con el presidente Fabra para tratar de redibujar la estricta 'línea roja' establecida por el jefe del Consell.

 

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6 comentarios

Anton Pirulero escribió
20/07/2014 22:11

Bueno, yo creo que el producto de los comentarios es más bien paro+políticos ladrones y corruptos+inutiles=malestar

roig i negre escribió
20/07/2014 10:44

Los comentarios de ZEN y Traductor son muy acertados. Yo simplemente añadiría que muchos altos cargos hacen contactos con empresas y al final acaban utilizando la puerta giratoria y punto. Conzco uno caso muy de cerca que da mucho JUEGO (bingo, maquinas tragaperras...etc) En fin, los altos cargos del Consell son gente mediocre en sus profesiones que solo buscan la puerta giratoria que les de una posición que por si solos nunca hubieran conseguido.

Chimo escribió
20/07/2014 01:41

Los dos comentarios anteriores no lo han podido decir mejor. A modo de resúmen, malestar = paro

Antonio escribió
19/07/2014 12:31

Como decia mi abuela....."gentola"...

Traductor escribió
19/07/2014 10:09

La conjura de los necios. Traducido: Todos sabemos por qué llegamos a ser altos cargos. Por nuestras relaciones personales, y nuestra obediencia al que manda, sea quien sea, y sin tener en cuenta nuestras obligaciones legales. Si alguno es competente, es un error del sistema. Si alguno respeta la legalidad sobre los caprichos del jefe, sabe que tiene las horas contada en el puesto. ¿Qué espero a cambio del riesgo legal y la sumisión total? Ascender y cobrar. Ascender para recaudar más. Y recaudar fuera de nómina, porque ya sabemos que en la Administración no se puede cobrar legalmente lo suficiente, si así fuera quizá habría más presencia de los honrados y profesionales, a los que nos ha costado expulsar de la estructura. Y ahora resulta que me piden cuentas por lo que recaudé, y el jefe dice que no sabe nada de lo que hice para hacerle feliz, y que él cobrara más que yo. Ahora resultará que he de estudiar los expedientes antes de firmar, conocer la legalidad y velar por el interés público…¡¡Esto es inconcebible!!!¡¡Me voy¡!, pero..¿a dónde? todo el mundo piensa que mi Partido, el PPOE , va a perder las elecciones, mis contactos, deudas y favores ya no valen casi nada, y todo el mundo sabe que no sé hacer la “o” con un canuto…Nadie me quiere…

ZEN escribió
19/07/2014 09:54

Lo raro no es que protesten sino que todavía quede alguien de prestigio profesional que quiera aceptar un cargo público. Mal pagados, con una estabilidad laboral que no alcanza unos pocos meses para acabar muy probablemente imputado, desprestigiado profesionalmente. Da igual que luego salgan inocentes las dudas sobre su honorabilidad quedan grabadas de por vida en Internet. NADIE con dedo y medio de frente y que tenga otra opción quiere un cargo público. Los técnicos justo los que están detrás de los cargos directivos, que no asumen responsabilidad alguna, que nadie se atreve a cambiar su status lo más mínimo, que ganan más o menos igual(pero toda la vida y no unos pocos meses), consideran a los Directores como “otro pringao” al que hay que torear un tiempo. Esto pasa cuando los Lideres y en consecuencia los partidos no dan la talla. Camps llenó la Administración de “directivos de paja” sin talla profesional y Fabra está vaciando la Administración de los Directivos que la tienen. Conclusión que los Empresarios Valencianos y como Fabra pinta más bien nada y Rajoy y Montoro no les hacen caso,…. piden ¡¡¡ayuda¡¡¡ a Susana Diaz Presidenta Socialista de Andalucía, Comunidad autónoma con más paro de toda Europa. Algo relacionado con el “sentido común” no funciona adecuadamente en Valencia

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